Estrategia y mitología se vuelven a dar la mano en un juego donde la personalidad de su planteamiento artístico sobresale por encima dle resto de apartados.
Es casi un año exacto el que Wartile se ha mantenido en estado Early Access, un formato que el usuario mira cada vez con más recelo debido a proyectos bastante más grandes que este, como es el caso de DayZ, por ejemplo. Sin embargo, la propuesta de Playwood Project ha sido totalmente honesta en este sentido, hasta llegar a moldear un juego de mesa de estrategia que se controla con teclado y ratón, porque eso es precísamente lo que ha conseguido este modesto estudio: recoger la esencia de los tableros y trasladarla con un acierto notable a nuestros monitores. Los vikingos y la mitología nórdica protagonizan este videojuego cuyas mecánicas jugable no son su única peculiaridad.
Pequeñas batallas sobre el tablero
El intentar recrear un juego de tablero implica hacerlo también visualmente, y Wartile presume de una gran personalidad en ese aspecto visual, sobre todo artístico. Tanto nuestras unidades como las enemigas están representadas con pequeñas figuras de acción, mientras que los escenarios, sorprendentemente variados y basados en paisajes del norte de Europa, con dioramas genialmente diseñados y divididos a su vez en casillas. Esto le otorga cierta sensación no ya solo de juego de mesa, sino de verdadera maqueta virtual que le diferencia de otras propuestas jugables similares, aunque a su vez esto deriva en algunos pequeños problemas de los que hablaremos más adelante en este mismo texto.
De esta manera, a medida que una de las figuras aumenta su nivel no solo lo hacen sus atributos, sino también la cantidad máxima de estas bonificaciones que se pueden aplicar, no teniendo porqué estar atadas permanentemente a un personaje, sino que pueden personalizarse constantemente según necesidades de la misión que vayamos a afrontar. Dicho esto, incluso las nuevas figuras están a la venta en la Taberna, aumentando nuestro ejército de vikingos, pero esto tiene una contraprestación importante, y es que afecta de manera negativa a la narrativa, al no tener ninguno de los personajes una importancia vital en la historia, que al mismo tiempo, no tiene un gran peso específico. Sí es cierto que antes de cada misión se nos pone en contexto de porqué debemos hacer lo que vamos a hacer, pero no se sigue una trama conectada, con lo que pierde irremediablemente cierto atractivo.
7
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.