Descubren un bug de Bloodborne que debilita a los jefes

El reciente lanzamiento de Bloodborne en PlayStation 4 ha dejado tras de sí numerosos testimonios acerca de la dificultad del título, especialmente a la hora de derrotar a ciertos jefes. Algunos usuarios han sido capaces de descubrir algunos trucos para facilitar las cosas en los combates, pero el definitivo parece residir en el tiempo.

El usuario de Reddit Meatballz ha descubierto un bug en el último título de From Software que consiste en dejar la consola funcionando durante medio día para que los bosses sean más fáciles de eliminar. De este modo, si retomamos la sesión tras mantener la PlayStation 4 encendida durante un mínimo de 12 horas, hallaremos monstruos más débiles.

Ejemplo de ello es Logarius, un jefe que realiza rápidos movimientos con su arma a larga distancia, pero que se ralentiza tras dejar el juego funcionando, acotando sus movimientos y siendo más accesible en distancias cortas. Lo mismo sucede con Amelia, Mergo, Micolash Ebrietas y otros jefes que experimentan un gran cambio a la hora de luchar.

Este truco ha causado un gran revuelo en la red y algunos usuarios afirman que este bug también se produce cuando cambiamos a un personaje nuevo, suspendemos el juego sin cerrarlo del todo o estamos online. A continuación, podéis ver una comparación de Logarius en su estado normal y un vídeo en el que aparece bugueado tras 12 horas.