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KickStarter se estanca en los proyectos de videojuegos
2017 no ha sido un buen año
KickStarter ya no funciona; los videojuegos lo tienen complicado
La consolidación de KickStarter como una plataforma de financiación colectiva de proyectos es algo que ha sentado de maravilla al impulso de ideas emprendedoras, que elimina trabas entre el creador y el futuro consumidor al quitar intermediarios y facilitar la materialización de muchos sueños imposibles de otra manera. Pero el videojuego parece haber tocado techo en este lugar.
Un nuevo exhaustivo informe por parte de ICO Partners ha analizado el estado de la plataforma de crowdfunding más conocida a lo largo de 2017, poniendo énfasis en la industria del videojuego y todos los proyectos que han intentado financiarse a lo largo de este curso. De acuerdo con los resultados, se está experimentando una decreciente cantidad de títulos financiados, con un porcentaje cada vez más alto de fracasos.
El tremendo éxito de los juegos de mesa
Lo cierto es que hay dos caras perfectamente diferenciadas en una misma moneda: por un lado, la financiación de videojuegos está completamente estancada, con tan solo 179 proyectos financiados en el primer semestre de 2017 frente a los 690 que no alcanzaron el objetivo, una cifra que es parecida a la de los últimos semestres pero que en ningún caso mejora lo visto en 2014, 2015 ó 2016.
Por otro, tenemos la irrupción de los juegos de mesa. No tenemos que irnos muy lejos para constatar el éxito de los títulos de tablero en KickStarter, pues el dedicado a Resident Evil 2 se financió en una hora. Tal como vemos en el gráfico, los juegos de mesa no han dejado de crecer desde el año 2012, pasando a tener este último semestre nada menos que 957 proyectos financiados por 581 que no lo hicieron. Así, aproximadamente 2 de cada 3 proyectos basados en “tabletop games” terminan fructificando en KickStarter; la relación en videojuegos es de tan solo 1 de cada 4.
A pesar de haber existido algunos videojuegos con cifras millonarias en la plataforma, la realidad dice que las probabilidades de salir con los puños en alto de una campaña de esta índole es realmente baja.
