PES 2015, Análisis

Nota: Por motivos técnicos desde Konami no hemos podido probar el multijugador, actualizaremos el análisis y la valoración sobre este apartado lo antes posible una vez que abran los servidores.

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Tras una larga espera con respecto a su máximo rival llega a nuestras manos PES 2015, la apuesta de este año del simulador de fútbol de Konami en la que la compañía nipona pone toda la carne en el asador y gasta la que quizás sea su última bala, su última oportunidad para volver a conquistar los corazones futboleros de todos los aficionados que ha perdido durante la pasada generación y, sobre todo, a causa de los problemas iniciales de la entrega anterior.

Quizás sea por eso por lo que Konami haya decidido ser paciente, aguardar su momento y no sacar a la venta su juego hasta ya el tardío noviembre, con una diferencia de más de un mes y medio con respecto a la entrega anual de la saga FIFA de EA Sports, su más fiero rival en los terrenos de juego. Por suerte para nosotros esta espera ha merecido la pena y Konami nos trae un producto que esta vez está pulido, que es sólido y al que se le nota una gran cantidad de trabajo con un nuevo motor como es el Fox Engine ya dominado por parte de sus desarrolladores.

Gol de PES

Vamos a comenzar este análisis hablando de lo más importante, de lo que realmente ha interesado históricamente al jugador de PES más allá de las diferentes licencias e incluso modos de juego, vamos a hablar del título a nivel jugable, de cómo se controla, de lo efectivos que son sus pases, sus disparos, del comportamiento de la IA y de todo o casi todo lo que sentiremos cuando el balón comience a rodar en el césped virtual.

Todas las buenas sensaciones que tuvimos con la demo están muy presentes en PES 2015. El comportamiento y las físicas del balón siguen cumpliendo con el nivel establecido hace ya muchos años por el PES TEAM que es, desde luego, difícil de superar. Sentiremos que el balón rueda como debe, que pesa lo que tiene que pesar y que reacciona a la perfección ante los diferentes impactos y situaciones a los que lo expondremos mientras disputamos nuestro partido. Da igual si se trata de su comportamiento en los pases cortos o en profundidad, en los botes que dé tras un rechace o un pase en largo o en su velocidad o comportamiento durante algunos tiros (aunque aquí sí que quizás la potencia esté exagerada un poco) lo cierto es que la pelota se siente exactamente igual que la que observamos en nuestra pantalla del televisor cuando vemos a nuestro equipo favorito o a la que tenemos en nuestros pies cuando nos encontramos jugando un partido real con nuestros amigos.

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Gracias a estas físicas podemos realizar con gran precisión la acción que nos permitirá combinar con nuestros compañeros y abrir defensas: el pase. Todas las mecánicas referentes a los pases funcionan a la perfección, tanto si ejecutamos los pases rasos manuales, como con ayudas, veremos cómo la pelota se dirige allá donde queremos enviarla, aunque si tenemos la asistencia a los pases habilitada a su máxima potencia puede que el balón salga teledirigido hacia un compañero que no queramos, por lo que recomendamos encarecidamente jugar con la menor ayuda en pases posible.Aunque el balón y su comportamiento también tiene algunos fallos, ya que hemos detectado como en alguna ocasión atraviesa misteriosamente el brazo de un jugador cuando está haciendo una entrada a ras de suelo, o que choca contra alguna sin que se sancione algún tipo de sanción, además de quedarse debajo de los jugadores en varias ocasiones cuando le hacemos una entrada leve y cae derribado al suelo.

Otro de los detalles que funcionan a la perfección es el pase en profundidad, que este año sigue teniendo en su poder dos mecánicas diferentes, la básica, la cual nos permite enviar buenos pases a nuestros compañeros con mucha precisión; o la avanzada gracias a la cual tendremos un control total sobre la trayectoria de la pelota. Esta última mecánica es difícil de dominar y puede que al principio haga que fallemos gran cantidad de entregas pero a la larga, si somos pacientes y conseguimos dominarla será toda una golosina para nuestras acciones ofensivas, ya que gracias a este mayor control sobre la pelota podemos asistir a nuestros delanteros y romper las defensas rivales con unos pases dignos de Cruyff o Zidane. Esta mecánica también está presente en los pases en profundidad elevados, pudiéndole sacar todavía más provecho a la misma. También cabe destacar los pases en largo que sufren de las mismas virtudes y bondades que el de los pases a ras de césped.

