Contra: Evolution

Tal y como ha sucedido con los ports de Sonic para dispositivos táctiles ‒como el fantástico Sonic CD o la versión 2.0 de Sonic The Hedgehog‒ a cargo de Chris Whitehead para Sega, el clásico Contra regresa al siglo XXI de la mano de PunchBox Studios, un estudio que se ha ganado el favor de Konami para llevar un remake del frenético Contra de NES de 1988 hasta la AppStore, con una renovada presentación audiovisual y toda la acción de uno de los run-and-gun más recordados de finales de los ochenta. Bill “Mad Dog” Rizer y Lance “Scorpion” Bean vuelven a la primera línea de fuego para combatir todo un ejército de aliens en la jungla de sudamérica. Jugabilidad old-school, explosiones, power-ups y los bichos más repugnantes se dan cita en Contra: Evolution; todos los detalles en nuestro análisis.

Tras una fugaz paso por la AppStore americana a finales de junio ‒lanzado por error tras su lanzamiento primero en el mercado chino‒, llega al fin el remake de Contra para nuestros dispositivos iOS; y lo hace con unos gráficos rediseñados para la ocasión, además de una banda sonora y unos efectos de sonido que recuerdan poderosamente a Contra 4, incluyendo nuevos niveles, un pequeño tutorial y una larga lista de micro-pagos disponibles a través de su tienda virtual, algo que no gustará mucho ni a los fans de la franquicia de Konami ni a los amantes de los shooters en general. Lejos de contribuir a una jugabilidad amena y divertida, se vale de unos controles no muy brillantes para sangrar al jugador con un sinfín de opciones, power-ups, armas, vidas extra...

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Y todo para que gastemos más de lo que nos gustaría, teniendo en cuenta que Contra: Evolution llega a un precio de 0,89 euros en su versión para iPhone e iPod touch y a 2,69 euros en su versión HD para iPad. En este caso su modelo de negocio no es muy intrusivo ‒en ningún momento es obligatorio‒, aunque tentador para que podamos disfrutar con garantías del alto grado de acción de un título como Contra: Evolution. Así, podemos adquirir nuevas armas e items gracia a monedas de oro o diamantes, preciados objetos que podremos obtener jugando a los dos modos de juego disponibles: arcade y misiones. Dichos diamantes nos servirán a modo de continues, aunque tras cada uso, se volverá una opción bastante cara, por no decir abusiva, permitiendo seguir con nuestra partida, eliminando a todos los enemigos en pantalla y disfrutando de un escudo momentáneo.

Otras ventajas que llegarán vía micro-pagos nos permitirán usar alguna de nuestras Super-armas, equipar un arma de forma aleatoria, recuperar toda la barra de salud o recurrir al famoso Konami Code vía IAP con 30 vidas extras. Respetando el espíritu del Contra original, deberemos enfrentarnos a todo un ejército de alienígenas a lo largo de diferentes escenarios, acción en scroll lateral de la vieja escuela; desde un principio podemos controlar a Bill “Mad Dog” Rizer y a Lance “Scorpion” Bean, dos típicos héroes de los ochenta que no presentan ninguna diferencia una vez a los mandos ‒ambos son maestros de los rifles‒ más allá de su aspecto rudo y basto.

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Se incluye además dos nuevas heroínas que bien podrían pasar por las versiones femeninas de los dos protagonistas clásicos: Ricci “Flame Rose” Erica y sus pistolas dobles y Sally “Moonshadow” Inohara, maestra de la katana. La primera la podremos elegir tras superar el modo arcade y la segunda tras desbloquearla por 50 monedas de oro o recurrir a los micro-pagos para ello. Y llegamos a uno de los puntos más controvertidos de esta versión táctil de Contra: el control. El título ofrece tres posibles configuraciones, siendo la que viene por defecto la más recomendable, además de poder optar por los botones virtuales flotantes ‒que aparecerán allí donde toquemos‒ y un interfaz similar al pad de control de la NES, con una cruceta digital en lugar del joystick.

En cualquier caso, nunca nos sentiremos del todo cómodos, demostrando poca precisión y comodidad en un juego con grandes dosis de acción; dicho problema se acentúa en las versiones de iPhone e iPod touch, donde el reducido tamaño de la pantalla ‒y de los propios iconos virtuales‒ perjudica la jugabilidad de manera notoria. En iPad se maneja mucho mejor, aunque en muchas ocasiones nos invadirá una molesta sensación de frustración tras morir una y otra vez y arruinar así nuestro avance por unos controles poco inspirados. Quizás por ello se ha incluido la opción de disparo automático, con lo que si optamos por esta solución, sólo tendremos que preocuparnos del joystick virtual y del botón de salto.

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Y eso teniendo en cuenta que se ha ajustado la dificultad para hacer de este Contra táctil algo más accesible, una combinación que no contentará ni a los fans de la saga ni a los nuevos jugadores iOS. Centrándonos en su presentación audiovisual, Contra: Evolution sufre también de ciertos altibajos; sí, comparado con el juego original es una gozada ‒no olvidemos que se trata de un remake para las actuales pantallas HD de Apple‒, aunque no brilla tanto como sería deseable. Algunos detalles de los escenarios son suficientemente vistosos, aunque por lo general pecan de excesivamente vacíos y monótonos; los personajes, además, tampoco resultan muy espectaculares debido a un tamaño de los mismos demasiado pequeño. En conjunto, rasca el aprobado, aunque presenta ciertos altibajos que lastran el espectáculo visual.

A nivel sonoro mantiene la esencia de los clásicos e incorpora varios efectos de otras entregas más recientes, como Contra 4. Los textos llegan en inglés o japonés, demostrando el poco interés de Konami en localizar sus títulos iOS a los diferentes idiomas de los principales países europeos. Varias han sido las entregas de la serie Contra que hemos podido disfrutar en varios bazares digitales de consolas de sobremesa, aunque Contra: Evolution se desmarca del resto con una entrega exclusiva para iOS, algo de lo que los fans de la franquicia pueden estar orgullosos. Eso sí, en este caso perdemos el divertido modo cooperativo, además de presentar una diferencia de precio abismal entre las dos versiones, siendo prácticamente calcadas en iPad e iPhone, a lo que debemos sumar la extensa lista de micro-pagos que pueden llegar a condicionar nuestras partidas.

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