Analisis Gran Turismo Sport

¿Qué es GT sport?

El lanzamiento de Gran Turismo Sport ha estado lleno de polémica y escepticismo. ¿Es un nuevo juego de la franquicia? ¿Una demo larga como lo eran los Prologue? Un Spin Off? Quizás esta última definición sea la más cercana a la realidad, aunque el título posee las suficientes señas de identidad para saber que estamos ante todo un Gran Turismo. La música, la elegancia de los menús o las típicas pruebas que ya son canon en la saga están prsentes. Pero está claro que no es un Gran Turismo 7. El número de pruebas, circuitos y coches está muy lejos de lo que podríamos esperar de una entrega numerada, aunque no queda tan alejadode los números que han mostrado algunos de sus competidores.

Pero ¿Qué es lo que convierte a este juego en algo distinto a lo que estamos acostumbrados en la saga de Yamauchi san? Un componente online muy marcado que seguro no va a ser lo que mucha gente busca normalmente en un Gran Turismo. Olvidaos de las copas por marca o tipo de tracción, de los torneos donde ir sumando puntos a una clasificación... Porque aunque esas pruebas y torneos siguen estando presentes, lo son de manera exclusivamente online y a una hora y fechas específicas. Es un cambio muy brusco en la filosofía del juego. Un cambio en las reglas del juego que no a todo el mundo va a gustar.

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Pero esto no es necesariamente malo. A la saga le han pedido en numerosas ocasiones renovarse, y es exactamente lo que han intentado. Siguen estando presentes los premios económicos con créditos para gastar en mas coches, aunque ahora se han eliminado las licencias de conducir por un sistema de niveles similar a lo que vimos en GT6 (aunque ahí se seguían conservando los carnets). Así, superando pruebas y carreras online, ganaremos experiencia que nos permitirán desbloquear contenido tanto online como individual.

Hagamos un poco de memoria. Fue allá por el 98, ese fantástico año para la industria donde salieron alguno de los juegos más famosos e influyentes de la historia, cuando salió a la venta un título que revolucionó lo que entendíamos como juego de conducción. Un juego donde había que sacarse el carnet de conducir, comprar coches y mejoras, ajustar mecánicamente los vehículos y que ofrecía unas repeticiones muy cinematográficas. Gran Turismo, con sus 172 coches y 11 circuitos, se convirtió en un hito, un superventas y un clásico instantáneo.

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No queremos comparar Gran Turismo Sport con lo que supuso GT en el año 98, porque sería injusto, entre otras cosas porque hoy en día la innovación es cada vez más complicada, pero sí que se ha querido orientar el juego hacia el e-sport tal y como su nombre indica. Veremos a continuación si se ha conseguido la labor de darle una vuelta de tuerca a la saga o por el contrario, nos encontramos ante más de lo mismo pero con menos contenido.

Dentro de la competición

En cuanto a contenido, el juego nos ofrece más de 150 coches y 40 circuitos distintos a distintas horas del día cada uno, de momento sin cambios climáticos. Sin duda, son unos números muy escasos para lo que nos tenía acostumbrados la saga, pero que debido a su variedad de coches y trazados, no pensamos que se vayan a echar de menos más cantidad a corto plazo. Aunque sobre todo en el tema de circuitos notamos ausencias bastante notorias, como el mítico High Speed Ring que por primera vez en la saga no hace acto de presencia. Es sobre todo en el apartado de circuitos originales donde más circuitos echamos en falta. Trazados como Trial Mountain, Deep forest o Autumn Ring, a lo que se suma el hecho de que no estaría de más circuitos reales míticos como Spa o Laguna Seca.

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En cuanto a los coches tenemos nuevas incorporaciones a la franquicia como Porsche por primera vez en la historia, y cada marca nos ofrece vehículos en las distintas categorías. Desde N200 con coches de 200cv o menos hasta GR3 con auténticos bólidos de 800 cv, pasando por coches de rally o karts. Hay que aclarar que no todas las marcas poseen coches en todas las categorías, y algunas tienen varios modelos en la misma categoría, pero ya no tendremos el problema de ver el mismo modelo de coche en distintas versiones o años para aumentar de manera falsa el número de coches. Ahora cada coche será único, por lo que consideramos el número acaba siendo correcto y con una gran variedad.

