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Regresa Night Trap, el "clásico" de MegaCD
Uno de los más conocidos y polémicos juegos FMV busca financiación a través de Kickstarter.
Los veteranos del lugar recordarán Night Trap, una de las caras de la fallida revolución del FMV como alternativa real al videojuego. Cuando los soportes digitales comenzaron sus primeros pasos en el videojuego, una de las preguntas de los creadores de entonces era qué hacer con la “masiva” cantidad de información de la que disponían con un CD-ROM con respecto a los tradicionales cartuchos. Una de las respuestas llegó con lo que se denominó Full Motion Videos, que básicamente consistía en grabar secuencias pregrabadas y alternar entre una y otra según las decisiones del jugador, creando la sensación de tener “películas interactivas”. Una de las caras más conocidas de esta tendencia fue Night Trap, elegido como uno de los rostros publicitarios del sistema de CD de MegaDrive.
La idea del juego era crear una historia de terror interactiva, en donde un grupo de alegres chicas en camisones debía de sobrevivir, con la ayuda del jugador, al ataque de unos peligrosos vampiros. El juego causó una gran polémica en su día, incluyendo debates en el Congreso de los Estados Unidos y dividiendo la opinión entre los que se partían de risa con las actuaciones de los actores contratados y con la supuesta “jugabilidad” del invento, a los que la cosa les resultaba poco menos que revolucionaria. Ahora, este juego conocido por todos los que vivieron la época de los 16 bits pretende regresar en una versión remasterizada, en alta definición y con mejoras realizadas por la compañía que tiene los derechos del mismo, que busca ver si hay interés a través del crowdfunding. El Kickstarter pide una cifra importante para cumplir los objetivos mínimos: 330.000$ y además sólo contempla una edición física del juego, ya que la compañía no ve factible una distribución digital para la cantidad de información que están planeando. Por 20$ -más gastos de envío- puedes conseguir tu propia copia física de Night Trap para uso y disfrute, siempre y cuando el estudio logre sus objetivos.
