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The Elder Scrolls: Blades, así es la entrega móvil
Probamos la primera incursión de The Elder Scrolls en móviles
Una de las novedades más sorprendentes de la pasada conferencia de Bethesda en el E3 2018 ha sido la llegada de su mítica franquicia al mundo móvil. The Elder Scrolls se zambulle en dispositivos iOS y Android bajo el sobrenombre ‘Blades’, un intento por trasladar las sensaciones de las entregas de sobremesa a la palma de la mano. No han sido pocas las veces que la compañía ha intentado llevar el mundo fantástico a una plataforma portátil. Allá por 2006, junto a una PlayStation Portable recién llegada al mercado, veíamos cómo sus planes pasaban por The Elder Scrolls Travels: Oblivion, una aventura accesoria de TES: IV que trasladaba las sensaciones del juego principal a la pequeña pantalla. Obviamente tenía los sacrificios propios de las limitaciones de dicho hardware: el mundo abierto daba paso a una aventura encorsetada y puramente regida al compás del guión, la pérdida del segundo joystick hacía que el esquema de control variara respecto al tradicional, etcétera. Entre una cosa y otra, el que parecía uno de los proyectos más ambiciosos para la pequeña de Sony, terminó acabando en el abismo de la cancelación, para lamento de sus seguidores. No ha sido hasta la llegada de Nintendo Switch cuando por fin hemos podido disfrutar de una experiencia The Elder Scrolls plenamente funcional en portátil.
La idea detrás de Blades es realmente atractiva para el público acérrimo a la saga. En primer lugar controlaremos a un Cuchilla que, por una serie de cuestiones que no nos han sido reveladas hasta el momento, se ve forzado al exilio. Lejos de su hogar, vuelve a su tierra natal para emprender una nueva vida llena de aventuras y duro trabajo por devolver el antiguo esplendor de su vieja ciudad. Es bien sabido que la Orden de los Cuchillas sirven al Emperador durante las misiones más especiales, actuando como una especie de servicio secreto que siempre vela por proteger los intereses y la integridad del cabecilla de toda Tamriel. Durante la cuarta entrega numerada, pudimos echar un vistazo en mayor profundidad sobre los entresijos del grupo en la provincia de Cyrodiil. Pese a terminar con un sabor agridulce, jugaron un papel fundamental para erradicar la crisis de Oblivion que terminó por la desaparición de los dos últimos Sangre de Dragón conocidos en esos momentos.
El estudio todavía guarda con recelo algunos aspectos argumentales clave para determinar en qué marco histórico cuadra en la franquicia, así como la provincia donde se desarrolla. Lo que si podemos conocer y, tal como sucedió con The Elder Scrolls: Online, es que son semejantes en el plano visual con Skyrim. Salvo los cambios naturales en interfaces para amoldarse al diseño móvil, tanto armaduras, mazmorras y personajes guardan similitudes con los empleados en la tierra de los nórdicos. Blade se divide en tres grandes modos de juego: Ciudad, donde transcurre todo el modo historia para un jugador. En ella deberemos completar misiones recaudadas por las calles de la ciudad con el fin de devolver la ilusión en la región. Por otro lado nos encontramos la Arena, un modo de juego multijugador donde podremos enfrentarnos a jugadores por todo el mundo en un duelo uno contra uno. En una instancia, y no menos importante, tenemos a Abismo, una especie de mazmorra ilimitada donde obtener recompensas especiales mientras aguantamos el máximo de tiempo en ella. Estas dos últimas contarán con sus propios marcadores globales para comparar nuestra travesía con la de otros jugadores.
El mayor grueso del juego se encontrará en el modo principal. La Ciudad actuará como Hub diferente para cada usuario. A medida que vayamos renovando su semblante, desbloquearemos nuevos distritos donde obtener contratos de mayor envergadura. Naturalmente, contaremos con posibilidades de personalización estética para amoldar el semblante de las calles a nuestro antojo. Tendremos la posibilidad de viajar a las ciudades del resto de jugadores para conocer de primera mano qué tal lucen, incluidos amigos y desconocidos.