Pasemos ahora a los tiros o a la finalización de las jugadas. Algo muy criticado en PES 2014 eran las dificultades que tenían nuestros jugadores de rematar a portería de primeras, según les llegaba un pase o un rechace. Este problema (que también estaba presente en los pases) se ha solucionado abriéndonos un gran abanico de posibilidades en cuanto a los diferentes tiros y remates tanto con los pies mediante boleas o chilenas como de cabeza. Algo que notaremos desde un primer momento es que los tiros de media o larga distancia siguen siendo bastante potentes pero no tanto como en las entregas anteriores, además de que esta vez son menos precisos y nos será más difícil colocar un tiro entre los tres palos desde fuera del área y, para colmo, muchos de los que encuentren portería serán rechazados por el portero ya que tienen más tiempo de reacción gracias a la larga distancia.

Algo que sigue sin gustarnos es la mecánica avanzada de tiro, que está disponible junto a la básica y a la manual al igual que en la entrega anterior. En el modo avanzado tendremos más precisión sobre el balón, sí, pero como ya ocurriera en PES 2014 el esférico se queda cerca de los palos o de las escuadras en demasiadas ocasiones e incluso en algunos partidos chocaremos contra la madera varias veces, demasiadas. La mecánica mejora respecto al año pasado, sí, pero aún necesita afinarse para que compense al jugador. En cuanto al modo manual sigue siendo tremendamente difícil de usar, ya que deberemos apuntar al punto preciso donde queremos que vaya el balón, algo nada fácil cuando tenemos a varios defensas presionándonos. Eso sí, su dominio, al igual que el modo avanzado en los pases en profundidad, implica aumentar drásticamente nuestras posibilidades de marcar un gol.

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Pero para lograr chutar y marcar ese gol muchas veces deberemos de lograr esquivar al adversario con un regate o reaccionar a tiempo para ordenar a nuestro jugador realizar una determinada acción en el segundo o más bien la décima de segundo decisiva que nos va a separar de sumar un tanto, o no, a nuestro marcador. En cuanto al sistema de regate sigue siendo una de las mejores cosas que se han implementado a PES en los últimos tiempos. Como en casi todas las acciones podremos escoger entre la mecánica asistida y la manual, siendo en este caso la primera la más recomendable, ya que es tremendamente accesible y nos permite ejecutar bicicletas, amagos y quiebros combinando los dos sticks y el botón R2 de una forma bastante intuitiva.

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Este gran sistema ya nos gustaba el año pasado, pero se encontraba con un grave problema que lo rastraba al igual que al resto de las mecánicas del PES, que no era otro que una latencia demasiado aguda, un retraso severo entre lo que mandábamos ejecutar en nuestro mando y el tiempo que tardaba en reaccionar el jugador para ejecutarlo. Este problema se hacía todavía más evidente cuando queríamos cambiar de jugador, provocando auténticos líos en la defensa. Por suerte, todos estos problemas se fueron solucionando el año pasado mediante actualizaciones y están corregidos de forma definitiva en PES 2015. Comprobaremos como no tendremos ningún retraso a la hora de cambiar de jugador o a la hora de que nuestros futbolistas ejecuten las acciones que les estamos ordenando, siempre que tengan la habilidad necesaria y que ningún contrario se lo impida, claro.

