Xbox Infinity: Destino 21 de Mayo

A estas alturas ya deberíamos saber detalles, o al menos algunos de ellos, sobre lo que la nueva Xbox va a ser y lo que va a ofrecer. No es una suposición, había un evento planificado y organizado para Abril en el que se iba a hablar sobre lo que será la nueva generación de la plataforma, pero fue retrasado. El temprano evento de Sony y el inesperado grado de detalle con el que habló de especificaciones técnicas, características, funciones y juegos obligaba a la compañía de Redmond a planificar algo con más empaque de lo que seguramente había previsto. Seguramente el plan original era compartir elementos preliminares a un muy alto nivel sin entrar demasiado en detalle sobre aspectos como catálogo, algo más apropiado para un E3, pero ahora Microsoft tiene la obligación de entrar en el ring con más fuerza y más fuegos de artificio. La nueva cita es el 21 de Mayo y además de haber dado al equipo de Xbox más tiempo para cocinar la presentación, tiene el doble efecto de ser una fecha más cercana el E3. En la propia nota de prensa se habla de esta circunstancia: “en ese día, compartiremos nuestra visión para Xbox. Luego, 19 días más tarde en la Electronic Entertainment Expo (E3) en Los Angeles, continuaremos con la conversación y mostraremos el catálogo completo de nuestros grandes éxitos”.

Xbox 360 es la historia de un gran éxito para la compañía estadounidense. Xbox supuso poner el pie en la puerta y establecer la marca en la mente de los aficionados, especialmente de la mano de su gran bandera: Halo. Pero Microsoft llegó tarde frente a una ya dominante PS2, los más de 150 millones que ha acumulado la consola de Sony frente a los 24 de la Xbox original son una muestra de la diferencia entre ambas. Que en el margen de una generación esa diferencia se haya convertido en un empate técnico entre PS3 y Xbox 360, ambas en una franja de 80 millones de consolas en todo el mundo dice mucho, del buen hacer de la compañía estadounidense. Xbox 360 lidera dos de los principales mercados mundiales de videojuegos (USA y el Reino Unido) y se ha convertido en un actor imprescindible en el sector, hasta el punto de que compañías tradicionalmente aliadas a Sony han pasado a adoptar una mentalidad multiplataforma ante la imposibilidad de ignorar la notoria base de usuarios de la consola estadounidense.

Han pasado más de siete largos años desde que Xbox 360 apareciera a finales del 2005, estrenando la pasada generación y ahora llega el momento del siguiente paso, uno que llega cargado de interrogantes, rumores y especulaciones. Particularmente, una serie de noticias específicas sobre ciertos posibles aspectos de la nueva consola han generado un inmenso ruido en las redes. El objetivo de este reportaje es diseccionar esos aspectos y analizarlos por separado para tratar de exponer las posibilidades que hay respecto a ellos, aunque evitando predicciones categóricas. La cantidad y variedad de rumores no invita a aventurar demasiado lo que Microsoft realmente va a presentar en menos de un mes, así que se abordará este reportaje desde un espíritu expositivo, sin bolas de cristal de por medio.

El Nombre

El único nombre real que existe para llamar a la nueva Xbox es Durango, que es el nombre clave del proyecto confirmado. Pero salvo sorpresa mayúscula no se llamará así. Tampoco es muy probable que reciba el nombre de Xbox 720, ya que no tendría ningún sentido -el 360 lo recibió por el concepto de “Círculo de la Vida” iconizado por el botón de encendido, 720 es algo que no tiene interpretación posible. Descartando esas dos opciones, hay otras que suenan en Internet: Xbox 8, Xbox Loop y Xbox Infinity. Todas ellas juegan con en concepto del doble círculo como elemento representativo, pero sin pasar por el 720 y buscando una correlación con el símbolo matemático del infinito. Xbox Infinity en particular tiene una resonancia interesante porque además casa bien con la idea de una Xbox que ofrece entretenimiento sin límites: videojuegos para todas las edades, aplicaciones sociales, televisión, cine en casa... Hay otra opción que se ha comentado: Xbox, a secas, siguiendo el libro de estilo de Apple. Estos son los nombres más repetidos, y si hubiera que apostar por uno el que escribe estas líneas lo haría por Infinity, pero puede ser cualquier cosa.

