Lo mejor de la Gamescom 2015
La Gamescom ha finalizado, por lo que toca hacer un repaso por lo que más nos ha gustado de la feria de videojuegos más importante de Europa.
Hidetaka Miyazaki no ha decepcionado y, tras Bloodborne, regresa a la saga Souls con energías renovadas y ganas de hacernos sufrir muertes de forma continuada. Durante la Gamescom pudimos ponerle las manos encima a una demo de treinta minutos en la cual vimos un poco de todo: combates con distintas armas -espada, hacha-, coberturas con escudo, movimientos evasivos y ofensivos, enemigos como soldados, ladrones, criaturas con puñales, caballeros de brillante armadura e incluso un jefe imponente que utilizaba un arma de fuego que hacía arder el escenario con sus estocadas, todo corrompiéndose en tiempo real. Una auténtica locura que deseamos poder jugar cuanto antes y que ha sido uno de los grandes títulos de la feria.
Metal Gear Solid V: The Phantom Pain
He aquí el último gran juego de Hideo Kojima, aunque Konami se empeñe en hacernos "olvidar", con cada nuevo update, quién está detrás de Metal Gear Solid V: The Phantom Pain. No lo conseguirán a estas alturas porque además se nota y mucho viendo el título que sus señas de identidad están presentes en cada plano, y la demo de la Gamescom ha servido para constatar que va a ser uno de los grandes juegos de este año de forma indiscutible. La misión era sencilla: simplemente, aniquilar a un teniente en un campamento. Comenzábamos a caballo, con unas animaciones cuidadísimas, todo sea dicho, y poco a poco nos adentrábamos en territorio enemigo con la habitual solidez de las mecánicas de la franquicia. Sentido del humor -la forma de enviar a los soldados a Mother Base-, acción e infiltración y gráficos bastante mejores que los de Ground Zeroes; todo presente en The Phantom Pain. No recorrerá más ferias, pero nos cansaremos (es un decir) de verlo en los premios a los mejores juegos de 2015.
Faith regresa con todos sus trucos viejos y alguno nuevo en Catalyst, título que consigue la sensación de hacernos sentir en casa, de usar el original de base e ir retocándolo hasta ampliarlo y hacerlo mejor. Quedan muchas cosas por ver –esperemos que su modo Historia sea más largo y el sistema de combate accesible aunque no simplificado al exceso-, pero en un vistazo rápido, los fans del original no tienen que temer por la integridad de esa IP de la que se llevaron años pidiendo más.
Blizzard viajó hasta la Gamescom con la mochila bien cargada de novedades de todas sus licencias y, sobre todo, Overwatch, el FPS en el que están puestos los ojos de millones de aficionados a la desarrolladora en todo el mundo y que esperan con ansia no pocos aficionados a los deportes electrónicos. La compañía ha aprovechado la feria de Colonia para presentarnos a Lucio, el personaje número 16 que se une al cada vez más abultado elenco de héroes que podremos controlar en este particular FPS, cada uno de ellos con su propia historia y habilidades especiales.
Remedy es uno de los estudios de desarrollo con más personalidad, en el sentido en el que sus juegos podrían ser únicamente suyos: la forma en que abordan la narrativa es marca de la casa, asentada tras Max Payne y extendida por igual a su secuela y a Alan Wake. También sus mecánicas suelen ceñirse a patrones muy definidos, y con Quantum Break el objetivo es hacer lo mismo pero llevarlo a un terreno más fértil, incorporando elementos fantásticos para hacer que la jugabilidad y la narrativa se fusionen en un juego que esta Gamescom ha conseguido colocarse muy cerca de lo mejor de la pasada semana. A su presentación oficial de protagonistas se le unió la explicación de cómo funciona la manipulación del tiempo y lo bien que encaja a la hora de construir los "puzles", un poco al estilo Braid pero llevado por el terreno de la acción. Nada mal, desde luego, y gráficamente hemos visto pocas cosas más espectaculares.
Hideki Kamiya es el responsable de títulos como Bayonetta y Metal Gear Rising: Revengeance; es decir, de algunos de los mejores juegos de acción de los últimos años. Y con Scalebound va a dar un paso más allá porque su objetivo es ampliar el espectro, pasar de los combates salvajes, con combos locos y espectaculares, a añadirle a todo eso un elemento de RPG en tiempo real en el cual podremos enfrentarnos a numerosos enemigos, avanzar por escenarios gigantescos, montarnos a lomos de un dragón y atacar a los rivales, etcétera. Como una mezcla imposible entre la película Cómo entrenar a tu dragón y Devil May Cry, la gracia reside en que controlando a Drew, el protagonista, la IA se encarga de gestionar a nuestro compañero alado, al cual podemos personalizar a nivel estético e incluso elegir qué tipo de habilidades tendrá, resultando en que tú y tu mejor amigo podréis tener una criatura completamente distinta. Una apuesta exclusiva de Xbox One que llegará a las tiendas a finales de 2016.
Con "El despertar de la fuerza" a apenas unos meses de su estreno, Star Wars Battlefront se antoja realmente necesario para calmar las ansias de una nueva entrada en el sector de la franquicia creada por George Lucas, si obviamos Disney Infinity, cuyo objetivo es claramente un público más joven. Y si ya en el E3 nos encantó lo que pudimos ver, con esos momentos de puro fanservice en forma de apariciones de Luke Skywalker y Darth Vader, esta Gamescom la cosa no ha ido a menos. De hecho, ha sido galardonado oficialmente como el mejor juego de toda la feria, y es que fue allí con toda su artillería y tanto el público como la prensa pudimos disfrutar de sendas demostraciones jugables muy interesantes.
Más de ocho años le ha durado a Capcom el magnífico Street Fighter IV -y sus tres revisiones- y con Street Fighter V la apuesta irá más allá: sólo un disco con actualizaciones regulares, gratuitas si queremos desbloquearlas jugando, o de pago si optamos por la inmediatez. 16 personajes en plantilla en el momento de salida del título, algunos nuevos -cuatro-, otros completamente remozados, como Ken, y mecánicas reinventadas con respecto a capítulos anteriores. La base sigue ahí, y jugando se nota, pero también se siente como algo diferente, un reto interesante a afrontar si nos gustan los juegos de lucha. Capcom tiene todas las cartas sobre la mesa y su plan de marketing se centrará ahora en dar a conocer las novedades del que está llamado a ser EL juego de lucha de la generación, y eso que el notable reboot de Killer Instinct y títulos como Guilty Gear Xrd se lo han puesto difícil. En primavera de 2016 saldremos de dudas, pero por lo que hemos podido ver -y jugar-, el potencial es altísimo.
Cuando hablamos de juegos independientes suele salir a la palestra aquello de los 'falsos indies', juegos producidos por grandes compañías y que desarrollan estudios first party con menos presupuesto que, eso sí, sus triples A. Journey de thatgamecompany es uno de estos ejemplos, y también encontramos por ejemplo a Ubisoft con Valiant Hearts y Child of Light. A diferencia de estos tres ejemplos, Unravel es un 'indie' de verdad: su estudio, formado por 3 personas, estuvo dos años trabajando en el juego hasta que Electronic Arts llamó a su puerta para distribuirlo. Y es una suerte porque de lo contrario quzá habría pasado desapercibido, y tras probarlo en la Gamescom entendremos que eso habría sido un auténtico error: un plataformas con puzles, aspecto visual cálido, realmente atractivo, en una historia iniciática que se espera en las tiendas para dentro de muy, muy poco tiempo. No quisieron precisarnos cuándo, pero la intención es que lo veamos este mismo año. Crucemos los dedos.