Rhythm Paradise Megamix
Rhythm Paradise Megamix, Análisis para 3DS
Analizamos Rhythm Paradise Megamix, una entrega que recoge 70 niveles de la trilogía original y añade una treintena de nuevas fases dando como resultado un producto que no es menos que sensacional. Si tienes Nintendo 3DS, tienes una cita pendiente.
Rhythm Paradise Megamix es un título imprescindible en 3DS
Las sagas basadas en una jugabilidad rítmica no están demasiado arraigadas en Ocidente si lo comparamos con Japón, donde han tenido époxas de auténtica pasión por parte de la comunidad en especial en plataformas portátiles, donde hemos visto sagas muy fructíferas como Osu! Tatakae! Ouendan, Elite Beat Agents o Taiko Drum Master. Nintendo tiene también su propia ración de golpes en sincronía con lo que se oye de fondo, la saga Rhythm Heaven, que vive ahora el mejor homenaje imaginable tras tres entregas sencillamente fantásticas. Rhythm Paradise Megamix es sencillamente fantástico.
Nintendo 3DS es una consola que se ha visto beneficiada por haber podido acudir a sistemas de antaño para sacar obras remasterizadas o recopilatorios de títulos de éxito. Los de Tatsumi Kimishima no han acusado de este colchón en demasía, pero con este proyecto ha sido un rotundo acierto. Lo primero que tenemos que dejar claro es que, a pesar de haber 30 nuevos minijuegos (10 de ellos son remakes de anteriores entregas) con 10 nuevos remixes, tenemos 70 procedentes de la entrega de Wii, de la de Nintendo DS y de Rhythm Tengoku, la entrega que nunca llegó a estas tierras y que vio la luz en GameBoy Advance.
Siente el ritmo con Megamix, mucho más que un recopilatorio
El resultado es un producto hecho con mimo, al cual hemos dedicado en estas semanas previas a la redacción del análisis más de 30 horas que se han pasado como una décima parte de ellas. Por primera vez en la serie tenemos un planteamiento acompañado de un pequeño componente argumental; mera excusa para introducir líneas de diálogo y que haya un menú justificado con personajes reconocibles, con identidad.
El Modo Historia, por tanto, es donde pasaremos la mayor parte del tiempo, tratando de avanzar en un sistema de juego bastante bien planteado, en el que iremos avanzando por diferentes mundos con Tibby, el personaje protagonsita que debe traer de vuelta el ritmo en las personas que lo han perdido en el Heaven World. Tenemos un total de 10 mundos con una dificultad gradualmente más compleja, siendo 7 de esos mundos ocupados por un compendio de minijuegos protagonizados por personajes cuyas historias son de lo más extravagante, muy al estilo Wario Ware; muy al estilo Nintendo.
Es un título con el humor metido en la sangre, un humor inintencionado, pero con personalidad, que nos hace jugar siempre con una sonrisa por lo bien que se ve -decenas de colores siempre en pantalla-, efectos y contrastes en las tonalidades que terminando dejando un juego resultón, sin ser exuberante ni aspirar a nada más que ser cómodo para nuestra vista. Tal como decíamos, esos mundos cuentan también con 3 grandes portones que tendremos que superar para llegar a la siguiente gran zona, momento en que veremos realmente un cambio significativo en la dificultad y complejidad de los minijuegos.
Nintendo y su habilidad para hacer magia con un solo botón
A pesar de que haya fases más fáciles que otras -quizá porque congeniemos más con el patrón de esa canción-, lo cierto es que siempre se siente como algo nuevo; cada fallo se paga caro y lograr la máxima puntuación es, sencillamente, un peligro. Rhythm Paradise Megamix es realmente adictivo. Parece mentira que un título cuya jugabilidad se basa eminentemente en la pulsación del botón A pueda dar tanta variedad de situaciones y horas de juego, pero así es. Además, es meritorio que a nivel de diseño las fases sean tan distintas entre sí. Un ejemplo de ello es el recurrente minijuego de los chicos de un coro en el que, al contrario de lo que podríamos esperar, hay que estar en silencio y solamente cantar cuando se nos pide, una fase que se juega a contracorriente de todos los demás, donde pulsaremos el botón la mayoría del tiempo.
No solo este minijuego está de vuelta, son decenas de ellos, pero algunos han sido rediseñados de arriba abajo, actualizando incluso las canciones para que suenen más acorde a la tecnología actual. Aunque no nos hayan gustado tanto como esperábamos las nuevas fases introducidas para Rhythm Paradise Megamix, sí se nota un intento por variar los ritmos, que no todas sean tan sumamente rápidas como por ejemplo en Tengoku.
Con el paso de las horas veremos que hemos intentado una y otra vez un minijuego concreto solo por pasar de 91% al 100%. Es ese afán por la perfección lo que se transmite constantemente, un intento por hacernos valer que somos capaces de dar el máximo en cada uno de los niveles. La recompensa es pequeña, con figuras con la base de color dorado acreditando que hemos bordado nuestra habilidad en ese caso, pero os aseguramos que funciona. Estamos pues ante un título que merece la pena descargar en formato digital preferentemente al cartucho para poder llevarlo siempre encima. Funciona en partidas rápidas en el bus y en tardes enteras en casa. “Inténtalo otra vez” o “Venga, a por la última”, son mensajes que están intrínsecos en esta aventura musical.
Mencionar también la presencia de una cafetería comandada por un perro barista, donde podemos utilizar el StreetPass y varios retos como uno de un tren en el que se pondrá ante nosotros diferentes niveles aleatorios.
Por desgracia, a pesar de tener una puesta en escena muy acertada, tenemos un par de cosas que achacarle a Rhythm Paradise Megamix y que lo alejan por ello del sobresaliente. Los nuevos minijuegos, insistimos, no nos han convencido del todo, y el modo multijugador por algún motivo solo permite ser ejecutado a través del Modo Descarga. No hemos podido iniciar partidas multijugador de otra manera. Es de esperar que cuando el juego se ponga a la venta haya algún parche con el que sí se permita crear un grupo entre varias consolas con el juego instalado.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.