Para la mayoría de los mortales con un sueldo normal, una máquina expendedora es eso que da bebidas, chocolatinas, patatas, preservativos, pequeñas figuras y juguetes, etc. En América también las hay que expenden marihuana terapéutica y gafas Snapchat, y en Japón es el remate con hasta ropa interior femenina usada. Pero parece que Singapur se lleva el premio gordo con la máquina más grande, bestia y lujosa que seguro los de Dubai estarán envidiando: una expendedora de coches de lujo.

Esta máquina expendedora gigante vende Ferraris

Hasta 60 cochazos entre los que se incluyen Lamborghinis actuales y una colección de Ferraris clásicos -Testarossa, GTO- se alojan en las 15 plantas del edificio en el que la compañía Autobahn de coches de segunda mano tiene su stock. Una forma ciertamente original de enseñar la ‘mercancía’ y que impresiona, ya que vista de noche parece como una caja de coches de juguete. Pero no, son coches de las marcas más lujosas esperando a que los compres de forma tan sencilla como ir a una expendedora de refrescos.

Pero no es la única, ya que en Estados Unidos la empresa Carvana, que vende coches nuevos a través de Internet, tiene un método parecido con torres expendedoras en las que el cliente va y se lleva el coche usando una enorme moneda especial tras comprarlo por Internet. Aunque si las comparamos, ciertamente la de Singapur no sólo es más grande y espectacular, sino que tiene Ferraris en vez de utilitarios urbanos. Y es que puestos a elegir...