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Gracias a esto y a los pases y tiros o remates al primer toque solucionados el juego gana muchísimo en fluidez pudiendo ejecutar paredes,  quiebros y diferentes acciones tal y como lo deseamos en cada momento, con un comportamiento muy fiel al de los futbolistas reales gracias a las diferentes animaciones que están presentes en esta nueva edición del simulador de fútbol y que además se realizan de forma muy suave gracias al dominio que ahora tiene el estudio del Fox Engine. De hecho, en los últimos años lo que más lastraba a PES eran esas animaciones robóticas que pedían un cambio hacia una nueva generación a gritos, cambio que quiso introducirse el año pasado junto a este cambio de motor sin demasiado éxito y que ahora sí se hace completamente efectivo en el juego. Gracias a ellas podremos realizar jugadas de fútbol de salón, ejecutar diferentes disparos, entradas, remates o combinaciones entre nuestros jugadores ya sea moviendo la pelota al estilo "tiki taka" o haciendo un potente contraataque al más puro estilo de Mourinho. Eso sí, algo que podemos reprocharle a Konami es que pese a que todas las animaciones incorporadas al título hasta ahora son tremendamente fluidas se extraña alguna más, sobre todo a la hora de realizar pases o tiros, ya que las posturas de los jugadores parecen en ocasiones un tanto incomodas a la hora de realizar estas acciones por culpa, precisamente, de no tener un abanico más amplio de animaciones o movimientos disponibles. No es una falta grave y es algo que fácilmente puede mejorarse en las futuras versiones de PES, pero es un detalle que debe mencionarse.

Con todo el espectro ofensivo prácticamente cubierto creemos que es el momento de centrarnos en la defensa, en nuestro muro, y el del equipo rival, para no encajar goles y que se nos escape de las manos el partido. El sistema defensivo sigue la misma línea que en las últimas entregas de PES, con la salvedad de que los jugadores, como en la ofensiva, reaccionan mucho mejor a todos los comandos que estamos ejecutando, lo que nos permite controlar de forma más precisa el timing para realizar una entrada, ya sea metiendo el pie o a ras de suelo, para intentar arrebatar el balón a nuestro contrincante. En estas acciones, así como en las de ataque, hemos notado grandes diferencias dependiendo de la calidad de nuestros defensores que entrarán más limpiamente si son centrales de categoría o que serán más torpes a la hora de ir al suelo, provocando más fácilmente una falta, para los que tengan unas características menores.

Un factor muy importante a nivel defensivo es el de la IA, de la cual os hablaremos en este momento centrándonos primero en este aspecto y pasando luego en cómo se comporta nuestra IA en ataque, para terminar finalmente este apartado con el comportamiento de la Inteligencia Artificial de la CPU. Lo cierto es que a nivel defensivo poco hay que reprocharle a la IA de PES, corta bien los balones, se sitúa bien, realiza bien los apoyos y reacciona bien cuando le pedimos que nos ayude en la presión con un segundo jugador. Sin embargo no está falta de carencias ya típicas en la saga, dado que a veces algún defensor falla ante un balón bastante sencillo (un fallo muy presente en anteriores entregas que ahora ocurre en contadas ocasiones pero que sigue existiendo) y que nuestra defensa suele tener dificultades para hacer caer a los rivales en la trampa del fuera de juego.

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Cuando vamos a la ofensiva el resultado también es bastante satisfactorio. Realiza buenos desmarques, apoya a las jugadas presiona en las líneas más avanzadas y se coloca con inteligencia en casi todo momento, aunque en ocasiones se cruza en algún momento poco oportuno en la trayectoria de nuestro disparo (casi por accidente, todo sea dicho) y que a veces realiza un amago de desmarque que luego no realiza, perdiéndose nuestro pase a ese jugador en el limbo.

Respecto a la inteligencia rival hemos de decir que se comporta también de una manera bastante efectiva, dependiendo, claro está, del nivel de dificultad al que estemos jugando a Pro Evolution Soccer, siendo bastante pasiva y dejándonos bastante libertad de movimientos en las dificultades menos exigentes y tratándose de un auténtico vendaval de inteligencia futbolística en la Leyenda, la más elevada. Todo esto sin perder el estilo de juego de cada equipo en cuestión, encontrándonos con rivales que nos esperarán más y elegirán el contraataque como principal arma u otros que optarán por marear la pelota hasta encontrar un hueco en nuestra defensa, pero tampoco seamos ingenuos, en las dificultades más elevadas la IA moverá con muy buen criterio y sin cometer demasiados fallos la pelota, sea el equipo que sea. Aunque, para nuestra sorpresa, también hemos detectado que en esta ocasión la CPU no es tan exigente en la dificultad más alta y que, esta vez por suerte, no recurre tanto a los conocidos "momentos Konami" gracias a los cuales nos marcaba un gol casi obligatoriamente cada vez que concedíamos una falta o realizaban un tiro con una posición favorable a portería.

