Identificar un cáncer de piel con sólo la cámara del móvil, una herramienta IA de Google

Que hace mucho que el móvil no es simplemente un móvil es un hecho contrastado. Lo que llevamos en el bolsillo es tecnología punta, y cada vez más inteligente y llena de recursos, capaz de aprovechar recursos y tecnologías de IA.

Y precisamente la inteligencia artificial (IA) tiene el potencial de ayudar a los médicos a atender a los pacientes y tratar las enfermedades, desde mejorar el proceso de cribado del cáncer de mama hasta ayudar a detectar la tuberculosis de forma más eficiente. Cuando combinamos estos avances en IA con otras tecnologías, como las cámaras de los teléfonos inteligentes, se abren nuevas vías para que la gente también esté mejor informada sobre su salud.

Detectar el cáncer con el móvil

Cada año hay casi diez mil millones de búsquedas en Google relacionadas con problemas de piel, uñas y cabello. 2.000 millones de personas en todo el mundo sufren problemas dermatológicos, pero hay una escasez global de especialistas. Aunque el primer paso de muchas personas es acudir a la barra de búsqueda de Google, puede ser difícil describir lo que se ve en la piel sólo con palabras.

En su evento Google I/O, el gigante de la Red ha compartido un avance de una herramienta de asistencia dermatológica potenciada por la IA que ayuda a entender lo que ocurre con los problemas relacionados con el órgano más grande del cuerpo: la piel, el pelo y las uñas. Utilizando muchas de las mismas técnicas que detectan la enfermedad diabética del ojo o el cáncer de pulmón en las tomografías, esta herramienta te acerca a la identificación de problemas dermatológicos -como una erupción en el brazo que te molesta- utilizando la cámara de tu móvil.

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IA para la asistencia dermatológica

La herramienta de asistencia dermatológica potenciada por la IA de Google es “una aplicación basada en la web que esperamos lanzar como piloto a finales de este año, para que sea más fácil averiguar lo que puede estar ocurriendo en tu piel”. Una vez que inicies la herramienta, sólo tienes que utilizar la cámara del smartphone y sacar tres fotos del problema de la piel, el pelo o las uñas desde diferentes ángulos.

A continuación, se te harán preguntas sobre tu tipo de piel, el tiempo que llevas con el problema y otros síntomas que ayudarán a la herramienta a reducir las posibilidades. El modelo de IA analiza esta información y recurre a sus conocimientos sobre 288 enfermedades para ofrecerte una lista de posibles enfermedades coincidentes que puedes investigar más a fondo.

Para cada afección coincidente, la herramienta mostrará información revisada por dermatólogos y respuestas a las preguntas más frecuentes, junto con imágenes similares de la web. Aunque hay que dejar claro que “la herramienta no pretende ofrecer un diagnóstico ni sustituir el asesoramiento médico, ya que muchas afecciones requieren la revisión de un médico, un examen en persona o pruebas adicionales como una biopsia.

Más bien "esperamos que le dé acceso a información autorizada para que pueda tomar una decisión más informada sobre su próximo paso”. Basándose en las fotos y en la información que proporcione, te ofrecerá sugerencias sobre las condiciones.

Aprobada en Europa, no en USA

El modelo IA que maneja la herramienta tiene en cuenta factores como la edad, el sexo, la raza y los tipos de piel: Desde la piel pálida que no se broncea hasta la piel morena que rara vez se quema. Y dicha IA ha sido entrenada con:

-Datos que abarcan alrededor de 65.000 imágenes y datos de casos de afecciones cutáneas diagnosticadas, millones de imágenes curadas de problemas de la piel y miles de ejemplos de piel sana, todo ello en diferentes grupos demográficos.

Recientemente, el modelo de IA ha superado con éxito la validación clínica, y la herramienta ha recibido la etiqueta CE como dispositivo médico de clase I en la UE- aunque todavía no está disponible en los Estados Unidos. La idea de poder anticiparse en casos peligrosos como un cáncer de piel simplemente usando el móvil puede ayudar sin duda a aumentar la cantidad de detecciones tempranas, necesarias para que muchos casos se salden con éxito.