Especificaciones Técnicas

Si hay un aspecto que despierta pocas dudas es la configuración del CPU, que será prácticamente idéntica a la de PS4. AMD ha sido la elegida tanto por Sony como por Microsoft para crear la columna principal del sistema en forma de APU, una solución integrada de CPU y GPU basada en la arquitectura Jaguar y personalizada para cada fabricante según sus objetivos y especificaciones. Dentro de esa arquitectura, las dos máquinas contarían con 8 núcleos a una velocidad por determinar -entre 1,6 GHz y 2 GHz serían la opciones más viables conociendo la arquitectura que propone AMD-. El GPU  estaría por determinar pero será una versión personalizada de la línea 77xx de Radeon. La nueva Xbox contaría con 8 GB de RAM DDR3 frente a los 8 GB de GDDR5 de PS4, lo que daría un plus a la plataforma de Sony por la mayor velocidad de los últimos. Los rumores de la memoria hay que cogerlos con pinzas pues ya se daba por hecho que Sony apostaría por los 4GB hasta que dieron la sorpresa en su conferencia. Xbox 360 también duplicó en su día la cantidad de memoria a última hora. Este es uno de los aspectos en los que es posible introducir novedades en el último momento sin necesidad de alterar ningún aspecto clave de la plataforma -simplemente es más caro para el fabricante-. Usará Blu-Ray y tendrá un disco duro de considerable temaño.

La comparación con lo que sabemos con certeza de PS4 no procede en base a que lo que tenemos de Durango son rumores y filtraciones que pueden o  no ser ciertas y que además pueden cambiar en el último momento. Dentro de eso, hay que quedarse con lo seguro, que es el tronco principal, confirmado por numerosas fuentes y del que no hay dudas posibles. En términos generales, que ambas consolas vayan a compartir una arquitectura x86 y que puedan usar DirectX va a significar que la diferencia entre ambas en cuanto a desarrollo no sean significativas. Realizar conversiones de una a otra o desde el PC a ambas será más fácil que nunca en la historia del videojuego. Dentro de esa base común, cada una de las plataformas tiene elementos propios, filosofías y necesidades distintas, pequeños componentes que marcarán la diferencia. No es tan fácil como coger los datos a grosso modo y compararlos, ya que ambas plataformas llevarán implementaciones de hardware específicas para sustentar diferentes aspectos que quieran reforzar. Son estos pequeños detalles los que al final se hacen grandes y permiten el crecimiento que experimentan los equipos desde sus primeros juegos en una plataforma hasta los últimos. Pero eso sí, nunca dos consolas rivales habían compartido tantas cosas.

Después de 24 millones de copias de periféricos vendidos, no se puede negar que el particular sistema de control creado por Microsoft es un éxito. Pero la compañía no ve a Kinect como un complemento para juegos de baile, sino como el elemento de control definitivo para interaccionar con la plataforma, más allá de los juegos. Si se presta atención a todos los vídeos promocionales y anuncios de Kinect, el mensaje se repite: una sonriente pareja de mediana edad sentada cómodamente en su amplio salón mirando su imponente televisión y moviendo grácilmente las manos, o dictando órdenes con la voz para ver su película favorita. Ese es uno de los grandes sueños y objetivos de la compañía de Redmond, que su máquina sea vista como un elemento imprescindible de la sala de estar junto a la televisión, que sea la puerta de acceso al contenido que una familia pueda desear.

Es la gran batalla que se lleva librando desde que las máquinas de videojuegos pasaron a ser máquinas multimedia y es también el principal motivo por el que Microsoft se lanzó a este mercado en su día. Viendo la evolución de Xbox 360 y en particular del servicio Live en Estados Unidos, se puede comprobar el gran esfuerzo realizado en convertir la máquina en un proveedor de servicios a través de aplicaciones descargables. Cada E3 vemos un nuevo ejemplo de cómo la experiencia de ver películas o deportes a través de 360 es “mejor” gracias a Live. El año pasado sin ir más lejos Microsoft usaba el espacio de la conferencia previa para promocionar SmartGlass y cómo era útil para ver mapas de los Nueve Reinos mientras veías la serie de Juego de Tronos.