Uno de los puntos fuertes del juego se encuentra sin duda en el modelado de estos vehículos. Este verano pudimos asistir a un Tour por las oficinas de Polyphony Digital donde nos mostraron el proceso de modelado de los coches,  una auténtica locura. Un solo trabajador invierte 6 meses en modelar un solo vehículo, y están cuidados hasta el detalle más nimio, desde el tipo de fuente del cuentakilómetros a las costuras de los asientos o los botones del salpicaderos. Todo tiene que coincidir a la perfección con el modelo real para pasar el corte impuesto por la compañía Japonesa. No es de extrañar así los largos tiempos de desarrollo de los que hace gala el título, aunque nos confirmaron que los modelados de coches actuales podrán ser usados sin ningún problema durante los próximos años o en un supuesto GT7, por lo que el tiempo de desarrollo de ese supuesto titulo debería ser mas corto.

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¿Significa esto que Gran Turismo Sport va a ser un juego de corto recorrido que en cuanto salga GT7 va a quedarse abandonado? Asegurar eso es muy aventurado por parte de cualquiera porque depende muchísimo de cómo funcione el juego en ventas y en jugadores habituales, pero desde la compañía nos prometieron una oleada de contenido, tanto gratuito como de pago, que aumentara mucho la vida del título. Así que no debería ser un problema para nadie el pensar que el juego se va a quedar vacío o sin contenido a las pocas semanas.

¿Single player si o no?

Respecto al modo single player, es importante decir que es bastante más completo de lo que parecía en una primera toma de contacto. No solo las pruebas de la escuela de pilotos se van volviendo más largas y exigentes, si no que los desafíos de conduccion dan un soplo de aire fresco, con pruebas de derribar conos, derrapes o contrarrelojes donde se va añadiendo tiempo en cada checkpoint, desafíos de un marcado carácter arcade que combina a la perfección con el manejo de los coches, que puede configurarse al gusto para ser desde el mas asequible de los arcades, hasta el mas exigente de los simuladores.

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Pero sin duda, una de las grandes sorpresas del modo single player la encontramos en el Arcade. En este modo podemos disfrutar de carreras rápidas de la manera convencional, o la gran novedad, carreras personalizadas, donde podemos configurar cada detalle de las mismas, desde elegir entre 1 y 20 coches en pista, 1 o 200 vueltas, o incluso carreras de 24h, daños reales a nivel mecánico, desgaste de gasolina o combustible en una escala entre x1 o x10... No es el modo GT clásico pero no esta nada que nada mal, ya que también obtendremos recompensas en nivel y créditos en este modo dependiendo de la dificultad y duración de las carreras. Además, la IA en dificultad experto es muy competitiva como ya adelantamos en el artículo de primeras impresiones del juego, con unos rivales que van a ganar, a cerrarte huecos, coger rebufo y que se pican entre ellos llegando a cometer errores.

Pero no todo es bueno en el plano individual. El juego, si bien funciona sin conexión a internet, no guarda datos de juego ya que la partida no se guarda en la consola si no en la nube. ¿Qué quiere decir esto? Que si bien puede parecernos una buena idea aprovechar ese corte de nuestro operador de internet para sacar oro en las pruebas de la escuela de pilotos que nos faltan, no se guardará nuestro progreso hasta que recuperemos la conexión a internet. Sin duda un grave fallo que esperemos se solucione mediante algún parche.

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La otra cara de la moneda la encontramos en el apartado estrella del título, el modo online. Donde hemos observado una de cal y una de arena. Las partidas una vez comenzadas son perfectas en cuanto a fluidez, incluso con 24 coches en pantalla, no hay un atisbo de lag, coches transparentes o bajadas de frames, toda una mejora en este aspecto respecto a lo que jugamos en GT5 o GT6 que aún teniendo un online de calidad a veces el lag hacía de las suyas con curiosas teleportaciones. También hay que reconocer la dificultad para encontrar salas para jugar online: no se muestran muchas salas una vez que entras a la sección online fuera del modo Sporty es tedioso ver información como el número de vueltas o los coches permitidos, lo que no nos ha convencido. Si bien es cierto que los sistemas de salas privadas funciona muy bien, dejándonos elegir muchas posibilidades para hacernos nuestros propios torneos online con hasta 200 vueltas, daños y desgaste, la conclusión es que el sistema online tiene margen de mejora a día de hoy.

Por su parte el modo Sport nos ofrece carreras cerradas, con unas limitaciones específicas a una hora señalada:  tres al dia con un intervalo de 20 minutos entre ellas que se van repitiendo. Todas ellas además resultan de una duración muy reducida: 3 o 4 vueltas a un circuito no es una prueba seria si quieres ser un referente en los e-sport de conducción y lo ideal serian carreras de al menos 25 o 30 minutos. En noviembre empiezan los eventos de la FIA y ahí esperamos pruebas mucho más serias en este sentido.

