Resident Evil: Revelations
Resident Evil: Revelations, análisis Switch
Uno de los grandes juegos de Nintendo 3DS recibe, tras múltiples versiones, su mejor revisión en Switch. Lástima que en Europa nos hayamos quedado sin la versión física de ambos Revelations en formato pack. Sale a 19,90 euros en la eShop.
Resident Evil Revelations, análisis Switch
Resident Evil Revelations salió hace cinco años en Nintendo 3DS y se convirtió en uno de los grandes juegos de la primera etapa de la consola portátil. Han pasado los años y el buen sabor de boca general que dejó el juego se ha ido manteniendo, para muchos por encima de Revelations 2 y también respecto a entregas numeradas, como la sexta. Como es habitual en Capcom, se ha estirado todo lo que se ha podido con versiones para nuevas plataformas, y tras llegar a Playstation 4 y Xbox One, ahora lo hace en Nintendo Switch. Y es curioso porque, en resumen, probablemente esta sea la mejor versión de todas las que han aparecido tras su debut, aunque, está claro, el paso del tiempo y su concepción como juego de 3DS le juegan en contra un lustro después.
En todo caso, la llegada de las dos entregas Revelations –en Europa solo en formato digital, por desgracia- confirma que Capcom quiere apostar por la consola de Nintendo. Ultra Street Fighter II fue la primera piedra a la que le siguió Monster Hunter XX y ahora una de sus sagas más emblemáticas. Es cierto que el usuario de Switch espera novedades y no revisiones de juegos pasados, pero de momento hay una apuesta que si cuaja, desembocará en lo segundo. Además, en esta ocasión la compañía japonesa ha tenido en cuenta particularidades de la consola y no nos encontramos con una simple versión con mayor resolución como podría pasar con la HD de PS4 y One.
El título nos coloca en manos de Jill Valentine –lo cual siempre es una buena noticia- acompañada de Parker Luciani en unos hechos que se dan justo después de Resident Evil 4 y en medio de la investigación en un barco a la deriva, el Queen Zenobia, donde se presupone que Chris y Jessica habían desaparecido. Enemigos bio orgánicos como los BOWs llenan esta zona repleta de espacios oscuros, lugares bloqueados a los que hay que volver cuando tengamos el objeto de turno, enemigos que aparecen sin previo aviso al girar una esquina y algunos puzles. Un retorno a los orígenes de la saga que se celebró y mucho tras el puro TPS de Resident Evil 5. Que nadie espere puzles rocambolescos como en los tres primeros juegos numerados, pero sí un backtracking constante, exploración y la necesidad de escapar de los enemigos más que dispararlos por la falta de munición.
El desarrollo de la aventura es en formato episódico, y Jill no es la única protagonista. También tendremos capítulos donde controlamos a Redfield y a Parker. Por desgracia, estos episodios –algunos de ellos en forma de flashbacks, situaciones paralelas, etc.- no están al nivel de los de Jill y se basan en la acción pura y dura. Hunters, perros, BOWs y jefes finales a los que tenemos que matar a base de munición (pistolas, metralletas, escopetas…) sin más objetivo que ese: limpiar zona y avanzar. La campaña, que puede durar entre 7 y 10 horas, tiene altibajos precisamente por la diferencia que hay entre sus capítulos.
Revelations: mejor control en Switch
Es aquí donde entra en juego la versión de Switch, que se desmarca de las anteriores revisiones HD del título original de Nintendo 3DS gracias a un control mucho mejor. El título nunca ha destacado por tener una gran precisión en los tiroteos, y eso es algo que se nota en todas sus versiones. Pero en Switch hay un elemento corrector: el control por movimiento. Activándolo podremos apuntar con el stick derecho, pero acabar de precisar o matizar el movimiento con un pequeño giro de muñeca, sea ya en formato portátil o jugando con los Joycon. El resultado, muy al estilo Splatoon, es que ganamos precisión y comodidad a la hora de apuntar, algo que se echa en falta en las otras versiones. Además, tenemos otros movimientos cuando jugamos con los Joycon como poder cargar el arma o golpear cuerpo a cuerpo.
A todo ello se le añade la posibilidad de solventar los puzles con la pantalla táctil, manteniendo por lo tanto las virtudes de la versión de Nintendo 3DS pero a su vez añadiendo un mejor acabado visual: el título funciona a 60 frames por segundo tanto en modo portátil como en modo dock y en ambos casos la nitidez y claridad de la imagen es destacada a 720p y 1080p según cada caso. Buen trabajo en este sentido, que no palidece ante otras versiones. Eso sí, lo cierto es que el paso del tiempo se nota en texturas excesivamente planas y algunas animaciones, elementos que no se han tocado ni revisado.
El título llega en su versión más completa con el modo asalto, basado en oleadas de enemigos que superar mientras puntuamos jugando en solitario o con amigos (local o en línea) donde están todos los DLC que salieron a posteriori, incluido un nuevo nivel, armas y personajes. Además, es compatible con los amiibo para desbloquear diversos objetos. El juego llega doblado al castellano y a un precio de 19,95 euros.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.