Kinect es una parte integral de esa “experiencia Xbox” y por ello todos los rumores sin excepción que se llevan escuchando desde hace meses apuntan a Kinect 2.0 como una parte fundamental de la nueva Xbox. Supuestamente, la nueva tecnología es un salto exponencial con respecto a lo visto en la primera integración. Por lo pronto, será capaz de diferenciar hasta a cuatro personas delante de la pantalla. La precisión que alcanzará el nuevo sistema también será algo completamente nuevo, pudiendo incluso distinguir movimientos en los dedos. Y los problemas de lag estarían supuestamente resueltos, haciendo que nuestros movimientos se trasladen instantáneamente a pantalla, haciendo cierto ese lema de “tú eres el mando” al que el Kinect original no ha conseguido llegar. Otros aspectos de Kinect como el reconocimiento de voz también habría mejorado en gran medida.

La consola llegará con un mando tradicional, muy parecido al de 360 pero con un D-Pad mejorado, algo que necesitaba desesperadamente. Tendrá algunos cambios pero serán menores dado el alto grado de satisfacción que ha conseguido el diseño original -la información que apuntaba a esto también indica que el anterior mando no será compatible-. Ahora bien, la gran pregunta es saber cómo vendrá Kinect. Hay dos opciones: o bien sigue siendo un periférico que se compra aparte, o bien llega integrado en el propio hardware de la plataforma. Lo más lógico viendo la enorme importancia que ha dado Microsoft a Kinect en los últimos años es que venga integrado con la propia consola. A fin de cuentas, la única forma en la que Kinect puede convertirse en una parte integral de la plataforma es que venga por defecto con ella, acabando así con el doble mercado de juegos con o sin Kinect.

Estando integrado, Microsoft encontrará también menos resistencias por parte de los desarrolladores a utilizarlo de forma más amplia, ya que cualquier usuario de la plataforma podrá beneficiarse y no sólo la parte que tenga Kinect -aspectos como los comandos por voz que se han visto en juegos como Mass Effect o Skyrim por ejemplo podrían tener más seguimiento-. El hacerlo así también permitiría aumentar el catálogo de juegos que usan exclusivamente Kinect como método de control. La desventaja es obviamente el sobrecoste que supone incorporar todo lo que requiere el sistema en la máquina, pero es bastante probable que Microsoft esté dispuesta a pagar el precio. Asumiendo que venga integrada, hay quien se pregunta, medio en broma, medio en serio, las posibles consecuencias de tener una máquina en el salón que esté constantemente “viendo” y “escuchando” lo que pasa por delante, lo que tiene un cierto aroma orwelliano.

Pasamos al “tema estrella” de las últimas semanas, el saber si la consola requerirá conexión permanente con Internet para funcionar. La enorme tormenta comenzó por unos rumores aparecidos en la británica revista Edge que indicaban la “necesidad de conexión permanente para la nueva Xbox”, una información que levantó una polémica que todavía sigue rugiendo con fuerza, algo que seguirá así hasta que Microsoft confirme exactamente qué va a hacer con este tema. Un ex-ejecutivo de la compañía, Adam Orth, ya pagó caro con su marcha de la compañía las consecuencias de tomarse a broma las reacciones del público ante este tema, levantando una tremenda reacción que llegó incluso a reflejarse en medios generalistas.

Este es un tema delicado y se barajan varias opciones. Posteriormente a la debacle de Orth, aparecieron nuevas y convenientes filtraciones que matizaban este apartado. Cosas como las que se postulaban de que la consola echaría al usuario del juego si pasaban tres minutos sin estar conectado se muestran altamente improbables. Este tipo de sistemas draconianos ya se han probado en cosas como el DRM para PC de varios Assassin’s Creed y la propia Ubisoft tuvo que retirarlo ante la constancia de que estaba haciendo más mal que bien entre los usuarios que habían pagado por “disfrutarlo”. Es prácticamente imposible que la consola incluya un sistema parecido por defecto. Ahora bien, hay que tener en cuenta en el que en un mundo en el que EA puede decir que Sim City es “un MMO” y por eso requiere conexión permanente, es muy probable que veamos más estudios repitiendo la jugada en consolas, con o sin justificación. Destiny de Bungie por ejemplo tiene un fuerte componente social y multijugador que hace que sea un juego “siempre online”. Es muy posible que tanto Microsoft como Sony permitan a las compañías estas prácticas, pero no como algo generalizado o impuesto por hardware.

