Sniper Elite 3
- PlataformaXBO7PC7PS473607PS37
- GéneroAcción
- DesarrolladorRebellion
- Lanzamiento27/06/2014
- TextoEspañol
Sniper Elite 3, análisis
Rebellion vuelve a la carga con Sniper Elite III, la última entrega de la saga que pese a que mejora en algunos aspectos las entregas anteriores sigue cometiendo algunos fallos que empañan la experiencia final de juego.
Hubo una época en el que el periodo histórico de la Segunda Guerra Mundial era un recurrente en el mundo del videojuego. Tanto es así que finalmente la época del conflicto bélico más importante de la historia acabó saturando al mercado y desde entonces el número de títulos ambientados en esta época se ha visto reducido de forma considerable pero, de vez en cuando, alguna compañía se atreve a volver a 1942, en este caso al Norte de África para ponernos en la piel de un francotirador de élite del ejército Aliado. Bienvenidos de vuelta a la guerra más sanguinaria de todos los tiempos, bienvenidos a Sniper Elite III.
Rebellion, un estudio británico bastante conocido en el mundo del videojuego gracias a títulos como Rogue Warrior o Star Wars Battlefront Elite, son los encargados de realizar esta tercera entrega de la saga tras haberse encargado del spin off de zombis de la misma, llamado Sniper Elite Nazi Zombie Army (que cuenta con dos entregas) y de Sniper Elite V2, sin embargo y pese a que Sniper Elite III ha mejorado respecto a la segunda entrega numérica de la saga, sigue contando con aspectos irregulares y con algunos fallos que ya detectamos con anterioridad en los juegos de francotiradores de Rebellion.
El título comienza, como viene siendo habitual dentro de la saga, con la voz en off del protagonista situándonos en la campaña de África de la Segunda Guerra Mundial, concretamente en la ciudad de Tobruk en la cual tiene lugar la primera misión del juego. Desde ese instante nos pondremos en la piel de este “sniper” e iremos avanzando de trinchera en trinchera y de misión en misión por una campaña que no cuenta con demasiadas sorpresas y que se limita simplemente a estar ahí y a darnos una excusa para salir al campo de batalla a repartir balazos.
El cometido de las misiones en sí es sencillo y a la vez bastante recurrente, deberemos de pasar por ciertos puntos para cumplir con nuestros objetivos, ya sea eliminando al oficial de turno, buscando documentos, saboteando con explosivos vehículos o piezas de artillería… Para lograrlo deberemos de intentar pasar desapercibidos para movernos por el mapa de cada misión que pese a ser amplios y contar con algunos caminos alternativos nos sigue sin dejar la suficiente libertad como para tomar alguna táctica que se salga del guion y finalmente lo que haremos será infiltrarnos y eliminar de forma silenciosa a nuestros enemigos hasta llegar a los objetivos en cuestión, prefiriendo actuar en la mayoría de las ocasiones de esta manera a usar nuestro poderoso rifle, algo que sin duda es un fallo del juego que nos incita a ello por culpa de dos factores fundamentales, las poderosas armas cuerpo a cuerpo con las que contamos (un cuchillo letal y una pistola silenciosa que mata fácilmente a los enemigos) y la facilidad que tienen los soldados del ejército del Eje de detectar de dónde vienen nuestros disparos, por muy lejanos que estos sean.
Por lo tanto el sigilo es nuestra mejor opción y el título cuenta con mecánicas bastante bien ejecutadas en este sentido y con buenas posibilidades como la colocación de trampas o de diferentes minas que nos permiten cubrir nuestras espaldas por si algún molesto soldado decidiese cruzarse en nuestro camino. Eso sí, si andar con cuidado no funciona esta vez el combate a distancias cortas con subametralladoras como la MP40 si es una posibilidad, dado que los momentos de disparos con armas que no sean la de nuestro fusil de francotirador han mejorado de forma considerable respecto a entregas anteriores. De hecho estos momentos de juego llegan a ser bastante divertidos y aderezan misiones que, de lo contrario, podrían ser bastante planas para algunos jugadores a pesar de contar con algunos objetivos secundarios que, en ocasiones, resultan más gratificantes que abordar el cometido principal del nivel en cuestión.
