Le Vamp

Un entrañable y joven vampiro llamado Le Vamp tiene que huir de unos coléricos aldeanos que tratan de darle caza mientras sale a jugar como un niño cualquiera. Este es el peculiar punto de partida de un nuevo endless runner desarrollado por High Voltage Software para nuestros iPhone, iPad e iPod touch. Aunque en lugar de pulsar la pantalla para saltar o atacar, deberemos interactuar con el entorno de maneras tan singulares como variadas, convirtiéndonos en una especie de ángel de la guarda de tan afable criatura. Veamos en nuestro análisis si Le Vamp logra cautivar a los jugadores ansiosos de nuevos títulos arcade en iOS y de aquellos que gusten de obras tan personales como imaginativas. ¡Lo pasaremos de muerte mientras tratamos de alejar al pequeño chupa-sangre de la tan enfurecida masa de gente!

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Por otro lado, deberemos alimentar a Le Vamp proporcionando determinados tipos de criaturas de las que alimentarse y saciar así su sed de sangre; el mecanismo es muy simple: sólo tenemos que localizar los llamados Blood Pigs y lanzarlos hacia su boca. Le Vamp se encargará del resto; y es que tendremos que mantener la barra superior lo más llena posible de sangre para no perder energía y evitar así un nefasto final. Asimismo, no podremos dejar de recoger monedas repartidas por el escenario, lo que nos permitirá mejorar sus habilidades ‒como convertirse en un murciélago para evitar ciertos peligros‒ o aumentar su salud, entre otras características. Eso sí, tan importante será aumentar nuestras ganancias para así lograr mejores resultados en futuras partidas como evitar los peligros en nuestra carrera en progreso, demostrando un buen equilibrio entre ambas vertientes de su jugabilidad.

Uno de los aspectos que más llama la atención es su vistoso diseño artístico, una interesante mezcla entre un estilo gótico realmente divertido y adorables dibujos animados con un toque macabro, todo ello tan colorido como surrealista. Y es que debemos felicitar a sus creadores por ofrecer una presentación tan cuidada y original, muy cercana en calidad a los mejores cortos de animación. Sólo es algunos momentos demuestra una exagerada sencillez de algunos elementos tridimensionales en pantalla, además de una escena de introducción que necesitaría de algo más de resolución, ofreciendo un aspecto algo descuidado. La música resulta muy divertida y amena, con constantes melodías típicas de una ambientación típicamente Halloween sin olvidarse de un genial sentido del humor; los chascarrillos de los diferentes personajes resultan también geniales. Por desgracia llega completamente en inglés aunque no supone mayor problema debido a la sencillez de sus textos.

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