Ahora bien, ninguno de los rumores aparecidos después del escándalo desmienten que la nueva Xbox no vaya a incluir un requerimiento de conexión a Internet, y aquí está el quid de la cuestión. Mientras desde Sony sí se ha confirmado que no necesitarás Internet para que PS4 funcione, lo que se maneja en cuanto a la nueva Xbox apunta a que algo habrá. No será algo tan draconiano como lo que se teme pero sí será obligatorio. Teniendo en cuenta de que sigue siendo un rumor, aunque por parte de una fuente fiable y cercana a Microsoft como el especialista en tecnología Paul Thurrot, habría varias especulaciones sobre las intenciones de la compañía a este respecto. En estos casos, lo mejor es echar mano de lo que ya existe en el mercado para buscar ejemplos. Una de las posibles ideas las encontramos en Steam, el servicio que en los últimos tiempos ha concentrado al jugador en compatibles. En PC, si se compra físicamente un juego con soporte para Steam, obtienes una clave que hay que introducir obligatoriamente para que el servicio reconozca el título dentro de tu librería y poder así jugar -algo que hay que hacer online-. Una vez hecho eso y esté verificado puedes pasar a modo offline y jugar sin necesidad de conexión -esta es la teoría, el modo offline de Steam tiene fama de inconsistencia, a unos les funciona perfectamente y para otros es un desastre.

Puede que ni siquiera se necesite una clave para el juego. Microsoft sólo tiene que forzar instalación obligatoria de un juego en el disco duro y chequear un código interno para ver que todo está en orden. Sistemas de música como Spotify o el propio servicio Playstation Plus de PS3 funcionan así: contrastan lo que tienes en memoria con la información de tu cuenta para evaluar si puedes seguir jugando. La diferencia es que la nueva Xbox incorporaría este sistema por defecto, para cualquier contenido comprado físicamente o para los productos descargados a través de su Store. De nuevo, hay que insistir que nos seguimos manejando en el terreno de los rumores y las especulaciones, pero lo de lanzar un rumor increíblemente negativo para luego presentar una realidad “no tan mala” es tan viejo como el tiempo, y cuando todos los rumores apuntan a que “algo hay”, lo más probable es que lo haya. Esta futura generación se va a distinguir por el control que van a tener las productoras sobre este tipo de decisiones. Al igual que han impuesto los DLCs y los Season Pass para aumentar la rentabilidad de sus juegos, es muy probable que los grandes estudios tengan libertad ahora para forzar ciertos tipos de protecciones y salvaguardas de un modo similar al que tienen en el mundo del PC.

¿Fin de la Segunda Mano?

Originalmente, el rumor de “la nueva Xbox no admitirá juegos de segunda mano” parecía una cosa sin demasiado fundamento, ¿cómo se iba a atrever Microsoft a semejante cosa?. Pero dadas las últimas informaciones y la insistencia en que la consola requerirá cierta capacidad de conectarse a Internet, es un escenario que podría producirse. Si la nueva Xbox es online y la compañía facilita un proceso para validar online juegos asociados a una cuenta, la segunda mano muere automáticamente. Dicho esto, las informaciones son contradictorias. Por un lado está la información original a la que apuntaba Edge mencionada anteriormente, que hacía mención específica a que la plataforma no admitiría juegos usados. Una filtración de VGLeaks, el 19 de Marzo apuntaba a que los juegos necesitarían ser instalados en el disco duro de la plataforma y no funcionarían directamente desde el disco lo que parecía apoyar la tesis del DRM obligatorio. Sin embargo, el 10 de Abril publicaba unas informaciones registradas como “Hoja de Ruta 2013” en la que se especificaba que la consola estará “siempre conectada como cualquier otro dispositivo, pero eso no será un requerimiento para jugar a contenido local ni impedirá funcionar a juegos usados”. Esta filtración relajó en gran medida el creciente descontento sobre los rumores que se iban acumulando, pero no ha impedido que salgan nuevas historias afirmando que la consola sí bloqueará la segunda mano.