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The real Driving Simulator

Como comentábamos antes, la conducción del juego nos ofrece múltiples posibilidades. Podemos ajustar los niveles de ayudas con muchas variantes, desde el control de estabilidad, frenos, asistencia al derrape, asistencia a la frenada, piloto automático a tracción y frenos... Cualquiera puede jugar a este juego sea del nivel el que sea, desde aquel que solo ha jugado a un Burnout hasta el más exigente amante de los simuladores, ya que el juego, una vez desactivadas todas estas ayudas, es muy muy retante. Incluso coches poco potentes como un simple Mazda MX5 de 150cv se sienten nerviosos y te avisan rápidamente que no es una buena idea idea dar gas a fondo mientras giras el volante al máximo, o que frenar en medio de una curva puede hacer que acabes pisando la arena.

La arena, además, penaliza mucho más que en otros juegos similares, llegando incluso a ser casi imposible salir de ella con determinados coches. Pisarla con una rueda por ejemplo, hará que perdamos adherencia de esa ruda hasta que la arena o tierra se haya eliminado totalmente del neumático, dejando además un característico surco blanco en la pista haya por donde hayamos dejado arena, y ojo porque esta arena en pista también nos hará perder adherencia.

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Sin duda es el mayor nivel de realismo en conducción de la saga con mucha diferencia. Las físicas de los neumáticos son espectaculares, incluso podemos notar en el comportamiento del coche la deformación de estos por la presión ejercida en el acelerador, y también se puede apreciar de manera visual si nos fijamos bien. Uno de los comportamientos en los que la franquicia siempre ha sobresalido, pero ahora se ha llevado a un nuevo nivel, es el reparto de pesos y como la frenada y la aceleración afecta a ellos.

Se puede ajustar el reparto de pesos desde la configuración del coche, así como el reparto de frenos entre atras y delante, y en ningún otro Gran Turismo habíamos notado en la a los mandos ese realismo que siente ahora, notar como el coche se va hacia atrás perdiendo agarre de las ruedas delanteras al acelerar a fondo, cómo empieza el subviraje y debemos reducir el gas o frenar ligerísimamente para recuperar la adherencia en el tren delantero es una experiencia muy gratificante para todo aquel que busque una experiencia de simulación del más alto nivel y que no hemos visto reflejado con tanto realismo fuera de los simuladores puros de PC como Iracing o Life for Speed.

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Pero si no eres un piloto experimentado, el juego ofrece opciones de piloto automático, en donde incluso frena y gira prácticamente solo, sólo necesitando acelerar a fondo y mover ligeramente la dirección. Es una opción destinada a los que no buscan complicaciones y que hemos visto en otros juegos de conducción como Forza Motorsport, pero que obviamente no nos va a permitir hacer buenos tiempos en el juego ni ser competitivos en el online, aunque sí puedes ser competitivo y hacer buenos tiempos con un nivel de ayudas leve, como por ejemplo como lo configura de serie en el modo de ayudas experto, donde solo mantiene encendido el control de tracción a un nivel bajo y el ABS.

¿Más perfecto que la realidad?

Esta frase que Kazunori Yamauchi dijo en el lanzamiento de GT5 se hizo rápidamente viral en las redes, inundando los foros de todo el mundo, alimentando a las fans, tanto de uno como de otro lado y dándoles argumentos para esa guerra sin sentido que es la guerra de consolas. ¿Pero a qué se refería Yamauchi con esa frase? Pues ni más ni menos a que en el juego podemos modificar la realidad para que sea perfecta en nuestras manos, hacer que todos los días sean soleados o las nubes den un tono que favorezca la ambientación, ni más ni menos, y esto está llevado hasta su máxima expresión en esta entrega.

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GT Sport utiliza toda la potencia de PS4 para mostrarnos un espectáculo gráfico apabullante.  La iluminación es posiblemente la mejorque hayamos visto jamás en cualquier videojuego del género. La sensación de estar viendo un video real es total, y sólo en ciertos momentos y en determinadas vistas es cuando nos choca un poco y decimos que podría ser más realista. Como hemos dicho antes, el modelado de los coches es soberbio, lleno de detalles, algunos realmente locos como la difracción de la luz en las lunas o faros, la deformación de los neumáticos, los efectos de partículas o las texturas y detalles de los escenarios, que están llenos a rebosar de figurantes y demás atrezzo. Además el juego nos permite correr a distintas horas del día en todos los circuitos, desde el amanecer hasta el anochecer o de noche cerrada, y en todas y cada una de estas horas la luz es sencillamente perfecta. La luz ambiental casi se pude tocar, la niebla matutina o el sol implacable del mediodía, todos y cada uno de los escenarios de los que serán testigos de nuestras victorias, están recreados con lujo de detalles y un mimo fuera de toda duda.

