Hace dos décadas más o menos, el sector de la telefonía móvil dejó de ser sólo para unos pocos (y ricos) elegidos, y gracias a marcas como Nokia o Ericcson, cualquiera pudo sentir eso de ir por la calle con su propio teléfono móvil. De repente las cabinas se quedaron obsoletas, todo el mundo empezó a estar localizable las 24 horas del día. Y desde que empezó el siglo 21, los móviles evolucionaron a velocidad de vértigo, añadiendo nuevos diseños, pantallas más grandes, e incluso displays táctiles. Pero hacia el 2007 quedó patente que el sector estaba tocando techo. Hacía falta algo nuevo, radicalmente nuevo.
Evolución del móvil Apple
Al mismo tiempo que el sector de los móviles creció y se estandarizó, la música cambió con el cambio de siglo gracias a Apple y su revolucionario iPod, el walkman del nuevo siglo, que revolucionó el mundo de la música e hizo que se trasladara a los nuevos cánones digitales. Lo curioso era que no pocos seguidores pedían a Apple que implementase algún tipo de teléfono en el iPod, para así poder hacer llamadas y no tener que llevar dos aparatos a la vez en el bolsillo. De 2005 a 2007 en Apple trabajaron de forma frenética para crear el siguiente sueño de Steve Jobs, el mismo que un 9 de enero de 2007 se hizo realidad.
¿Qué pasó ese día? Que Apple celebró un evento para la historia. Jobs, con el aspecto e indumentaria con los que será recordado siempre, presentó al mundo el iPhone, un móvil que añadió a su definición un concepto que hasta ahora no se había hecho oficial -el N-Gage de Nokia por ejemplo había salido antes: el Teléfono Inteligente, o Smartphone, un móvil que servía para llamar, enviar mensajes, pero también para navegar por Internet, enviar correos, fotos a través de la Red, escuchar música, ver vídeos, etc, y con una pantalla enorme, táctil y un sólo botón frontal para manejarlo.
Había nacido no sólo el teléfono Apple, sino uno de los inventos más importantes y trascendentales de los últimos dos siglos. Un dispositivo que en 12 años no ha hecho más que evolucionar, como el vídeo del canal Apple Explained se encarga de reseñar mostrando la evolución del iPhone, su diseño y sus características, desde el modelo original hasta los recientes iPhone XS, XS MAX y XR de 2018, pasando por el revolucionario diseño del iPhone X o el icónico iPhone 5.
Un dispositivo que actualizó el mundo
En 2007 el móvil era un dispositivo más, un aparato a nuestro servicio. Ahora ¿cuántos viven por y para su móvil? El smartphone ha conectado al mundo entero, y podemos estar en el metro yendo al trabajo en Madrid y chateando en tiempo real con un amigo que está durmiendo en Tokyo mientras compramos algo en una tienda americana. Las redes sociales han cambiado la sociedad, la forma de relacionarnos, y en el teléfono llevamos apps con las que pagamos, controlamos nuestra cuenta corriente, hacemos documentos, enviamos informes, subimos vídeos, guardamos fotos, consultamos mapas…
La vida entera en un aparato. Y el primer iPhone fue el original, el modelo en el que todas se basaron, el estándar a seguir. Apple creía haber revolucionado en sí el sector de los móviles, pero visto ahora, 12 años después, resulta que estaba anticipando un futuro en el que todo es ‘smart’: la ropa, los relojes, los asistentes como el Alexa de Amazon o el HomePod de Apple, las gafas, los juguetes, los vehículos, las casas…
Y todo eso de un móvil. Ahora mismo el sector de la telefonía móvil vuelve a estar estancado, vuelve a necesitar un revulsivo tan radical como el que tuvo hace una década. La única pregunta es, ¿quién se lo dará? ¿Será de nuevo Apple? De momento no podemos contestarla, pero sí felicitar al terminal que lo cambió todo, a todos los que en Apple se dejaron la piel durante esos agotadores dos años, y al ambicioso genio de Steve Jobs, que consiguió lo que quería: cambiar el mundo.
O al menos, conectarlo.