¿Qué será? se espera que el 21 de Mayo arroje luz sobre este tema. Eso sí, hay que valorar lo siguiente. Cuando los CD-Keys empezaron a aparecer en el PC -antes que Steam por cierto, Valve no inventó el concepto- estos no acabaron con la piratería pero sí acabaron con el alquiler y la segunda mano en PC para siempre. Hasta la generación de PS2, se había respetado la premisa de que las consolas funcionaban bajo el concepto de “introducir el juego y empezar a jugar” pero la clara irrupción del online en esta generación ha cambiado las cosas. Claro que ha traído grandes ventajas y permitido cosas únicas en el videojuego, pero también ha dado más opciones a las grandes productoras de imponer sus leyes sobre ciertos aspectos, algo que seguramente irá en aumento con la generación que viene. La segunda mano y la piratería son señalados insistentemente como la fuente de los males del sector y cabe la posibilidad de Microsoft decida lavarse las manos, no forzar nada pero dejar las herramientas necesarias para dejar que las productoras decidan, al igual que deciden en PC si lanzar juegos con DRM o no (y “no” es algo extremadamente raro de ver, por lo menos para las grandes empresas).

No es seguramente lo que muchos lectores de estas páginas estén deseando de conocer, pero por las diferentes filtraciones aparecidas, parece claro que algo que va a distinguir a la venidera Xbox es su capacidad para convertirse en aparato receptor de contenido de televisión por cable. El sistema incluiría un sistema de entrada y salida por HDMI que permitiría suministrar los canales, pero además usando la interfaz y las capacidades de la máquina. Podríamos controlar efectivamente la televisión por Kinect o usar el disco duro de la consola para grabar el contenido que queramos para verlo en cualquier momento, a modo de DVR. La conexión a Live permitiría integrar todo tipo de servicios multimedia e interactivos a nuestro visionado normal de la televisión. No sólo eso, Microsoft estaría también pensando en ofrecer contenido audiovisual exclusivo, haciendo de “cadena de televisión” con series propias sólo accesibles a través de su plataforma-. De hecho, a finales del 2012 la compañía de Redmond contrató a la ex-ejecutiva de la cadena de televisión CBS Nancy Tellem para dirigir una iniciativa de producción de contenido televisivo propio para Xbox. Lo que encaja bastante bien con los rumores de que la compañía de Redmond está en negociaciones con la NBC para resucitar la serie “Héroes” como parte de esta iniciativa.

Volviendo a los videojuegos, al menos en parte, uno de los rumores más recientes sobre la consola apuntaba a que incorporará un sistema de grabación para juegos. La consola grabaría automáticamente y nos permitiría “rebobinar” hasta cierto límite para elegir lo que queremos guardar. También sería posible programar el sistema para que se ponga en marcha en determinadas circunstancias durante una partida -un disparo en la cabeza, un combo o cualquier elemento que pueda ser diferenciado como algo reseñable en una partida. Podremos almacenar ese contenido y compartirlo en diferentes medios por Internet, así como publicar streaming de nuestras partidas, oficializando y simplificando un fenómeno que ya está muy presente en la vida del jugador.

Live y Arcade

Live va a cambiar, ya ha cambiado una enormidad desde que era el servicio para jugar online de Xbox, ahora es el portal al gran público de Microsoft y es probablemente el mayor orgullo de la división de entretenimiento de la compañía, más incluso que la propia consola. No es sólo la cuestión monetaria de tener millones de suscriptores de pago en todo el mundo, que tampoco está mal, es la certeza de que ese servicio puede abrir las puertas de esos salones de estar que Microsoft tanto ansía. Hace poco, los representantes de la compañía anunciaban orgullosos que en Xbox 360 se consumía más televisión y películas de lo que se jugaba a través de Live en USA. Esa diversificación es la que persigue Microsoft y lo hará con más ahínco con la nueva plataforma. Se pueden esperar nuevos modelos de suscripción, nuevos precios, más aplicaciones y con seguridad un nuevo interfaz similar al de Metro de Windows 8 -que será el sistema operativo incorporado en la consola, una versión del mismo. Así mismo, habrá novedades en los sistemas de Logros, que será más dinámico y permitirá a los desarrolladores ir introduciendo nuevos de forma ágil y continuada.

