Street Fighter la película de Jean Claude Van Damme cumple 20 años

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Las adaptaciones de Videojuegos al cine siempre ha sido un terreno muy delicado. Y si os quejáis de Resident Evil, Dungeon Siege o Doom, probad a echarle un vistazo a las primeras, a Mario Bros y su Bowser/King Koopa convertido en un Dennis Hopper rubiales que aquí podéis ver enterita en castellano -peli en la que deberían poner el 'disclaimer' al inicio de "Cualquier parecido con el videojuego es pura coincidencia o lo colaron en pantalla sin que los directores se diesen cuenta".

Entre este sub-género hemos visto de todo, desde Tomb Raider a Wing Commander, Prince of Persia o Silent Hill -al amigo Uwe Boll es para echarle de comer aparte. Pero hace un par de décadas, cuando la 4ª Gen reinaba y Mega Drive y Super Nintendo eran las Diosas del mercado, tras Mario Bros vino una serie de conversiones a film de tres arcades de lucha, y casi seguidos, porque tuvimos Street Fighter, Mortal Kombat -decid lo que queráis, pero ese temazo techno y los fatalities convencían a los adolescentes del momento que queríamos ver el juego en pantalla-, y Double Dragon, recordada aparte de por lo mala que era, quizás por ese famoso plano del trasero de una Alyssa Milano pre-Embrujadas entrando en un tunel.

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Pero es la primera la que nos interesa, ya que Street Fighter The Movie ha cumplido 20 añazos desde que llegó a los cines en la Navidad de 1994. Dos décadas en las que la cinta ha ido envejeciendo cada vez peor. Y si Blanka ya era cutre y una decepción -que no pegaba una mala ostia 1vs1 siquiera ni electrocutaba a nadie-, ahora es carne de meme. Y de Bison, un error de casting gigante con el que el gran Raul Juliá se despidió del Cine pero manteniendo su profesionalidad y dándole la maldad pura que M. Bison tenía; Dalhsim o Ken y Ruy mejor no hablamos… Aunque Vega si se le parecía aunque le hubiesen cambiado el color de pelo. El director, el mismo que lo creáis o no firmó guiones de cintas como Jungla de Cristal -Steven E. de Souza-, declaró en su momento que le encantaban pelis como "La Gran Evasión y los Cañones de Navarone", que ciertamente tienen lo mismo que ver con Street Fighter II el videojuego que David Cage con la secuela de Titanfall.

¿Y Guile qué? Convertido en protagonista al ser encarnado por un Jean Claude Van Damme en la cima absoluta de su popularidad, Guile se enzarzaba en una vendetta contra Bison por motivos personales mientras a su alrededor iban saliendo el resto del plantel –T.Hawk parecía tener anemia, Cammy solo enseñaba las coletas. En los comentarios del DVD y del Blu-ray editado por Sony –reconozcámoslo, algunos los tenemos en la estantería-, el director decía que no quería hacer la típica peli de artes marciales, sino una mezcla, atención, de “Star Wars, James Bond y una peli de guerra”, evitando intencionadamente no parecerse al juego en todo para evitar el desastre crítico que Mario Bros fue un año antes –ya que Mario Bros la peli es una adaptación fidedigna del juego por lo visto…- y que los poderes y cosas sobrenaturales se los guardaba para “una secuela”. Una secuela que el ostionazo crítico que se pegó –aunque tuvo éxito de taquilla, gracias sobre todo a ser el film del juego de moda y a que Van Damme estaba en ella- evitó que se rodara.

Pero aunque la cinta sea lo que sea, es mítica, un festival del cosplay constante –el plano final, ahí lo dieron todo-que cumple 20 años y que es un producto de su época. Os aconsejamos que la veáis por malsana curiosidad o nostalgia, con amigos mejor, y jugar al juego que generó. Exacto, un videojuego basado en una película basada en un videojuego. Pero si lo que queréis es calidad asociado al nombre de SF II, probad con la película de animación que Capcom produjo, un torrente de peleas brutales, intensas –aquí tenéis la de Vega con Chun-Lí, ultraviolenta y con un tema musical potente-, con una BSO de lujo y que también cumple 20 años y conquista desde ese prólogo que recrea el combate final de Ryu contra Sagat del primer SF de la serie. Y en la que Brian Cranston, el inmenso prota de Breaking Bad, le ponía la voz a Fei Long.

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