Robinson: The Journey, Análisis

Naturaleza, Descubrimientos y exploración. 

Son las premisas que nos propone Robinson desde el principio. Y es que Crytek se ha puesto las pilas para crear un mundo virtual lleno de vegetación, paisajes de ensueño y vida allá donde miremos. Bienvenidos al planeta Tyson III.

En Robinson: The Journey, podremos visitar todas las zonas del juego a medida que vamos progresando en un entorno “semi-sandbox” y en el que podemos analizar (muy al estilo de No Man’s Sky) y descubrir criaturas con una herramienta multiusos que nos permitirá además mover ciertos objetos por el entorno. Por tanto el conjunto del juego no solo se basa en avanzar en la historia sino que también apuesta por que exploremos, veamos el mundo y descubramos nuevas criaturas donde ya os adelantamos, los dinosaurios serán los protagonistas.

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Hombre VS Naturaleza.

En el juego tendremos el papel de Robinson un joven cuya nave se estrella en el planeta Tyson III. Allí tendremos que buscar la manera de sobrevivir y buscar cualquier indicio de otro ser humano habitando el planeta. Pero no estaremos solos, contaremos con la ayuda de HIGS, un dron inteligente que nos aconsejará y nos ayudará a lo largo de la aventura y también conoceremos a Laika, una cría de T-Rex con la que estrechamos un vínculo muy fuerte desde su nacimiento y a la que podemos dar ciertas órdenes y será de gran ayuda.

Después de un año viviendo en Tyson III es cuando tomamos el control de Robinson en el interior de su capsula y seguiremos su historia a través de las 5 horas de duración aproximada que tiene el título jugando a un ritmo normal sin entretenernos demasiado en los coleccionables y los descubrimientos. 

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Mecánicas sencillas pero aceptables.

La historia de Robinson se va desarrollando a medida que vamos completando tareas y se nos van desbloqueando nuevas zonas a las que podemos acceder, digamos que es una aventura de lo más clásica que se aleja de sistemas de capítulos y donde los puzles y la exploración  hará que nos movamos de un lado a otro para progresar, puzles que tampoco son excesivamente complejos pero que si puede que causar algo de confusión debido a que la interfaz no posee ningún elemento gráfico que nos indique las cosas con las que podemos interactuar ya que tenemos que acercarnos mucho.

Algo que se echa en falta en el juego es mucha más interacción con el universo del juego limitándonos solo a mover los objetos con la multiherramienta, las ordenes de Laika, analizar descubrimientos y la escalada. No hacemos uso de los mandos de movimiento todo lo haremos apuntando con la cabeza y pulsando botones en el DualShock 4 lo cual se echa en falta para dar esa sensación de realismo que tanto caracteriza a la Realidad Virtual, aunque siendo honestos, la sensación de inmersión por los sonidos y las vistas impresionantes justifican de más una experiencia más que grata en Robinson: The Journey. Algunos paisajes son sencillamente magníficos y visualmente, el juego luce espectacularmente bien.

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El juego está adaptado para distintos tipos de jugadores, aquellos que están acostumbrados ya a la Realidad Virtual como yo, o aquellos que aún tienen problemas con los movimientos. Desde el menú de opciones puedes cambiar el estilo de juego para que se adapte más a tu circunstancia, esto es un detallazo por parte de los desarrolladores.

Robinson: The Journey: Una delicia visual y sonora 

Como os decíamos antes, donde Robinson sí que es capaz de brillar es en el apartado audiovisual, ofreciéndonos una experiencia fantástica, un mundo lleno de vida, sonidos de naturaleza y unos paisajes que quitan el hipo. Quizá estemos hablando del título que a dia de hoy mejor se ve en PlayStation VR porque ya desde el menú principal nos da esa sensación mientras vemos el planeta desde la estratosfera.

Hay paisajes y zonas del juego que están tan bien recreadas que te dará la sensación de ser parte de su universo, tanto en exteriores en la selva o en pantanos como en interiores de cuevas. Las luces, los movimientos, todo está cuidado al detalle haciendo bastante hincapié en el modelado de los dinosaurios que funcionan de maravilla y son estupendos. La sensación de andar entre varios diplodocus es sencillamente fascinante lo cual a los fans de los dinosaurios como yo, les va a resultar una experiencia difícil de olvidar.

Por último mencionar que el juego está en completo castellano tanto voces como texto, algo de agradecer en títulos como este e incorpora un elenco de voces reconocible de algúnos títulos de animación.

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