El tema de Arcade es interesante. Microsoft ha acumulado algunos ataques bastante públicos sobre su forma de negociar con los estudios independientes, las limitaciones, frustraciones y problemas que supone conseguir publicar y mantener un juego en el sistema Arcade. Mientras Sony atesora parabienes por parte de este sector y hace público y notorio su interés por sus trabajos -tener al creador de Braid, Jonathan Blow, en la presentación de PS4 fue toda una declaración de intenciones-. A eso ha contribuido situaciones como cuando el creador de Fez, el polémico Phil Fish, se negó a lanzar un parche para su juego por el dinero que le costaba hacerlo. El propio Blow, cuyo gran éxito nació precisamente en Live, tampoco ha sido muy amable con cómo funciona Arcade, tildando el servicio de “Grano en el Culo” y una historia en Wired documentaba la creciente preferencia de los desarrolladores independientes por Sony y Nintendo, dibujando a una Microsoft cerrada, sorda y ciega a las necesidades de los independientes. Como respuesta, algunos estudios independientes como Behemont Studios -autores del excelente Battleblock Theatre, entre otros- han salido a la palestra para defender el servicio. Teniendo en cuenta el gigantesco éxito que está teniendo Minecraft en Xbox 360 y el buen resultado histórico del servicio Arcade, a buen seguro que Microsoft no descuidará este aspecto. Se esperan novedades al respecto una vez que la plataforma sea presentada.

Precio y Lanzamiento

Nuevamene acudimos al comentarista tecnológico Paul Thurrot y a sus recientes declaraciones sobre la nueva Xbox, ya que es además muy concreto a la hora de ofrecer esta información. Sobre la fecha de lanzamiento no hay demasiada sorpresa: Noviembre (por lo menos de cara a USA). Es poco probable que Microsoft o Sony dejen pasar este año sin lanzar sus nuevos sistemas, así que es algo bastante creíble. Pero más interesante es el precio que ha lanzado al aire: 499 dólares, lo que sería una plataforma bastante cara -100 dólares más que Xbox 360 en su lanzamiento, con una segunda opción: 299$ con un compromiso de dos años de suscripción a Live. En realidad es lo mismo que ya existe en para Xbox 360 (99$ y dos años de contrato) así que no que se esté reinventando la rueda, pero es la primera vez que se usaría un modelo parecido para un lanzamiento de consola, abriendo una interesante cuestión de cara al usuario. ¿Es la consola más atractiva al tener que pagar menos de golpe? puede que sí, especialmente si ya se tenía previsto usar Live, pero habrá que comprobar primero si los rumores responden a la realidad.

Catálogo de Presentación

Más allá de la consola y los servicios, lo realmente interesante estará en los juegos con los que Microsoft decida iniciar su nuevo asalto, particularmente sus juegos propios. También hay algunos rumores al respecto, y es también posible sacar algunas conjeturas basándonos en los propios estudios internos y licencias de las compañías.

Algunos quizás recuerden este proyecto de Crytek originalmente pensado para Xbox. Apareció en dos E3 pero en fase más bien conceptual para luego desaparecer. Se trataba de un juego de acción y aventuras basado en la Roma imperial, con una partcularidad: está diseñado para Kinect. Si los rumores son ciertos, su importancia y escala se había elevado considerablemente en los últimos años para convertirse en un juego bandera de la nueva Xbox a la altura de un Gears of War. Sería el principal argumento para convencer al jugador más dedicado de las bondades del mejorado sistema de control.

Forza

Microsoft ha apretado el acelerador con Forza y posiblemente esté en el camino de convertirla en saga anual, usando la estrategia del doble equipo con dos años entre juego y juego. El juego de coches se ha convertido en uno de los grandes éxitos de Microsoft en esta generación y por tanto sería importante tenerlo en la nueva plataforma lo antes posible. Lo más probable es que Turn 10 haya estado trabajando en esta iteración para la nueva generación desde que terminara Forza 4, por lo que podría ser una de las cartas ganadoras de la futura consola.

