Yo-Kai Watch 2: Fantasqueletos y Carnánimas
- Plataforma3DS8.2
- GéneroRPG
- DesarrolladorLevel-5
- Lanzamiento07/04/2017
- TextoEspañol
- VocesEspañol
Yo-kai Watch 2 Fantasqueletos/Carnánimas, Análisis
Level-5 toma nota de los errores cometidos en la primera parte y da en el clavo con sus aciertos. El fan de la primera entrega tiene aquí una cita ineludible que, si bien le va a recordar demasiado al susodicho original, gana enteros y adopta un perfil con más identidad que nunca.
Yo-kai Watch 2 Fantasqueletos/Carnánimas, Análisis para 3DS
Es una lástima que licencias que funcionan tan bien en España como prácticamente todo lo que crea Level-5 tarden tanto en llegar a Occidente. Yo-kai Watch nació en 2013 en Japón, pero no fue hasta estas alturas del pasado año cuando pudimos echarle el guante a la propiedad intelectual más exitosa creada en este siglo de la industria nipona.
El estudio de Fukuoka ha creado un producto que va más allá de lo que es meramente el videojuego, siendo capaz de convencer a tanto niños como adultos y también cautivando a miles de jóvenes cada día en televisión. Estamos hablando de más de 10 millones de unidades solo en Japón si sumamos todas las entregas, pero fue precisamente esta la que, con sus tres versiones disponibles, suma más de 5 millones de unidades.
Estas escalofriantes cifras llevaron a Nintendo a tomar la decisión de traer a los Yo-kai tanto a Europa como a Norteamérica, y el resultado se traduce en un acierto desmesurado, que supera ya los 160.000 adeptos en España y una media de más de 200.000 espectadores de media en su primera temporada emitida en Boing. Nintendo 3DS tiene con estos pequeños seres una nueva gallina de los huevos de oro; y hoy, por fin, podemos publicar el análisis de su segunda parte, que con muchas papeletas repetirá el éxito de la primera si sus más acérrimos seguidores no se han olvidado de Nathan y compañía.
¿Es verdaderamente un problema ser continuista?
Y hablamos de olvidos porque es eso lo que precisamente le ha pasado a Nathan, el protagonista, al iniciar la aventura: no recuerda nada de lo que ha pasado. Floridablanca vuelve a ser el escenario en que se desarrolla nuestra pericia, y con estas premisas (olvido, presentación de prácticamente todo como si del inicio de la franquicia se tratase), no tenemos sino la sensación de estar ante una suerte de reboot de Yo-kai Watch pero mejorando los aspectos que más nos hicieron titubear con la primera parte.
Vamos a dejar algo claro desde el principio: Yo-kai Watch 2 es mejor juego que el original; se disfruta más, tiene mucho más contenido y mide infinitamente mejor los tiempos, además de administrar mejor la relación del usuario con el mundo que le rodea. El principal objetivo, el target, son aquellos jugadores no experimentados con los JRPG clásicos, pero no por ello puede carecer de ese toque adictivo que caracteriza a este tipo de títulos. Ya estábamos tardando en nombrar a Pokémon, diréis, pero precisamente lo hacemos para salvar las distancias con la todopoderosa franquicia de Game Freak: no tienen nada que ver.
Su éxito en Japón tiene un porqué
Se comparten muchas cosas entre ellos, cada vez más, de hecho; sin embargo, la esencia de Yo-kai Watch se siente intacta y con cada vez más identidad, algo importante para que en territorios como Europa no haya prejuicios ni falsas consideraciones ante una saga que lleva su propio camino. Esto es algo que queremos dejar claro porque cuando llevas una hora de juego te das cuenta del mayor énfasis en el componente argumental y no tanto en las batallas propiamente dichas. Por desgracia, la historia sigue sin tener un atractivo reseñable, no deja de ser una historia típica de los shonen juveniles; aunque ahora hay algo más de enjundia al ser más larga y haber más criaturas y territorios que explorar.
Aurea y Argenta, dos Yo-kai ancianas y con intenciones de todo menos buenas, robarán a Nathan su reloj. Todo se ha olvidado, una forma de justificar que el título insista en volvernos a explicar todo, tanto en mecánicas como en el significado de los Yo-kai en sí mismos. Esta vez, a diferencia del juego que inició este fenómeno, tenemos la sensación de que los primeros pasos y sus consecuentes pruebas a las que nos prestaremos en las primeras horas están más ordenadas: desde las misiones hasta los minijuegos, es todo más fácil de asimilar y más variado.
