Nintendo dice no a los fuegos artificiales
En una decisión incomprendida por muchos, Nintendo descarta realizar conferencia de prensa en el E3 2013. Wii U y Nintendo 3DS sí estarán en la feria de Los Ángeles, pero cambiarán los fuegos artificiales y el espectáculo por los hechos. Una decisión empresarial comprensible y con menos consecuencias de las que se creen.
Un hito histórico suena con amplificador en la industria del videojuego esta semana: Nintendo no realizará la mítica, mediática y habitual Conferencia de Prensa en el E3 2013. El ritual que todo seguidor de la empresa japonesa espera para cada mes de junio no se producirá en 2013. Noticia de impacto, que genera corrientes de opinión –ya lo está haciendo en nuestro foro y en redes sociales– y que marca un punto de inflexión en la industria del videojuego ¿Se acabaron los fuegos artificiales, las frases ingeniosas de Reggie Fils-Aime de Nintendo América, el distintivo inglés de Satoru Iwata y los momentos espada-escudo de Shigeru Miyamoto?
Permitidme que rompa una lanza a favor de Nintendo a pesar de que como periodista, echaré en falta este año mucho la conferencia de prensa de la compañía con sede en Kyoto. Son tiempos difíciles, y no solo por la situación económica de la empresa de Iwata en particular y de la industria en general, sino por los cambios que se están produciendo en la industria del videojuego con el auge de las redes sociales, especialmente Twitter, Facebook y Youtube, y la manera en que los jugadores devoran la información especializada. Muchos creen que esta decisión se ha tomado única y exclusivamente por argumentos monetarios. No exactamente…
Realizar la conferencia anual en el E3 tiene un coste que, de hacerse público, sorprendería a millones de jugadores. Nintendo, SONY y Microsoft invierten decenas de millones de dólares en reservar recintos –el Teatro Nokia no es precisamente barato–, en desplazar a sus empleados de todo el mundo, en contratar servicios para atender a los periodistas e invitados –autobuses, seguridad, azafatas, materiales, etc.–. Pongamos, así improvisando, que una conferencia en Los Ángeles cuesta varias decenas de millones de dólares. ¿Cómo justificar esta inversión cuando, durante los últimos meses, se ha demostrado que se puede comunicar de otra forma?
La solución se llama Nintendo Direct y es un formato que hasta la fecha solo sabe gestionar con éxito la compañía de Super Mario. El presidente de la compañía anticipa que para este E3, al que por cierto sí acudirán con demos y demás parafernalia, probarán nuevas fórmulas de comunicación como ésta –para Japón– y “eventos” específicos para los mercados centrados en los futuros lanzamientos de Nintendo 3DS y Wii U. Los tiempos han cambiado. Un trending topic en Twitter se va a conseguir también con un anuncio de impacto en un Nintendo Direct. Que sí, que la conferencia “mola” más, es más mediática y espectacular, pero el resultado obtenido será el mismo.
Cambio de formato para nuevos tiempos. No tiene más. La diferencia de este año entre Nintendo, SONY y Microsoft es que la empresa de Wii U y 3DS tiene que centrarse en el software para sus consolas, mostrándolo de la manera más directa y próxima al público. Los futuros compradores de Wii U no necesitan fuegos artificiales, necesitan juegos y anuncios que incentiven las ventas, y esto se también se puede conseguir con un Nintendo Direct. Puede que los periodistas echemos de menos el espectáculo, pero los jugadores, que son los que realmente mueven la industria, verán exactamente lo mismo. No habrá conferencia, pero no faltarán las sorpresas para las consolas de la Gran N, eso lo tengo claro.