El siguiente punto en nuestro análisis lo queremos dedicar a los porteros, esos casi siempre grandes marginados en los juegos de fútbol que ahora, por suerte, son también grandes protagonistas en PES. Ya lo dijimos unas cuantas líneas más arriba, este año es más difícil marcar desde fuera del área porque los tiros son más reales y porque los porteros reaccionan mucho mejor a los cañonazos de los jugadores, realizando auténticos paradones y despejándolos hacia la dirección correcta y no hacia el centro en la mayoría de las ocasiones. Los metas también reaccionan muy bien ante los rechaces y las segundas jugadas, pudiendo encadenar con facilidad unas cuantas buenas paradas seguidas e incluso provocando que lo alabemos y demos gracias por su existencia si se trata de nuestro portero o que intentemos destrozar nuestro mando contra el suelo si se trata de una gran acción del rival porque lo cierto es que los guardametas pueden llegar a cuajar auténticos partidazos, solo tenéis que ver las paradas que realizó Iker Casillas o algunas parada de Neuer en nuestro vídeo de Estamos Jugando de PES 2015 para daros cuenta del nuevo nivel que han alcanzado.

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Este nuevo nivel también llega a las salidas, en las cuales se comportarán de una manera muy buena, a veces quizás un tanto arriesgada, pero reaccionando y anticipándose a los delanteros de una forma bastante efectiva cuando abandonan la portería o en el uno contra uno. Eso sí, también tienen sus fallos, ya que reaccionan un tanto tarde ante algunos tiros leves pero preciosos (los que nosotros realizamos con el botón R2 en PS3 y PS4) y que en los saques de faltas, centros o saques de esquina optan demasiado por despejar el balón de puños en vez de agarrarlo con las dos manos y no provocar una segunda jugada. Otra particularidad de los porteros este año es su saque con la mano, que por fin resulta mucho más efectivo que en entregas anteriores aunque en esta edición la potencia de los mismos en muchas ocasiones es demasiado exagerada, algo que deberá calibrar Konami en las próximas fechas.

Aprovecharemos este punto para enlazar con las jugadas a balón parado, que siguen también la misma línea que las entregas anteriores, con la guía de puntos que ilumina la trayectoria que seguirá la pelota, los controles reversibles para poder escoger la dirección a nuestro gusto, la posibilidad de implicar a varios lanzadores en una falta o un saque de esquina o la posibilidad de teledirigir dichos saques usando el ya clásico sistema de pulsar L1 junto al stick analógico para escoger el jugador al que queramos que vaya la pelota. La ejecución de estos saques es buena aunque quizás echemos en falta un poco más de libertad a la hora de ejecutar los diferentes saques. Como curiosidad diremos que se ha usado la parte izquierda del panel táctil de PS4 para darnos la posibilidad de cambiar el lanzador del saque en cuestión.

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Precisamente, los responsables de sancionar estas jugadas a balón parado son los árbitros, un punto en el que PES sigue teniendo problemas, sobre todo a la hora de escoger el color de las determinadas tarjetas dependiendo de las distintas acciones, encontrándonos alguna vez con alguna tarjeta roja de lo más injusta o con entradas violentas que no se castigan ni con tarjeta amarilla.

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Táctica y extras en el terreno de juego

Algo que ha caracterizado a lo largo de su historia a la saga PES son todas las opciones a nivel táctico con las que cuenta el título de Konami. Estas opciones seguirán muy presentes en esta entrega, pudiendo tener libertad total para escoger la posición de cada jugador en el terreno de juego y el rol que va a desempeñar en el mismo. Algo que nos ha gustado mucho es el sistema de formación fluida gracias al cual la posición de nuestros jugadores en el campo irá variando dependiendo de si tenemos la pelota en nuestro poder o no. Además podremos dejar configuradas diferentes formaciones que podremos cambiar con la cruceta del mando para rotar la formación dependiendo de cada situación del partido, pudiendo enrocarnos defensivamente o desplegar toda nuestra artillería de ataque con solo un par de pulsaciones.

