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El limitado stock de Xbox One X, un arma de doble filo
Fechas delicadas para no estar en los estantes
Xbox One X y su limitado stock: interpretaciones
Xbox One X ya está disponible en todo el mundo. La consola más potente de la historia ha demostrado en comparativas, datos técnicos y pruebas en juegos exclusivos que se encuentra a otro nivel, que es una máquina de garantías para aquellos que hayan decidido dar el salto. De hecho, parece que a nivel comercial está funcionando de maravilla, agotándose en la mayoría de mercados.
España incluso es uno de esos territorios donde hay falta de stock, pero esto es un punto a considerar teniendo en cuenta las fechas en las que estamos. Hay dos opciones: o bien Microsoft esperaba una demanda mucho menor de la existente, lo cual sería tremendamente positivo para ellos por la parte que les toca; o bien están teniendo problemas para producir la máquina, yendo así el ritmo de abastecimiento a marchas forzadas en relación a las unidades que piden las tiendas.
El riesgo de perder jugadores por no encontrar su consola
Pero lo que es seguro es que los titulares de “Xbox One X está agotada” no son del todo positivos. No en vísperas del Black Friday. Ya lo dijo Reggie Fils-Aime hace unos meses, que para ellos era prioridad absoluta tener unidades en todo el mundo cuando se aproximase el mes de diciembre si querían evitar lo sucedido en navidades de 2008 con Wii o en 2007 y 2008 con Nintendo DS. Con la máquina del control por movimiento tuvieron serios problemas que arrastraron una potencial pérdida de jugadores esas Navidades.
Y es ahí adonde queremos llegar.
Tener falta de stock es un problema no solo en el presente, sino también en el futuro inmediato. Pongamos un supuesto: unos padres que acuden a su centro comercial de confianza semanas antes de la Navidad para comprar Xbox One X, la nueva consola de su hijo o hija que tanto han pedido, y se encuentran que no hay stock. La solución está a metros de distancia, y esa no es otra que pasar por caja con una consola de la competencia.
Si Microsoft no logra abastecer la demanda de Xbox One X en Occidente antes del Black Friday, eso es algo que puede beneficiar irremediablemente a Nintendo Switch y PlayStation 4, por ello decir que esos carteles de “agotado” son un arma de doble filo; que se aplica a absolutamente cualquier producto tecnológico.
Toca pisar el acelerador en Redmond.
