El sistema de almacenamiento más seguro, ¿la nube o un disco duro portátil?
Te contamos cuáles son las principales diferencias entre ambos sistemas de almacenamiento.
Los dispositivos de almacenamiento externo han cambiado mucho en los últimos años. En ocasiones hasta te olvidas de que existen gracias a la nube, un sistema muy moderno pero del que todavía muchos desconfían. En su lugar optan por aparatos que se pueden llevar en un bolsillo gracias a que ocupan muy poco, pero entre un disco duro portátil o la nube ¿cuál es el sistema de almacenamiento más seguro?.
Enchufar y listo
Los pendrive o discos duros portátiles permiten almacenar grandes cantidades de datos en un espacio muy pequeño. Los modelos más amplios ya superan los 2 TB, suficiente para almacenar las copias de seguridad de tu smartphone, tu ordenador y el resto de dispositivos móviles de tu casa. Además, son muy cómodos de llevar y no necesitan de una toma de corriente para funcionar.
Su otra gran ventaja es que no necesitas Internet para trabajar. Puedes editar tus textos desde tu PC sin preocuparte de nada más, a menos que trabajes desde un ordenador de sobremesa y se vaya la luz.
El sistema más rápido y versátil
Disponer de tus archivos más importantes dónde y cuándo quieras. Esa es la premisa de la nube. Distintas compañías ofrecen a sus consumidores la posibilidad de cumplimentar sus servicios con espacio en un servidor remoto como es el caso de Google Drive o OneDrive por citar algunos ejemplos.
Su gran ventaja es la versatilidad, ya que puedes acceder al contenido que quieras desde un smartphone tablet o un portátil siempre y cuando tengas Internet. Incluso puedes compartir tus archivos con otros usuarios, a los que puedes asignar una fecha de caducidad.
Pero cuál es el más seguro
Una vez que hemos visto las ventajas de cada uno, son sus desventajas las que determinan si tus datos están más seguros en la nube o en un disco duro portátil. Empecemos por el formato físico, el cual es sensible al entorno. Con esto nos referimos a que depende de otro aparato para que funcione y si no se mantiene correctamente se puede estropear. Los cortes de luz o las caídas causan desperfectos en el aparato que dan como resultado que puedas perder tus datos para siempre. En otras palabras, tú eres el responsable de que tus datos se almacenen correctamente.
Pero la nube tampoco se salva. También es dependiente, en este caso de dos factores: la conexión a Internet, ya que los documentos offline están descargados en un PC o móvil y no se sincronizan hasta que tengas Red, y el buen funcionamiento del servidor, ya que si falla puedes perder tus datos o dejarlos expuestos a tercero en la Red.
La conclusión, una vez conocido los pros y contras de los métodos de almacenamiento, es que ninguno es tan seguro como parece. La nube y los discos duros son complementarios, así que la mejor solución es utilizar ambos, de ese modo estarás seguro de que tienes una copia de tus datos en algún sitio en caso de perderlos.