Por si fuera poco, también podremos gestionar otros apartados estratégicos de nuestro equipo como los marcajes al hombre, los jugadores predeterminados para lanzar las faltas, los centrales que subirán a rematar de cabeza o lo que se juntarán nuestras líneas a la hora de defender, atacar u ofrecerse en las diferentes situaciones del juego. En este sentido se han quitado algunas opciones que podían confundir a buena parte de los jugadores y se han dejado menos grupos, más generales, que podremos ir ajustando desde este menú a nuestro gusto.

Otro de los extras que suman en PES son los estadios y la gran fidelidad con la que, los pocos oficiales que están presentes, están llevados a cabo. Hay que destacar también que este año podremos escoger en las opciones la altura del césped y su humedad, aunque no hemos visto cambios significativos en el comportamiento de la pelota cuando escogemos una u otra opción. De los estadios una parte importante y muy protagonista es el público, del cual distinguiremos sus cánticos y sus diferentes reacciones dependiendo de las acciones que sucedan en el terreno de juego, aunque a nivel visual nuestros seguidores siguen sin ser demasiado atractivos, una constante para que no le exijan demasiado al motor gráfico del juego para así exprimirlo en algunas otras características más importantes como las caras ultra realistas de los jugadores.

Para finalizar este punto de extras que también podremos disfrutar durante los partidos os hablaremos de los comentarios que, por desgracia, siguen sin estar a la altura del simulador de fútbol de Konami. Carlos Martínez sigue resultando tremendamente soso a la hora de narrar los partidos y la presencia de Maldini no aporta absolutamente nada al juego, por no hablar de que se han añadido muy pocas frases nuevas con respecto a años anteriores y que, en la versión del título a la que hemos jugado había varios errores, como decir que la falta la había hecho el jugador que la había recibido, por poner un ejemplo.

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Ligas de Campeones

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Pasemos ahora a detallar los diferentes modos de juego, copas y competiciones que estarán presentes en Pro Evolution Soccer 2015. Este año la apuesta de Konami en este sentido ha sido muy fuerte, creando nuevos modos e incorporando más variedad que nunca de copas, ligas y modos propios a su simulador de fútbol.

Vamos a empezar hablando de las copas oficiales que están presentes en el juego. Un año más estarán disponibles la competición más importante a nivel de clubes del planeta, la UEFA Champions League su hermana pequeña, la UEFA Europa League. Para acompañarlas y con gran repercusión en el mercado Latinoamericano nos encontramos con la Copa Libertadores, la competición estrella de América del Sur que reúne a los mejores equipos de Latinoamérica. Este ha sido un gran movimiento por parte de Konami ya que, además de arrebatarle las licencias oficiales de esta competición a FIFA también ha conseguido hacerse con las licencias de los equipos de Brasil, que este año no estarán presentes de forma oficial en el juego de la competencia.

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Para seguir completando este catálogo de copas y tener contento a los aficionados de todos los continentes también podremos disputar la Copa Sudamericana y la AFC Champions League, la Liga de Campeones de la zona asiática, una competición cada vez más llenas de viejas estrellas y en la que podemos encontrar, por ejemplo, a jugadores como Raúl González. Por si no tenemos suficiente con estas copas oficiales también tenemos a nuestra disposición La Copa Internacional para enfrentar a las selecciones de los equipos de todo el planeta además de las copas individuales de los continentes, todas estas sin licencia oficial eso sí (aunque muchas de las selecciones si tienen los derechos). Para los más exigentes también estará presente este año la ya clásica Copa Konami gracias a la cual podremos crear una competición a nuestro gusto.

