Las exclusivas temporales, el Battle Royale de esta generación

PlayerUnknown’s nos recuerda el valor de las exclusivas

Desde que comenzó la presente generación de consolas en 2013 no fueron pocos los que se aventuraron a decir que sería recordada como el ciclo de las remasterizaciones y remakes por excelencia, y en cierto sentido es así. Pero esta ya consagrada generación ha dado lugar a muchas más cosas, incluyendo el concepto de la exclusividad temporal, aquellos títulos inicialmente disponibles en una sola máquina y que, con el tiempo, terminan viendo la luz en la competencia.

Los DLC fueron solo un acercamiento

Desde DLCs en sagas como Call of Duty o Destiny, solo disponibles durante unos meses o bien en PS4 o bien en Xbox One, pasando por obras como Rise of the Tomb Raider. Así hemos llegado a 2017, en un momento donde Sony no sabe cómo hacer para acabar lo antes posible con la exclusividad temporal de PlayerUnknown’s Battlegrounds, el mayor fenómeno de los últimos años en eso de los títulos multijugador. El paso por Steam de la obra de Bluehole ha sido arrolladora, con picos de usuarios concurrentes por encima de los 1.5 millones de jugadores a pesar de estar todavía en Early Access.

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En Microsoft miran con buenos ojos esta exclusiva temporal, que data hasta el término del año 2017, pues la proyección del título cuando se pueda comprar en tiendas es mucho mayor que hace tan solo un par de meses. Las alarmas saltaron hace unos días con las declaraciones del fundador del estudio, Chang Byung-Gyu, que puso el grito en el cielo al declarar que habían iniciado conversaciones para llegar PUBG a PS4 lo antes posible. Si por Sony fuera, el título vería la luz en PlayStation 4 el mismo 1 de enero de 2018, per no es tan fácil.

La respuesta de Microsoft no se hizo esperar y desde Bloomberg actualizaron su información indicando que los de Spencer querían alargar esa exclusividad lo máximo posible. Así las cosas, esta particular partida de ajedrez entre Microsoft y Sony en la que cada una mueve ficha con tiento pero sin ocultar sus intenciones tiene como gran beneficiada a la compañía surcoreana, que seguramente termine estrechando la mano al mejor postor.

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Bluehole: “Señores, ¿alguien da más?”

Lo que está claro es que Microsoft se juega gran parte de su éxito comercial en el último trimestre de 2017 y primer trimestre de 2018 en la exclusividad de PlayerUnknown’s Battlegrounds en Xbox One, más aun viendo lo ambicioso de su rendimiento en Xbox One X. La jugada pretende extenderse al menos hasta la llegada de Crackdown 3 y Sea of Thieves, que podrían tomar el relevo de PUBG como “only on Xbox”, mientras que en Sony saben que cuanto más tarde en llegar el título, peor será para el mantenimiento de su liderazgo en Norteamérica, que es donde aún queda algo de batalla entre Xbox One y PS4. 

Comienza el Battle Royale

Sea como fuere, PlayerUnknown’s Battlegrounds acumula ya más de 13 millones de usuarios cuando ni siquiera ha salido a la venta en su versión final, cuando todavía es un mero deseo en consolas. Gane quien gane esta particular tarea de seducción a Bluehole, al final quien terminará beneficiándose será el propio PUBG, que se verá rodeado de una creciente sensación de necesidad por parte de los jugadores de Sony, expectantes por su llegada

¿Alguien duda del éxito del Battle Royale en consolas?

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