Layton Brothers Mystery Room

Para sorpresa de los fans de las aventuras del Profesor Layton en Nintendo DS y Nintendo 3DS, Level-5 anunciaba tiempo atrás que nuestros dispositivos iOS iban a recibir en el futuro una nueva entrega en exclusiva de tan popular saga de aventuras gráficas y rompecabezas; pues bien, ya está aquí Layton Brothers Mystery Room, un spin-off centrado en la investigación criminal más rebuscada y la resolución de crímenes tan sorprendentes como disparatados que, tras pasar por la AppStore japonesa, al fin da el salto al territorio occidental. Así, nuestros iPhone, iPad e iPod touch reciben un título perteneciente a la saga Profesor Layton sin renunciar a su propia personalidad y sin seguir la línea temporal de la franquicia, demostrando un claro giro hacia la novela negra y la investigación que poco tiene que ver con el estilo clásico del Profesor Layton, con su jugabilidad más centrada en los puzles fantásticos. Conozcamos más en detalle en nuestro análisis este nuevo rumbo centrado en la investigación y la indagación, ahora en formato free-to-play.

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Para los jugadores que vengan de los títulos clásicos de la saga, debemos dejar claro que estamos ante un desarrollo de la aventura totalmente diferente; desde un primer momento se nos introducirá en su oscuro mundo a base de diálogos de lo más jocosos y una presentación de personajes en forma de figuras al más puro estilo anime mínimamente animadas. Y todo ello en perfecto inglés, dado que el juego no llega localizado a nuestro idioma, algo a tener en cuenta dado el elevado número de textos que deberemos leer a lo largo de los diferentes casos, un escollo para aquellos que no tengan un buen nivel de dicho idioma. Tras un sencillo aunque largo tutorial, rápidamente nos haremos con los controles y el interfaz táctil del juego, todo para empezar a resolver los diferentes casos que el propio Alfendi Layton nos irá proporcionando.

Como título free-to-play, tendremos a nuestra disposición y de manera totalmente gratuita el prólogo y los dos primeros casos: The Hand Sandwich y The Bungle Burglary. Para disfrutar del resto de capítulos tendremos que pagar por ellos; así, el pack que contiene los casos del 3 al 6 nos costará 2,69 euros y el pack con los casos 7, 8 y 9 valdrán 1,79 euros, una manera de probar el juego sin coste alguno y decidir si hacernos o no con la aventura completa por poco más de 4 euros. Tan peculiar es el carácter que Level-5 ha aplicado a este spin-off que nos encontraremos con casos totalmente desconcertantes; el primer caso, por ejemplo ‒y sin destripar nada relacionado con el argumento‒, nos llevará a investigar la muerte de una joven chica asesinada en un hotel de lujo, en el balcón de su propia habitación y en una postura un tanto peculiar.

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Y es que el cuerpo fue encontrado con la mano metida en un sandwich, lo que nos indicará una serie de pistas que deberemos seguir para dar con el asesino entre tres sospechosos a los que podremos interrogar. Y debemos ser rápidos, ya que tendremos un límite de tiempo para realizar todas las tareas de investigación; así, lo primero que deberemos hacer será realizar un examen de los perfiles de los sospechosos e interrogar a las últimas personas que vieron con vida a la víctima de cada caso. Se nos facilitará una descripción de cada uno de ellos, para que podamos leer sus perfiles y recoger información clave para el caso. Una vez completado dicho paso, pasaremos a examinar la escena del crimen gracias a un curioso artilugio del propio Alfendi, lo que nos permitirá visitar dicha escena en un entorno virtual creado en 3D.

Así, dejamos de lado las pantallas con ilustraciones de personajes y globos de texto para pasar a entornos tridimensionales, todo sea dicho, algo más sencillos de lo que nos gustaría, con modelados demasiado simples y entornos algo vacíos. En cualquier caso, ante nuestros ojos aparecerán varias pistas que podremos investigar realizando zooms o tocando sobre ellas para ver la descripción del objeto en cuestión o descubrir nuevas pistas que se pasaron por alto con anterioridad. No podemos olvidarnos del límite de tiempo de cinco minutos para repasar todas las pistas, con lo que tendremos que ser tan rápidos como astutos. Eso sí, el resultado es algo decepcionante, puesto que se nos facilitarán todas las pistas sin que nosotros tengamos que investigar en profundidad, resultando un mero trámite hasta el siguiente paso de nuestra investigación.

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Tras esta última sección a la que se podría haber sacado mucho más, pasaremos a los interrogatorios de los sospechosos, de nuevo, bajo un interfaz en 2D e infinidad de globos de texto. Será aquí cuando entre en juego nuestra pericia con toda la información recopilada ‒además de que podemos seguir recogiendo ciertos elementos que nos ayudarán en nuestra deducción‒, aunque de nuevo, todo estará bastante predefinido por parte de Alfendi, dejando escaso margen al error y resolviendo los casos de forma bastante guiada. Y es que el uso de las “flechas de deducción” que, en un principio podrían resultar muy atractivas, quedan en un seguido de animaciones que poco aportan al caso y que nos llevarán a su resolución, ya sea por el camino corto o el largo.

Layton Brothers Mystery Room ofrece un total de nueve capítulos de duración variabe según nuestras habilidades, aunque podremos completar el juego en unas seis horas o menos, resultando algo corto y dejando cierto sabor agridulce. La experiencia de juego es entretenida, sin duda, pero podría haber dado mucho más de sí dejando al jugador tomar sus propias decisiones y posibilitando algo más de libertad a sus diferentes deducciones de cada caso. El tema del idioma juega un papel fundamental en el desarrollo y disfrute de la aventura, puesto que el número de diálogos es abrumador y, a pesar de que estar todo demasiado dirigido, nos perderemos muchos detalles si no tenemos un buen dominio del inglés. Su presentación audiovisual muestra ciertos altibajos; mientras que los gráficos en 2D resultan aceptables ‒aunque muy alejados de la genialidad de otros títulos de Level-5‒, los entornos tridimensionales presentan mucho margen de mejora. Las melodías, por otro lado, son demasiado repetitivas aunque gozan de una personalidad que resulta ideal para un título de estas características.

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