Alan Wake 2

Rumoreado durante bastante tiempo, se considera que Remedy podría haber estado trabajando en este proyecto pensando en la nueva generación. El primer Alan Wake se retrasó considerablemente y el estudio podría haber optado por abordarlo con tiempo suficiente para poder destacar con la nueva máquinas. La compañía finlandesa siempre se ha caracterizado por su tecnología y Alan Wake destacó por su soberbia ambientación, así que una secuela sería un buen escaparate para las nuevas posibilidades que se abren.

Juego de Zombis y Juego Familiar

Lionhead

Las posibilidades de ver un nuevo Halo en la presentación de la nueva plataforma son escasas. Para empezar, Halo es la clase se juego al que se le puede dedicar una presentación para él solo y acaparar toda la atención. Y luego está el hecho de que Halo 4 es reciente y no es probable que 343 tenga nada palpable que enseñar. Al igual que ya pasó con 360, Halo es algo que se puede reservar para cuando la nueva plataforma ya esté en funcionamiento. Todo es posible desde luego, pero lo más probable es que este sea un as que Microsoft se guarde bajo el brazo.

Epic

La compañía del Unreal Engine es un estrecho aliado de Microsoft gracias a Gears of War y ya estuvieron presentes en el mismo principio de 360 con la primera entrega de la trilogía de Marcus. Si la compañía está presente en el estreno de la nueva Xbox puede hacerlo de distintas formas: con otro Gears of War, mostrando alguna demostración del Unreal Engine como hizo en la presentación de PlayStation 4 o bien anunciando algo nuevo. Aunque en el lado de los motores la compañía es completamente neutral, en el desarrollo de juegos sus alianzas están más estrechamente lanzadas a Microsoft y por tanto habrá que ver el efecto de 

Terceras compañías

Microsoft ha basado su fuerza esta generación en unas pocas franquicias claves muy concretas y en el apoyo de compañías externas, buscando acuerdos exclusivos como exclusividad temporal en los DLCs, así que posiblemente se buscará resaltar ese aspecto. Por ejemplo, todas las conferencias previas de Microsoft han tenido como gran protagonista a un Call of Duty, una manera de ilustrar al mundo que su Xbox es el “hogar” natural de la franquicia y de sus millones de jugadores conectados a Live, así que algo en esa línea para la presentación sería bastante probable.  Por supuesto, todos los juegos multiplataforma anunciados para nueva generación en principio tendrán su versión correspondiente para la nueva plataforma. Así que casos como Watch Dogs, Assassin’s Creed IV, The Witcher 3, Cyberpunk, The Evil Within, Destiny, Thief..., cualquier juego que esté enfocado total o parcialmente a la nueva generación tiene todas las posibilidades de aparecer en la máquina de Microsoft (en este reportaje otro detallamos estos títulos: los juegos de la nueva generación). Habrá que prestar bastante atención a los estudios que hagan acto de presencia el 21 de Mayo y luego en el E3 para detectar si hay algunas alianzas más estrechas que otras. En la conferencia de PlayStation 4 Sony favoreció a Activision Blizzard (Diablo 3 y Destiny), Ubisoft (Watch Dogs), Capcom (Deep Down) y Square Enix (el fugaz anuncio de un anuncio de un nuevo Final Fantasy.

Conclusiones

No queda mucho para empezar a conocer los detalles de la nueva Microsoft y hasta entonces la duda y las preocupaciones van a estar en el modelo elegido para consumir los juegos, es prácticamente inevitable. No hay nada definitivo todavía, frases como “siempre conectado” no son concluyentes ni indican que haya que estar conectado para disfrutar de un juego. Pero si se opta por un modelo agresivo que afecte a la segunda mano y complique la vida a los que no quieren o no pueden tener la consola conectada, a buen seguro que recibirá la bendición de los grandes estudios pero también una sonora bronca de los usuarios más dedicados. Lo que finalmente resulte tendrá profundas implicaciones en la industria y en la forma en la que los usuarios consumen videojuegos, por lo que no es extraño que haya una gran expectación e incluso ansiedad sobre el asunto. Más allá de eso, será la oportunidad de poder por fin poner fin a las especulaciones y tener una visión más definida de lo que la nueva generación va a ser, teniendo ya Wii U en el mercado y con los detalles de PS4 y la nueva Xbox, sabremos el punto de partida y a qué atenernos una vez que la acción comience del todo, posiblemente a finales ya de este año.