Toma de contacto
Durante el presente E3, hemos podido echarle el guante durante unos minutos a la demo que la compañía ofrecía en su stand principal, resolviendo en un primer momento las dudas que nos dejó su vídeo de presentación. Lo que más nos ha llamado la atención es lo poco intuitivo que resulta su control. Si pulsamos levemente la pantalla, se desplegarán dos joysticks en cada lado para controlar el movimiento y la cámara. En cambio, si prefieres, puedes ir pulsando en secciones del escenario para avanzar como si de un RPG clásico se tratara. Diferenciar entre los dos tipos de control es un tanto confuso, puesto que a veces no recibe bien la orden del analógico y realiza otra acción que no deseábamos.
Otra de las grandes cuestiones: el combate. Cuando se acerca un enemigo, el juego pasa automáticamente al modo combate. Durante la pelea no podremos movernos. El enemigo se coloca en la parte frontal de la pantalla, desplegando su barra de salud justo encima de su cabeza, haciendo lo propio la interfaz con nuestras posibilidades de acción. Como es habitual en la saga, contaremos con tres grandes rasgos indicadores: Magia, Salud y Energía. En la parte izquierda se habilitarán las acciones mágicas seleccionadas en nuestro inventario (de tener), mientras que en la derecha el principal protagonista es la acción de atacar estándar. Para asestar golpes a nuestro rival, tendremos que mantener pulsado el botón de ataque. Una vez realizado, un círculo naranja aparecerá. Al concordar con el ataque, deberemos soltar nuestro dedo para realizar la acción.
Por supuesto, si somos de utilizar un escudo que acompañe a nuestra arma de una mano, podremos bloquear (parte izquierda) o golpear con él como una habilidad especial sin pasar por el filtro del ataque básico. El juego nos permite realizar golpes desde otros ángulos si pulsamos en otras partes de la pantalla, pero lo cierto es que no lo hemos encontrado muy útil. Otra de las características del combate es que solo se puede combatir con un enemigo a la vez. Si aparecen varios adversarios en el escenario, los últimos se pondrán en cola mientras resolvemos la disputa con el que nos ha encarado primero. Lo cierto es que ésto resulta un tanto anticlimático, de hecho un combate entre varios adversarios podría abrir el camino al uso de estrategias más elaboradas, aprovechando mejor las posibilidades que el juego nos permite.
La demo a la que tuvimos acceso tan solo sucedía en una cueva, por lo que no pudimos comprobar ni el hub ni ninguna de las características en línea.
Futuro alejado del formato móvil
Bethesda Softworks ha querido centrar sus esfuerzos iniciales en las versiones para iOS y Android, las cuales tienen previsto su lanzamiento para finales de año. Sin embargo, quieren llevar a The Elder Scrolls: Blades a todas las plataformas posibles. Algo así como ha ocurrido con otros proyectos menores como The Elder Scrolls: Legends o Fallout Shelter, el cual ha llegado recientemente a PlayStation 4 y Nintendo Switch. El compromiso de la empresa es llevar a Blades a las consolas tradicionales, ordenador e incluso a los periféricos de Realidad Virtual, creando un ecosistema entre varias plataformas donde todos los jugadores puedan jugar entre sí independientemente de dónde tengan descargado el juego.
Su naturaleza Free to Play alberga dudas alrededor del método de monetización que se utilizará para mantener el servicio en los meses venideros. Se espera que desde que llegue al mercado, se expanda a través de nuevo contenido que aumente la experiencia global, pero durante la presentación ya pudimos ver diferentes divisas que pueden dar a entender por dónde irán los tiros. Su hoja de ruta aún es difusa, por lo que tendremos que esperar hasta más cerca de su lanzamiento para poder conocer en mayor profundidad qué nos depara The Elder Scrolls: Blades. Sin duda estamos ante un juego que cuenta con un potencial inmenso para brillar en el catálogo móvil, pero que necesita aún trabajo para pulir aquellas aristas evidentes en el control del personaje.
- Acción
- RPG
The Elder Scrolls: Blades, desarrollado y editado por Bethesda para Switch y dispositivos iOS y Android, es un RPG de acción ambientado en el mágico universo de The Elder Scrolls, en el que un miembro de Los Cuchillas, los soldados élite del Imperio, deberá escapar para volver a su ciudad natal.