Peter Moore relata una agria discusión con el creador de Sonic

Las confesiones de Peter Moore

A comienzos de este año conocimos que Peter Moore, un ejecutivo muy veterano de la industria se convertía en CEO del Liverpool FC, después de muchos años ocupando puestos de importancia en Sega, Microsoft y más recientemente, Electronic Arts. Tras dos décadas al servicio de estas compañías, en las que ha vivido los lanzamientos de consolas como Dreamcast o Xbox 360, o el renacer del hoy gigante canadiense, EA, Moore está ahora al servicio de uno de los equipos de fútbol más clásicos de las islas británicas, donde también tiene participaciones, por ejemplo, Lebron James.

Todo este tiempo ha servido para que Moore pueda presumir de anécdotas con múltiples personalidades del videojuego, y una de las más peculiares se dio durante su etapa en Sega, y con Yuji Naka, creador de Sonic, como protagonista, la cual cuenta en Glixel.Después de que la compañía nipona hubiera dejado de fabricar Dreamcast y se convirtiera definitivamente en una empresa de software, Moore visitó Japón para hablar con sus directivos, preocupado por la falta de adaptación de Sega a la industria moderna. Comenzamos a ir allí a construir una relación, iba y venía de Japón, y estaba enfadado con Sega porque eran incapaces de ver las nubes de tormenta que había sobre el sector del videojuego, cuenta Moore.

Según él, el punto de inflexión fue GTA 3, un título que cambió la manera de hacer las cosas tanto técnica como jugablemente, y en Sega no parecían entenderlo. Fue entonces cuando Moore se decidió a hacer una encuesta entre jóvenes americanos para investigar sobre su opinión de diferentes editoras y desarrolladoras, y las conclusiones eran claras. Para ellos, Electronic Arts era como el chico popular y engreido del instituto, el que jugaba de quarterback y siempre se llevaba a la chica más guapa de la fiesta. Rockstar era como tu primo que vuelve borracho de Las Vegas, con una chica del brazo, te pide dinero y vuelve a marcharse. ¿Y Sega? Sega es como tu abuelo, una vez molaba, pero ya ni siquiera se acuerda porqué.

Moore grabó todas estas respuestas y llevó el vídeo, con subtítulos en japonés, a una reunión con gente de Sega, entre la que se encontraba el propio Naka, con quien Moore confiesa que tenía una relación de amor-odio. La reacción del nipón era de incredulidad. Esto es ridículo, tú les has hecho decir esto. Sega es una gran marca, nadie nunca diría algo así, le gritó a Moore en la cara. Este no se dejó amilanar, ya que pidió al traductor que le dijera a Naka, directamente, "Que te jodan", a lo que el pobre chico contestó que no había una expresión en japonés para esa expresión. Moore sabía que sí la había... Obviamente, esa fue la última vez que ambos se vieron las caras.

Según Moore, quien admite que aún ama a Sega, esta era una compañía dominada por viejas glorias, como el propio Naka o Yu Suzuki, y todos ellos veían impotentes como el mundo del videojuego cambiaba a su alrededor sin que ellos hicieran absolutamente nada.

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