Por ejemplo, ahora las misiones se dividen en peticiones, tareas e historia. Dicho de otro modo: se percibe sin problemas qué es aquello que continuará con la línea argumental principal y qué es una sidequest. La doble pantalla ayuda a tenerlo todo mucho más accesible en lo visual, con una de las dos pantallas que nos servirá siempre a modo de mapa. Es realmente cómodo. Además, con esta división mucho mejor ejecutada, el título nos incita a completar esas misiones secundarias sin perdernos, sin notar que nos estamos alejando de lo verdaderamente importante.
Multijugador, también online
Pero vayamos a uno de los puntos que más interesan a las personas que ya conocen la franquicia y que quieren saber qué se ha introducido en materia jugable. Los cambios son más bien escasos, a decir verdad, pero es así como han evolucionado siempre este tipo de propuestas, y es paso a paso como se termina condimentando una fórmula que nunca falla. El combate no difiere en absoluto al de la primera parte (para ello habrá que esperar a la tercera parte, que ya avisamos introduce muchos cambios en la jugabilidad), por lo que aquí la compra entre las dos versiones disponibles (Fantasqueletos y Carnánimas) residirá en las cinco criaturas exclusivas de cada versión y de algún objeto. En realidad hay alguna novedad más exclusiva de cada versión, pero consideramos tras haber terminado la aventura que no merece la pena desvelarlo y arruinar así la experiencia.
Sí hay nuevo minijuegos, además de una completa tableta multimedia con muchísimas opciones, más incluso de las que esperábamos. Los más pequeños encontrarán esto un auténtico lío, lo cual refuerza el argumento de que el título esconde mucho más de lo que aparenta. En la tableta, que parece un iPad, tenemos varias aplicaciones; una de ellas nos ha gustado especialmente porque al mismo tiempo sirve para introducir el modo multijugador, una novedad que abre las puertas hasta a cuatro jugadores para competir no solo en modo local sino también online. El modo en ciernes se llama Pesadilla Súbita, y se puede acceder a él en cualquier momento. Cada uno de los jugadores adoptará un rol distinto y luchar contra los llamados “Oni”, esos gigantes que aparecen por las noches. Fantasqueletos y Carnánimas dan nombre a las dos ediciones del juego, pero también a las dos escisiones que se hacen en los grupos del juego.
Floridablanca se toma un Champiñón
Yo-kai Watch 2 es mucho más grande y no solo por su territorio, más vasto y con emplazamientos por visitar, sino que también tenemos un medio de transporte que nos ahorrará tener que desplazarnos eternamente como en la primera parte –por mucho que tuviésemos la bicicleta-: el tren. Los viajes en este transporte público son amenos y hacen que jugar entre Floridablanca y las dos nuevas ciudades sea mucho más cómodo y divertido. Toca familiarizarse con Vellón y San Fantástico, donde empezaremos a ver los primeros viajes en el tiempo que caracterizan a esta secuela. Sin entrar en demasiados spoilers, en Vellón y Floridablanca estaremos en el pasado, con una Vellón donde la gente ha sido poseída (espiritada, si nos permitís utilizar la jerga del juego). Ahora las conversaciones con la gente no son tan simples y robotizadas; los habitantes de Floridablanca cuentan historias y no solo dicen cosas, algo que valoramos por el empeño que ha tenido Level-5 por asemejar esta franquicia con delicadeza a lo que representan sus otras franquicias de renombre en este sentido, sin ser ni mucho menos tan profundos como Profesor Layton pero sí más equiparables a lo vivido con Inazuma Eleven, que en alguna de sus cinco entregas publicadas en España (solo queda la última de la era “Go”), llegó a tener mucha cohesión y atractivo en lo argumental.
Poco podemos decir que no se pueda ver en las imágenes acerca de su apartado técnico, que aun teniendo en cuenta que las screenshots nunca hacen justicia a lo que es verdaderamente un producto final de Nintendo 3DS, sí demuestra la solidez de sus texturas y modelados. El juego tiene una paleta de colores sobresaliente, además de una pasión por el detalle que pocos estudios nipones recrea con tanto mimo como los del capitaneado por Akihiro Hino. Interiores, exteriores, interfaz, elementos de los escenarios… Todo luce de maravilla y demuestra hasta dónde es capaz de llegar la portátil estereoscópica sin necesidad de acudir a gráficos realistas. No hay caídas de frames, todo fluye y los tiempos de carga no son excesivos: a nivel artístico y de diseño nos ha convencido, definitivamente. Y lo mismo en lo sonoro. Si bien esto pueden ser más apreciaciones subjetivas, las melodías principales de la primera parte nos resultaron algo más adictivas, más perdurables en nuestra cabeza con el paso del tiempo; no obstante, el tema principal no vais a poder evitar repetirlo unas cuantas veces, y los efectos de sonido son igualmente conseguidos, que animan a coger los auriculares mientras juguemos allá donde lo hagamos.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.