¿Por qué BioWare no desarrolló Star Wars: KotOR 2?

El porqué del no desarrollo de Star Wars: Knights of the Old Republic 2

La comunidad de fans La Guerra de las Galaxias guarda en su memoria uno de sus títulos más queridos de siempre, Star Wars: Knights of the Old Republic, la obra de BioWare que nunca llegó a tener una continuación por su parte a pesar de lo mucho que se pidió y lo bien que podría haber funcionado a nivel comercial.

Pero el estudio canadiense nacido en 1995 tuvo que tomar una decisión después de terminar con KotOR (2003), ya que pasado el año 2005 y con el Action RPG Jade Empire en las tiendas, tenían la opción de hacer Star Wars: Knights of the Old Republic 2, pero finalmente optaron por hacer algo diferente, lo que finalmente terminó convirtiéndose en Mass Effect.

James Ohlen, director creativo de BioWare, ha revelado en una entrevista en Eurogamer que no se sentían del todo cómodos teniendo que utilizar licencias que no les pertenecían, sino que necesitaban tener sus propias IP y llevarlas a lo más alto, una decisión que ha calificado de “muy inteligente” ahora que el paso del tiempo les ha dado la razón.

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De Knights of the Old Republic 2 a Mass Effect y Dragon Age

“Para que una compañía pueda alcanzar el éxito y tener el control de su destino, ha de poseer sus propias IP. No éramos dueños de Dungeons & Dragons, tampoco de Star Wars. Decidimos por ello que teníamos que hacer Mass Effect en vez de otro juego de Star Wars”, reconocía.

Ahora bien, esto no significa que descarten volver a trabajar en Star Wars en el futuro si se plantea la oportunidad, porque ya lo hicieron con The Old Republic, entre otros, y porque “realmente lo disfrutaría”. Asegura que la gente disfrutaría mucho en caso de confirmarse, y desea que suceda esa oportunidad en el futuro. No cabe duda, sin embargo, que esa decisión tomada hace ahora más de diez años termino fructificando en unas de las sagas más importantes de la pasada generación de consolas como son Mass Effect y Dragon Age. Ahora, el futuro de la compañía pasa por  convertir de su nuevo proyecto otro punto de inflexión, Anthem.

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