Spider-Man, 35 años de juegos con el trepamuros Marvel
Rehecho bajo el imaginario Marvel fílmico actual y a punto de cumplir 55 añazos, la trayectoria de Spider-man en los juegos corre paralela a la historia del propio sector desde sus inicios en firme . Cargad esos lanzadores de redes, aspirantes a superhéroes, porque vais a acompañar al trepamuros desde la Atari 2600 hasta la generación HD actual.
Licenciada por Parker Brothers para la todopoderosa Atari 2600 -y clones de esta como la Sears Video Arcade-, la primera aventura propiamente dicha en la que manejábamos al trepamuros consistía en escalar de manera muy rudimentaria por la fachada de un edificio usando el lanza-telarañas, esquivando enemigos que podíamos apresar si sabíamos balancearnos en el momento adecuado, pero que si enganchábamos la tela muy cerca de estos, la cortaban y caíamos al vacío, debiendo lanzar otra corriendo para sobrevivir en un toque de programación genial para la época. El objetivo era esquivar enemigos y bombas que el Duende Verde había puesto por todo el edificio, llegar hasta lo más alto, y derrotar al villano -simplemente esquivándolo- y su superbomba. Cada fase se repetía el mismo patrón de escenario, solamente que con el edificio de un color distinto y con más enemigos que se movían más rápido. Visto ahora, es una pieza pixel de museo, pero en su momento, con la posibilidad de dos usuarios al mismo tiempo, llegó a ser muy popular.
The Amazing Spider-Man and Captain America in Dr. Doom's Revenge! (1989)
Spider-Man (1990)
Mega Drive, Master System, Game Gear, Mega CD
Wilson Fisk, alias el todopoderoso -por poder y tamaño- señor del crimen Kingpin, lanza un reto al trepamuros al darle 24 horas para que desactive una bomba que arrasará Nueva York. Además, ha conseguido echarle la culpa del atentado, por lo que a los enemigos de Kingpin se le sumará la policía de la ciudad que también querrá cazarnos. Y encima, a mitad del juego, Venom secuestra a Mary Jane. Con un despliegue gráfico espectacular -sobre todo en los 16 Bit de Mega Drive-, el juego nos permitía no solo saltar y golpear como en un arcade 2D, sino además trepar por los edificios que conforman el fondo de los escenarios. Pero el toque que lo convirtió en un título de gran éxito entre los fans era la posibilidad de sacar fotos que vender al periódico Daily Bugle, y además visitar el apartamento de Peter Parker. La versión Mega CD se benefició tres años después de escenas intermedias rehechas, dobladas y musicadas con finales alternativos nuevos. Un título genial que muchos aún conservamos en la estantería.
The Amazing Spider-Man (1990)
Game Boy
Spider-Man: The Video Game (1991)
Spider-Man: Return of the Sinister Six (1992/1993)
NES, Master System, Game Gear
Tomando elementos del arco argumental de la miniserie los Seis Siniestros de los comics, primero NES y luego los sistemas SEGA recibieron un plataformas de acción 2D en el que el trepamuros se batía de nuevo con los enemigos clásicos de su galería, con antagonistas como Sandman, Vulture u Octopus. De forma ocasional, en algunas fases teníamos que encontrar items como llaves o detonadores para finalizarlas. A pesar de que no era un mal título -de hecho podíamos balancearnos y contaba con un ritmo de juego ágil y rápido-, su exacerbada dificultad frustraba mucho el avance, ya que solamente contábamos con una vida, sin objetos de salud para recuperarla -el vencer a varios enemigos era lo único que la rellenaba-, y una continuación para las seis fases. Algo que lo convertía en una de esas odiseas para paladines del pad que hoy en día directamente sería impensable en un juego protagonizado por el superhéroe marveliano.
Spider-Man and the X-Men: Arcade's Revenge (1992)
Super Nintendo, Mega Drive, Game Boy, Game Gear
Spidey, Tormenta, Lobezno, Gámbito y Cíclope. ¿Quién le decía que no a semejante crossover jugable? El cerebro de la Bestia recibió primero otro de esos títulos que más de uno seguimos jugando veinte años después de ser estrenado. Comenzando con el trepamuros, tras la primera fase nos enterábamos de que el malvado Arcade (villano Marvel muy popular en los 80) había secuestrado a los X-Men citados, los cuales controlábamos después a lo largo de varias fases. A pesar de tener una dificultad más bien alta, lo cierto es que el cambio de escenario y personaje del juego y la gran jugabilidad -de esas veces que sentíamos que éramos de verdad Spider-Man- le granjearon muchos fans, sobre todo en lo tocante al hecho de la variedad de localizaciones que recorríamos -geniales las de Lobezno- y su estupenda banda sonora.
Spider-Man Animated Series (1995)
Spider-Man and Venom: Maximum Carnage -Venom/Spider-Man: Separation Anxiety (1994/1995)
Un gran éxito conlleva una gran secuela. Y apenas un año después, la gris PlayStation volvió a recibir en exclusiva al trepamuros en Enter Electro, al cual teníamos que derrotar antes de que obtuviera una fuente de poder conocida como el Dispositivo Bio-Nexus. Por el camino íbamos derrotando a Lagarto, Sandman o Shocker con nuestros nuevos poderes y gadgets, que incluían telarañas y armaduras eléctricas, telarañas de hielo y demás, junto al arsenal de la primera parte; todo ello para escalar edificios, salvar rehenes, desmantelar bombas y evitar que "¡Esta noche, Electro baile con los Dioses!" (por más que sea el propio Thor el que al final se lleva el mérito de derrotar a Electro). Con un gameplay muy deudor del primero, lo cierto es que la respuesta crítica no fue tan alta, quizás por una fórmula excesivamente continuista, algo que por otra parte, era lo que muchos le pedíamos tras su brillante primera parte. Entre los elementos más destacados figura que esta vez sí recorremos las calles de la ciudad -aunque en entornos cerrados-, el conseguido combate con Sandmanm, y la sala de peligro de los X-Men en la que Pícara y el profesor X nos entrenan en el tutorial, fanservice y gozada absoluta.
