Revolucionando el cooperativo de dos formas distintas

Cooperar y conversar, casi sinónimos en A Way Out y Sea of Thieves

Siempre se ha agradecido que los juegos ofrezcan un modo cooperativo, una opción de compartir la partida con nuestros amigos en el sofá o en la red. Pero pocas veces el concepto ha ido más allá del ser una opción, una adición a un núcleo jugable que puede subsistir sin ella. Está claro que es más divertido jugar a la recreativa de las Tortugas Ninja con una persona a tu lado. Se disfruta mucho más de las aventuras de plataformas de LEGO con tus hijos y sobrinos.

Incluso en los juegos online, la cooperación habitualmente se limita a que dos o más jugadores diseñen una estrategia para acabar con el boss de una mazmorra en WoW, o a que uno despiste al equipo enemigo mientras que el otro lo flanquea. La experiencia mejora cooperando, pero podemos completar un Ocaso en Destiny o ganar una partida en PUBG sin conversar directamente con nuestros compañeros.

A Way Out: 2 jugadores online con un solo juego

Esta semana se ponen a la venta dos juegos que revolucionan esto de maneras muy distintas porque parten de la base que quienes inicien una partida serán amigos (y a ser posible, de esos que se conocen mejor que bien) y que estarán continuamente hablando entre ellos de manera cuasi imprescindible.

El primero de ellos es Sea of Thieves. Como decimos en nuestras impresiones finales (el análisis está previsto para el lunes 26 de marzo), la apuesta de Rare se basa esencialmente en la actividad más humana posible: la comunicación con nuestros semejantes. Cualquier acción a realizar necesita coordinación, ya sea decir al resto de la tripulación que baje y mueva las velas mientras nosotros manejamos el buque; que nos cubran mientras tenemos las manos ocupadas con un tesoro; que nos muestren el mapa del tesoro mientras con la brújula intentamos saber en qué parte de la isla estamos; que nos disparen al barco enemigo usando un cañón… Hablar se convierte en una parte tan fundamental de la experiencia como pulsar los botones del mando.

Sea of Thieves: el mejor parche día 1 de la historia

Con A Way Out, a menor escala (pues son solo dos personas) y con unas consecuencias e intenciones totalmente distintas, ocurre lo mismo. Vincent y Leo, jugador 1 y jugador 2, tendrán que hablar durante todo el transcurso de la aventura: para abrir juntos la puerta de un golpe, para avisar al uno de si viene el guardia de la prisión mientras el otro está destornillando, para contarse entre ellos las conversaciones que han tenido a la vez con distintos personajes, y otros muchos ejemplos que no queremos desvelar porque la sorpresa (jugable y emocional) es parte de una experiencia imprescindible.

Estos dos títulos son un golpe sobre la mesa ante una industria para la que el cooperativo se resume en compartir un mismo servidor online o tener partida la pantalla, pero también una apuesta muy arriesgada, pues no todos los jugadores tienen a su disposición un amigo fiel, una pareja, o un familiar con quien jugar en cualquier momento.