Le borran un vídeo y la cuenta de YouTube y va a la sede de Google amenazando

Nos imaginamos las oficinas centrales y sedes de mega-corporaciones del estilo de Google o Facebook como cuarteles impenetrables, edificios hasta arriba con la más moderna seguridad. Pero la verdad es que en cualquier momento puede desatarse una tragedia. Hace casi un año, una YouTuber abrió fuego en la sede central de YouTube, hiriendo a tres personas antes de suicidarse, y todo por creer que la plataforma había “filtrado y discriminado” sus vídeos veganos y sobre los derechos de los animales.

Un vídeo para hacerse millonario

Kyle Long, de 33 años, y con problemas mentales desde la juventud, vive en Waterwille, en el Estado de Maine, EEUU. Un día, el amigo Long tiene una idea repentina, una chispa de genio en forma de vídeo que según él le hará millonario y les hará millonarios a sus familias. Obsesionado con el vídeo, lo graba y le cuenta a su familia y amigos que está planeando hablar con los ejecutivos de Google sobre él, ya que está seguro de que sus ideas serán tan atractivas para los ejecutivos del gigante de la Red, que le pagarán millones de dólares por ellas. Unas ideas para incluso resolver el problema del hambre en el mundo.

Según Samatha Long, su esposa, el vídeo es extraño, estrafalario y confuso, un sinsentido que el orgulloso Long sube a YouTube tras hacerse una cuenta, un vídeo que le dará 1.000 millones $ con los que se irá a Mexico. La esposa intenta disuadirlo de que YouTube no le pagará por esa idea y menos semejante fortuna. Pero “no puedes disuadir a Kyle de nada una vez lo tiene claro“.

Samantha decide borrar el vídeo, porque aunque las intenciones de su marido parecen buenas, el vídeo es una locura. Obviamente Kevin, después del curro de hacerlo, se enfada porque el vídeo y su cuenta de YouTube han sido borrados. Su esposa, con miedo a que estalle delante de sus hijos, le dice que han sido Google y YouTube los que lo han borrado.

3.300 millas a Google

¿Qué hace Kevin? Decide que va a ir a la sede de Google a exigirles que vuelvan a activar su cuenta y subir ese vídeo con las ideas de 1 millón de dólares que puede cambiar su vida. Y ni corto ni perezoso, se monta en su coche y conduce desde Maine hasta California para ello, recorriendo 3.300 millas, unos 5.310 kilómetros. Primero va a Boston, a ver si localiza las oficinas de Google, pero al no dar con ellas llama a su mujer desde Kansas y le dice que va a ir a California, a ver si da con la sede central.

Esperad, que ahora es cuando la cosa se pone peor: Resulta que Long tiene cargos criminales en su ficha y es conocido por la Patrulla Estatal de Iowa por un accidente de tráfico sin heridos y por haber destrozado el baño de una gasolinera. Un ‘State Trooper’ o policía estatal le da el alto mientras atravesaba Iowa, y Kevin Long le dice “voy de camino a Mountain View para hablar con los ejecutivos de Google sobre mi canal de YouTube”, dejándole claro al oficial que estaba cabreado por lo sucedido con Google.

El oficial da parte a sus superiores, que informan a los oficiales de policía de Mountain View, en California, los cuales habían recibido también avisos de los oficiales de Waterwille, Maine. El pasado fin de semana, Kyle Long es detenido por la policía de Mountain View bajo cargos de realizar amenazas contra Google, encontrando en su coche tres bates de beísbol.

Arrestos, Bipolaridad y medicación

Kevin Long, padre de Kyle ha declarado que su hijo podría haber estado enfadado, pero que nunca habría optado por la violencia, asegurando que “algo malo le sucede”. Samantha, que lleva días sin hablar con su marido, señala que Kyle “no habría dañado a nadie. Solo intentaba hacer del mundo un lugar mejor“, aduciendo a que sus tres hijos juegan en las ligas infantiles de Béisbol, y el propio Long lo hace en una liga de softball, por lo que es normal que tuviese bates en el coche junto a cascos y guantes.

¿Qué le sucede a Kyle Long? A los 16 años fue condenado por la muerte de un amigo, cuando los dos conducían borrachos un vehículo que estrellaron. Cuando salió de la cárcel, fue diagnosticado con trastorno bipolar, y cada vez que ha dejado de tomar la medicación, ha tenido problemas con la Ley. De hecho, hace 4 años fue perseguido por la Policía en una autopista interestatal, y la única excusa que dio a su padre es que pensaba que “le estaban dando escolta presidencial, por lo que no detuvo el coche“. Google de momento no se ha pronunciado sobre lo sucedido.