En las ligas el PES Team también ha pisado el acelerador y ha ampliado fronteras y mejorado su trabajo, aunque seguimos teniendo el lastre ya habitual en esta saga que es el de no tener las licencias de muchos de los equipos más importantes del continente, algo que se hace especialmente cuesta arriba en la Liga Inglesa, donde solo vemos licenciado al Manchester United. Por suerte para los jugadores españoles nuestra Liga BBVA sí que cuenta con todas las licencias y además, este año, PES 2015 incluye también la segunda división de nuestra competición (totalmente licenciada) así como las segundas divisiones de la liga inglesa, francesa e italiana. Dentro de este apartado también nos encontramos con una Liga que engloba a varios de los equipos más importantes de Europa que no juegan en las ligas más importantes de nuestro continente, una Liga que agrupa a los conjuntos asiáticos, la liga de Brasil, la Argentina, otra en la que se incluyen el resto de equipos importantes de Latinoamérica y la Liga Konami que, como con la copa, podemos personalizar a nuestro gusto. Por lo tanto, PES 2015  incluye un total de 16 ligas que son las siguientes: Liga inglesa, 2ª división de Inglaterra, Liga italiana, 2ª división de Italia, Liga BBVA, Liga Adelante, Ligue 1, Ligue 2, Eredivise, Liga de Portugal, Liga PEU, Liga brasileña, Primera División AFA, Liga PLA, Liga PAS y Liga Konami.

Comencemos ahora hablando de los modos propios de PES 2015, englobados dentro de la categoría Football Life. Entre ellos tenemos que destacar el nuevo modo myClub, que viene para sustituir a la Liga Master Online y que nos permitirá crear el equipo de nuestros sueños, gestionando el tipo de entrenador que lo dirigirá, parte de su estrategia, fichando los diferentes jugadores con un ingenioso sistema de representantes, fichajes directos entre jugadores y premios que obtendremos al disputar partidos con otros jugadores, gracias a los cuales iremos ascendiendo de categoría si ganamos un número determinado de partidos por división o contra la CPU, también englobada en un sistema de rankings, así como los ya clásicos partidos en modo entrenador en los cuales simplemente daremos órdenes a nuestros jugadores, sin controlarlos con el mando.

Uno de los modos más clásicos de la historia de PES es la Liga Master, para la que este año han querido hacerla un poco más sencilla y accesible, eliminando objetos o complicadas mecánicas de entrenamiento y dando algo más de libertad a la hora de negociar los fichajes de los jugadores, pudiendo, por primera vez desde PES 4, intercambiar jugadores entre los diferentes equipos y seleccionar las diferentes ofertas y primas a los jugadores con total libertad. Este año además al final de cada temporada decidiremos si seguir en nuestro club o si mudarnos a otro equipo que nos haga una oferta para contratarnos y también podremos gestionar, a la vez que a nuestro equipo, a una selección nacional que nos haga una buena oferta. Como siempre, dentro de la Liga Master están contempladas todas las ligas y copas continentales e intercontinentales, además de ofrecernos la posibilidad de empezar con los jugadores reales de nuestra plantilla o con unos directamente determinados por el PES TEAM. Por lo tanto cambios en este modo hay pocos, pero en general están bastante bien resueltos, se han recortado cosas que complicaban el modo quizás en exceso y que nos hacían la vida un poco complicada y se han añadido mejoras en los fichajes que resultarán satisfactorias para la mayoría de los jugadores.

El tercer modo en discordia dentro de Football Life es otro de los modos que ya son habituales en las últimas entregas, Ser una Leyenda, gracias al cual nos pondremos en la piel de un jugador creado a nuestra imagen y semejanza o de un futbolista real que controlaremos de forma individual para intentar convertirnos en el mejor futbolista del planeta. Este modo no ha sufrido cambios importantes y sigue sin tener un atractivo demasiado evidente. Sigue tratándose de un buen añadido, sí, pero seguimos creyendo que le falta algo de chispa para darle todo el potencial que podría tener.

