Single’s Day o Día del Soltero en Asia, El Global Shopping Day de AliExpress, las rebajas de eBay, el Black Friday americano seguido del CyberMonday justo al terminar este… Noviembre es un mes de ruina para los que les guste comprar online, de ruina absoluta. Un mes en el que la gente va aprovechando para hacer sus compras navideñas y todas las marcas sacan la artillería pesada.
Black Friday 2021
Aunque mañana es oficialmente el Viernes Negro 2021, lo cierto es que la mayoría de tiendas, websites y servicios llevan desde el viernes pasado con descuentos y rebajas. Será mañana cuando suelten la artillería pesada, pero es fácil haberse dejado llevar gastando de más desde el finde pasado.
Y la tentación por comprar algo o quitarse de encima todos los regalos de Navidad puede llevar a liquidar tu presupuesto. ¿Estás harto/a de verte arrastrado a una vorágine de compras compulsivas? Aprende a no echarles cuenta o al menos a comprar de forma más prudente.
No piques con las ofertas
En mercados como el de los móviles o los videojuegos, la palabra mágica para que saquemos la tarjeta es ‘Reserva ya’ (o la traducción literal USA que es la palabra Preventa). Y más en la actualidad, ya que las empresas se han dado cuenta de que al sacar una primera tirada de reservas muy muy limitadas de un producto consiguen con ello que las preventas se disparen. E
El primer truco para controlaros el gasto es sencillo: No piques con todo lo que ponga “Oferta, descuento 24 horas, últimas unidades, Reserva ya”. Es difícil no hacerlo, sabemos que cuesta mucho, pero simplemente esperad 5 minutos, sólo 5 minutos antes de clickar. ¿Por qué 5 minutos? Porque es tiempo más que suficiente para calmar el ansia, el ‘hype’ por esa cosa. Sal del navegador, cierra el portátil, vete a otra sección de la tienda, ponte a jugar a una app, lo que sea, pero aparta la mente de esa oferta 5 minutos.
Luego vuelve y revisa el precio y las condiciones. ¿Te sigue pareciendo una ganga o ya ves cosas que no son tan atractivas como hace 5 minutos? Y la pregunta clave: ¿Realmente lo necesitas, o será otro trasto cogiendo polvo en la estantería y sólo para enseñar a los amigos?.
No te pases de tu precio marcado
Todos tenemos un presupuesto al mes. Y si hacemos bien las cosas, lo tendremos calculado. Si necesitamos DE VERDAD algo, como ropa o un teléfono por ejemplo, marquémonos antes el límite en la cabeza. Si vamos con la idea de comprar un chaleco y unos pantalones por 50-60 euros y los encontramos a ese precio, no nos pasemos buscando más cosas.
Si necesitamos un portátil y tenemos un límite de 500€, no pillemos el Macbook de 1200€ porque es más bonito y, por descontado, desechemos el pensamiento de “bueno, ya el mes que viene veré como lo pago”.
Tu Lista de compras cerrada
Tienes una idea de qué quieres regalar -y qué capricho te gustaría darte-, pero de repente empiezas a abrir webs, o vas hoy a una tienda y empiezas a ver productos que no tenías pensado comprar en ese momento. La pieza clave del ahorro es siempre LA LISTA.
Tener una lista de lo que necesitamos (y que sea coherente con esa necesidad) es lo primero, y lo segundo es ceñirse a ella y no salirse. Por descontado somos humanos y podemos permitirnos un capricho, pero cuidado, porque si ves que esto está muy barato, que esto otro es una ganga, etc, al final te cargarás el presupuesto para regalos en una sola compra.
Si estás ahorrando, ahorra
Queremos salir de fin de semana, comprarnos una TV 4K, una cámara de 5.000 euros, un vestido de fiesta o simplemente no entramparnos por culpa de los Reyes Magos. Estamos ahorrando para cumplir esos objetivos, por lo que debemos seguir centrados en esa tarea.
Permitirte un pequeño arrebato consumista online en un mal día o salir a cenar con los amigos es algo permisible, pero si se te antoja un juego de 70 euros, unas Nike de runner de 100€ o el chuletón ibérico de 50 €, recuerda que son cantidades a restar de tu plan de ahorro. Sólo piensa unos instantes si vale la pena quedarse atrás en tu objetivo por darnos un capricho pasajero..