No obstante, el título no es perfecto, y como viene siendo casi una marca de la casa, ofrece claroscuros. Y el más destacable sin duda son las sombras. Las sombras siguen siendo, al igual que pasó con las entregas de PS3, el aspecto más flojo del conjunto aunque hayan mejorado una barbaridad. Pero aun así siguen estando a una resolución inferior a lo esperado y tienen jaggies, algo que no es notorio si se juega con la vista de techo, parachoques o incluso exterior, pero que en la vista de cabina se nota mucho. Esta vista de cabina, pese a que es bastante espectacular, con los reflejos del salpicadero en la luna o las correctas animaciones puede que sea la menos práctica a la hora de conducir, y aconsejamos usar la de techo o parachoques para tener el máximo control y sensación de velocidad.

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La sensación de velocidad es totalmente real, no está exagerada como en otros títulos, y yendo con la vista de parachoques en pistas estrechas como puede ser Nürburgring con un coche rápido, da una sensación de vértigo como pocas veces veréis.

En cuanto al sonido, es una mejora notable sobre el sonido de las entregas anteriores y se coloca al nivel de la competencia en este aspecto tan criticado anteriormente. Ahora los motores suenan de forma contundente, sobre todo en la vista exterior y la de techo, ya que en la vista interior y de parachoques se nota mucho el ruido de la fuerza aerodinámica pasando por la carrocería, sobre todo en la interior. También el sonido cambia dependiendo de las condiciones de la carrera, y no sonará igual en el mismo tipo de asfalto o si pasamos por un túnel, creando reverberaciones en este último caso.

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Las explosiones del escape o el crujir de la caja de cambios están más presentes que nunca, creando una dinámica y una espectacularidad en el sonido como nunca habíamos visto en la saga. Para acompañar a el sonido, tenemos una selección musical, donde podemos encontrar algunos viejos conocidos, pero que acompañan perfectamente a las carreras, aunque la BSO es uno de los puntos flojos del juego, ya que no destaca como en otras ocasiones. Y no, no tenemos versión de Moon Over The Castle en esta ocasión sino una selección de temas de Rock y electrónica donde las composiciones de Daiki Kasho siguen teniendo un protagonismo especial como en el resto de la saga, aunque no sean sus temas más inspirados.

Cuando no todo es conducir

Gran Turismo, desde sus inicios, ha sido más que un juego de conducción. Ya en su primera entrega nos permite leer una descripción detallada de cada modelo de coche, y así ha ido evolucionando entrega tras entrega para convertirse en una oda al automovilismo. Y esa oda llega a su apogeo en esta última iteración. No solo tenemos la descripción completa de cada coche, en una línea con texto que va pasando de manera automática y que no es la manera ideal ni más cómoda de leerlo, si no que tenemos un modo museo donde se nos mostrará en imágenes y texto la historia de cada marca de una manera muy elegante a modo de diapositivas, también con acontecimientos que ocurrieron en fecha señaladas en la historia de la automoción. Los amantes de los coches encontrarán aquí horas de absorbente entretenimiento. También se añaden videos sobre lanzamientos de modelos o desarrollo de los vision GT que vuelven a hacer su aparición en esta entrega. Sin duda, el modo museo más completo que hemos visto hasta ahora.

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Pero no acaba aquí. El ya clásico modo foto vuelve en esta ocasión más espectacular que nunca, con decenas de escenarios totalmente fotorealistas, en distintas variantes horarias o desde distintos ángulos, que hará las delicias de los amantes de la fotografía, pudiendo además controlar todos los ajustes de la cámara como si fuera una reflex profesional o añadiendo distintos filtros, o incluso mezclandolos para lograr nuestros propios filtros. Sin duda el modo foto más espectacular y completo que hayamos visto hasta la fecha en sistema ninguno. Elige tu escenario, elige la hora o el ángulo, elige el coche, o usa varios de ellos, colócalo como quieras, ajusta la cámara, y dispara, luego podrás añadir filtros o dejar la imagen tal cual, los resultados sin duda te dejaran sin palabras y será imposible decir que pertenecen a un videojuego

Y por primera vez en la saga, tenemos un editor de vinilos para nuestro coche. Ya sea con diseños ya predefinidos o creando los nuestros mediante distintas capas y en distintas partes de la carrocería, podrás asegurarte de ser único y diferente en las carreras online. Aún no llega al nivel del editor de vinilos visto en Forza Motorsport pero es sin duda un gran añadido que muchos fans estaban pidiendo desde hacía tiempo. Además vuelve la tienda de alerones y llantas. Conseguir nuestro coche único y personal ahora más que nunca está al alcance de nuestra mano.

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