Hablemos ahora del apartado multijugador de PES 2015, una faceta cada vez más importante en los juegos de fútbol para alargar su vida y hacer que crezca su comunidad gracias a sus modos de juego y al pique pertinente de disputar un partido con un jugador de cualquier parte del planeta. Tras unos días probándolo, hemos de decir que, a nivel general, en los partidos que hemos disputado casi no hemos tenido problemas de latencia a excepción de algún pequeño tirón en algún momento puntual del juego, pero lo cierto es que nuestros jugadores han reaccionado casi tan bien a nuestras órdenes como en el modo offline. Eso sí, en algunos partidos sí que nos hemos encontrado con algún caso de lag más importante y pese a que hemos podido finalizarlos con normalidad lo cierto es que se notaba como nuestros jugadores tardaban en ejecutar nuestras acciones, además de contar con ciertos comportamientos erráticos de la IA. Además hay muchos jugadores que están reportando a través de las redes sociales fallos a la hora de encontrar rival en el matchmaking y problemas para conectarse a los servidores de Konami. Para nuestra suerte, nosotros no nos hemos visto afectados exceptuando una ligera caída puntual y un pequeño problema a la hora de encontrar un contrincante en uno de nuestros partidos, pero lo cierto es que este problema existe, afecta a un buen puñado de jugadores y que Konami, en el momento que estamos escribiendo estas líneas, se encuentra trabajando para aportar soluciones.

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Por lo que respecta a los modos de juego la principal novedad la encontramos en myClub, que viene para sustituir a la Liga Master Online. En este modo deberemos de formar nuestro propio equipo de estrellas, escogiendo nuestro entrenador dependiendo del estilo y el sistema de juego que queramos para nuestro equipo, además de gestionar las plantillas para intentar juntar en el once inicial a aquellos jugadores que sean más compatibles con la visión del fútbol que tenga el entrenador. Para fichar a los diferentes futbolistas myClub usa un curioso sistema de representantes que podremos obtener disputando los diferentes partidos. Cada uno de estos managers nos dará acceso a un jugador aleatorio y podremos juntar hasta a tres de los mismos para tener una mayor posibilidad de poder hacernos con los servicios de un jugador con mejor puntuación. Dentro de estos representantes existen también los “estrella” que adquiriremos con puntos de juego y que nos permitirán adquirir a los jugadores más importantes. Además también podremos tomar como cedidos a ciertos jugadores que encontraremos en una lista que se actualiza día a día y mejorar a nuestro entrenador, ya que, a medida que vayamos obteniendo estrellas para nuestro equipo estas necesitarán a un entrenador de más calidad para poder jugar mejor y para gestionar sus egos.

En cuanto a los partidos que podremos jugar dentro de este modo, nos encontramos con encuentros contra la CPU que irán aumentando de dificultad a medida que vayamos ganando los diferentes enfrentamientos. También podremos jugar contra otros usuarios de cualquier parte del planeta ya sea controlando a nuestro equipo por nosotros mismos o con partidos en los que simplemente haremos de entrenadores. Dentro de estos partidos multijugador existen diferentes divisiones mediante las cuales se separan el nivel de jugadores y de equipos, aunque a la hora de buscar partida los niveles de equilibrio entre estos últimos aún no están lo suficientemente bien ajustados.

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Fuera ya del modo myClub nos encontramos con las nuevas Divisiones, un modo en el que deberemos de ir obteniendo puntos para ir subiendo en la clasificación y accediendo a una división más importante. Cabe destacar que para incentivar el uso de los equipos más modestos Konami ha optado por una táctica bastante inteligente que es la de que estos equipos con jugadores de menos nivel nos otorguen más puntos si ganamos o empatamos un partido con ellos, lo que nos permitirá escalar de forma mucho más rápida entre divisiones. Además de estas, como siempre, tendremos los vestíbulos de partidos amistosos y la posibilidad de disputar diferentes campeonatos en línea a determinadas horas del día, amén de jugar partidos de once contra once jugadores e incluso cooperativos.

Antes de cerrar el análisis con las conclusiones y los mejores y peores puntos de PES 2015 queremos comentar otra característica que es muy importante y que está incluida en el juego, un añadido muy demandado por todos los jugadores a lo largo de estos últimos años que no es otro que el de las actualizaciones del juego semanales gracias a las cuales las estadísticas de los jugadores irán cambiando dependiendo de su rendimiento en sus equipos y estos tendrán completamente actualizadas sus alineaciones que, en el momento en que probamos el juego todavía no eran definitivas y no sumaban todos los fichajes, aunque Konami asegura tener preparada la primera de estas actualizaciones para el día del lanzamiento del juego.

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