Algo que no nos convence demasiado por otro lado es la IA enemiga, que resulta frustrante dado que es demasiado buena en algunos aspectos y demasiado mala en otros contando con una puntería a larga distancia digna de nuestro protagonista del juego con armas que incluso no deberían ser efectivas en la lejanía como las subametralladoras. Como ya hemos dicho además en cuanto abrimos fuego los enemigos detectan nuestra posición exacta (aunque podremos evitarlo en algunas ocasiones si aprovechamos algunos sonidos de ambiente bastante fuertes). Sin embargo, los soldados son bastante ciegos cuando nos movemos en sigilo y se cubren en ocasiones de maneras un tanto absurdas, convirtiéndose en un objetivo fácil para nuestro cuchillo o pistola. Esto parece haber querido compensarlo Rebellion poniendo un gran número de objetivos a batir en cada mapa, con un montón de patrullas y un respawn de enemigos que nunca llegan a agotarse por muchas bajas que causemos en el bando del Eje.
Pasemos ahora a hablar de lo realmente atractivo del juego, que son los momentos con nuestro rifle de francotirador, que no han cambiado demasiado respecto a entregas anteriores. Sniper Elite III apuesta por una balística realista que aumenta de forma considerable la dificultad del acierto a larga distancia en los modos de dificultad más elevados. Para realizar nuestro disparo deberemos de pulsar un botón para sacar la mira y contener nuestra respiración, focalizándonos en la que será nuestra próxima pieza de caza y creando una sensación de lentitud y de soledad que le pega a las mil maravillas al título. Antes de disparar en los modos más fáciles tenemos la posibilidad de activar otra ayuda extra (siempre y cuando las pulsaciones de nuestro héroe no sean superiores a 80) que reduce la velocidad del tiempo de juego y nos indica mediante un rombo dónde exactamente va a ir dirigida nuestra bala. Sin embargo, si nos permitís un consejo, intentad prescindir de esta ayuda extra si os es posible, porque lo realmente gratificante y divertido es que nosotros mismos calculemos la trayectoria de la bala y hagamos morder el polvo a nuestros enemigos con nuestro certero disparo.
Una vez ejecutemos el tiro y si tenemos éxito, el juego pasará a mostrarnos una animación en la que veremos cómo la bala se acerca de forma mortal a nuestra víctima y la atraviesa destrozando sus órganos intensos. La animación resulta realmente espectacular aunque no ha cambiado un ápice respecto a las entregas anteriores de la saga pero aun así no nos vamos a cansar de ver los destrozos que nuestros disparos causan a nuestros maléficos enemigos.
Antes de hablaros de los aspectos técnicos del juego queremos pararnos en la posibilidad que tenemos en esta entrega de personalizar el equipo de nuestro personaje, escogiendo el armamento que viene mejor para nuestro estilo de juego y que además permite mejorar y personalizar nuestras armas, cambiando la mirilla o el cañón de nuestro fusil, por poner un ejemplo. Sin embargo esta personalización también invita bastante a dejar nuestro precioso Garand de lado, algo que no estamos convencidos de que resulte un acierto dado que, una vez más, provoca que las grandes mecánicas a la hora de usar nuestro rifle de francotirador estén desaprovechadas.
En cuanto a nivel técnico el juego luce realmente bien a pesar de tratarse de un título a caballo entre las dos generaciones (recordemos que sale tanto para PS3 y Xbox 360 como para PS4 y Xbox One además de en PC). El acabado general a nivel visual es bastante bueno y destacan, sobre todo, el colorido de los escenarios y su iluminación. Además en Sniper Elite III las animaciones han mejorado bastante y ahora veremos cómo nuestro personaje y los enemigos se mueven de forma bastante fluida aunque siguen habiendo algunos movimientos un poco ortopédicos pero en esta ocasión están bastante aislados. Como cualquier juego de sigilo que se precie además el sonido es un factor bastante importante y que cumple con creces. Además Rebellion y 505 Games no han descuidado el doblaje al castellano que cuenta con una calidad bastante alta y con un reparto de voces que no podría estar mejor escogido.
Por último no queremos dejar pasar desapercibido el modo multijugador del juego que esta vez sí que nos permite enfrentarnos contra nuestros amigos o completos desconocidos en modos de juego típicos como Duelo a muerte y Duelo a muerte por equipos combinados con otros que casan bastante bien en Sniper Elite III y que son bastante divertidos como El Rey de la Distancia (que consiste en matar al enemigo desde la mayor distancia posible) o No Cruces en el que los dos equipos están completamente separados sin posibilidad del combate cercano, invitándonos a usar durante toda la partida nuestro rifle de francotirador. Además, también tenemos un modo cooperativo gracias al cual podremos completar toda la campaña con un amigo, aunque eso sí, de forma online, dado que no cuenta con un modo de pantalla partida. Este cooperativo abre al juego a nuevas posibilidades si nos sincronizamos bien con nuestro compañero permitiendo por ejemplo que el se quede en la distancia eliminando nazis mientras nosotros causamos estragos entre las tropas enemigas desde una posición más cercana.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.