Spider-Man 2: The Sinister Six/Spider-Man: Mysterio's Menace (2001)
Plenamente instaurado el estilo Sandbox, Treyarch -con la ayuda de Shaba- quiso despedirse del trepamuros antes de centrarse por exclusivo en Call of Duty con un título que podía haberse convertido claramente en el mejor juego del personaje, pero que varios fallos bastante graves le robaron el lugar en el panteón de los elegidos. Contando con la mejor historia vista desde su debut en 1978, un guión de hierro que narra una amenaza simbionte y que incluye a S.H.I.E.L.D, personajes como Lobezno, un Spidey con una doble moral más establecida que nunca e incluso menciones a Tony 'Iron Man' Stark, Web of Shadows se iniciaba con una cinemática poderosa y magnífica: Spidey caminando cabizbajo mientras los simbiontes se apoderan de la ciudad, los soldados de S.H.I.E.L.D. intentan defenderla, y las naves y helicópteros se estrellan a cámara lenta en un encuadre puro deudor de Michael Bay o Zack Snyder.
Localizadas solamente en esta parte, y como ya hemos dicho en instantes meramente puntuales, lo cierto es que lastran y se suman a otros bugs como enemigos atrapados en partes del escenario o una cámara que no se adapta bien en ocasiones a la acción en pantalla. Una absoluta pena, pues quitando esto, estamos ante un soberbio título -el frenético combate contra las criaturas aéreas, los edificios cubiertos de simbiontes, una Gata Negra que nunca ha lucido mejor, unos enfrentamientos contra los Jefes Finales impresionantes, finales distintos y alternativos unos de otros- que todo fan debería sino tener en su spider-colección, al menos jugarlo una vez para disfrutar de la genial historia, la que verdaderamente debería haber constituido la siguiente película de la saga. A modo de curiosidad, las versiones PSP y PS2 huyeron de las 3D, siendo experiencias bidimensionales 2D con gráficos 3D.
Es una pena que, cuando una compañía acierta creando un título de calidad y que recibe una buena acogida, en ocasiones esta misma no sea capaz de tomarse el tiempo suficiente para que el próximo título sea igual o mejor aún. Como ejemplo de los dos extremos tenemos a un lado a Rocksteady con su Batman: Arkham Asylum y Arkham City, entregas espaciadas en el tiempo y un equipo con deseos de superarse; y en el otro a Beenox con Edge of Time, entrega lanzada apenas un año después del aclamado Shattered Dimensions que no logró superar la alargada sombra Noir de su propia creación. Para empezar se redujeron de cuatro a solamente dos los universos, el del Spider-Man original y el futurista 2099, manteniendo una jugabilidad casi calcada, y una historia que aunque comenzaba con ritmo hollywoodiense y fuerza, terminaba por desinflarse e intentar funcionar por acumulación, más que por fluidez de escenas de acción -aunque enfrentarse a AntiVenom era uno de lo highlights del juego. Edge of Time no es un mal juego, sino una experiencia más que correcta con instantes brillantes -y de nuevo voces como las de Nolan North o Tara Strong-, que sin embargo no evita el provocarnos esa sensación de que todo lo que vemos y jugamos está realmente desaprovechado, pudiendo haber constituido una propuesta al nivel de Shattered Dimensions.
La pista de que el trepamuros volvía a casa no la dio primero el tráiler de Civil Wars, sino el teaser de Disney Infinity 2.0 con el que Disney ya dejó claro en 2014 -el año de estreno del segundo film de Amazing Spider-man curiosamente- que la Marvel lo quería y lo tenía de vuelta, aunque fuera para un videojuego. De los tres play-sets principales de Infinity 2.0, el mejor era el de Guardianes de la Galaxia y el peor el de los Vengadores, por lo que el de Spider-man, muy basado en el estilo Ultimate, se quedó a medias. En sí el escenario era la Nueva York del playset de Avengers, sólo que tomada por el Duende Verde y Misterio desatando una invasión simbionte, y nos proponía un modo historia mezclado con un entorno abierto y misiones secundarias, pero poco exigentes y repetitivas -recordad el público base al que Infinity estaba dirigido. Simple, sencillo y sin muchas pretensiones, divertía y punto, y lo mejor era la figura de Spider-man que colocábamos en la base. Pero no la primera con el traje rojo y azul, sino la que salió en exclusiva para la versión de PS Vita con el simbionte, de las más espectaculares que el Toys to Life de Disney ha tenido.
De una película cuyos resultados provocaron la cancelación de la serie de films que Sony planeaba -a pesar de recaudar más de 700 millones $- y que el personaje ‘volviese a casa’ ahora que Marvel había instaurado una nueva forma de hacer cine de superhéroes, nació un juego más bien discreto. Con Activision produciendo y Beenox desarrollando, el estudio tuvo dos años -aunque parece que andaban pensando en la saga Skylanders que heredarían ese mismo año-, pero el resultado fue mucho mejor en el primer Amazing Spider-man. Esta secuela pulió elementos como el sistema de combate y algunos puntos del apartado gráfico, pero la repetitividad, la falta total de frescura, de desafíos a pesar del interesante reparto de villanos resultaron en un sandbox del montón con el aliciente del balanceo libre del trepamuros. El último juego de Beenox, el último Spider-man producido por Activision, sus resultados en críticas y ventas estuvieron por debajo del anterior.