Ninja Gaiden 3: Razor's Edge
- PlataformaWiiU7.5PS37.63607.6
- GéneroAcción, Aventura
- DesarrolladorTeam Ninja
- Lanzamiento11/01/2013 (WiiU)05/04/2013 (PS3, 360)
- EditorKoei Tecmo
Ninja Gaiden 3: Razor's Edge
Hayabusa regresa en Wii U, ahora junto a Ayane y sus nuevas misiones y con una versión ampliada y más cargada de opciones, también más difícil o con modo contra hordas en cooperativo. Ninja Gaiden III tiene con este Razor's Edge una reedición considerable y que lo hace, directamente, mejor juego, a la misma velocidad.
Ninja Gaiden 3 no salió todo lo bien que Tecmo Koei quería y acabó dando algunos giros demasiado drásticos hacia una vertiente más fácil, sin tanta violencia visceral o con menor acierto de cara a los fans de lo que se esperaba. Fue un título notable, con acción sin pausa y todas las señas de identidad de la protegida franquicia, pero un producto por debajo de las calidades que se esperaban, también con un multijugador que no acertaba del todo y algunos tropiezos de diseño. Ahora, el Team Ninja prueba suerte de nuevo en Wii U, con este Razor's Edge exclusivo que actía, ante todo, como una respuesta a todas las quejas de los seguidores, una actualización de Ninja Gaiden 3 que lo deje mejor recordado de lo que iba a ser. Y lo consigue, pero al partir de una base como ésta no puede llegar mucho más lejos. Eso sí, estamos ante la indiscutiblemente mejor versión de todas, completa y refinada.
Nota: Este análisis se centra en la versión de Ninja Gaiden 3 para Wii U, por lo que anotará las principales diferencias y características únicas. Pásate por el Análisis original para ampliar detalles del título.
Ayane y Kasumi listas para el combate
Es quizá el atractivo más determinante de este Razor's Edge la incorporación de misiones adicionales para un jugador controlando a Ayane, que en el Ninja Gaiden 3 original entrelazó sus apariciones con la trama de Ryu pero que ahora además tiene una buena parte de juego donde tendremos que controlarla en capítulos inéditos que narran su periplo y tienen un estilo muy propio y característico. Con una gama de movimientos bastante similar a la de Ryu solo que sin las determinaciones de la infección del brazo y siendo quizá un poco más ágil y con otros proyectiles (explosivos), Ayane mantiene el estilo de juego de todo el título, con acción sin pausa en escenarios lineales cerrados que van abriéndose a medida que limpiamos las áreas. Su historia está bien contada y entrelazada con las misiones centrales, así como los momentos en que asumiremos su perspectiva, intercalados salpicando la trama y con buen peso.
Por otro lado está Kasumi, recientemente anunciada y presentada con varios trajes distintos que irán desbloqueándose. La pelirroja llega a Razor's Edge a través de un DLC gratuito incluido en el código de juego, disponible desde el primer día de lanzamiento. Será también un personaje presente y con su propio abanico de combos y ataques. Pero más allá de las nuevas coprotagonistas y sus momentazos inéditos hasta ahora, la enorme mejora de esta edición revisada de Ninja Gaiden 3 es el aumento de dificultad, algo que estaba siendo muy demandado por los fans. Ahora el modo estándar es más duro, sin dejar de lado los rellenos automáticos de la barra de vida tras cada batalla pero con enemigos más activos, rápidos y dañinos. También el modo Héroe (el fácil aquí), que se ha endurecido levemente para no ser tan plano como en el original.
Esto da una experiencia más desafiante y de las que ponen los reflejos al máximo, sin dejar pestañear. No se ha cambiado nada más del gameplay, y había puntos que no estaría mal tocar, como las secuencias donde Ryu sufre la maldición del brazo, totalmente ralentizadoras de la acción y poco acertadas. O la repetitividad de los escenarios y situaciones en cuanto llevamos unos minutos en cada país, que obviamente se mantiene tal cual dado que cambios en este aspecto supondrían modificar de raíz el juego. Se añaden por supuesto extras de todo tipo, en forma de nuevas armas y katanas, objetos de galería, etc. No obstante, sigue habiendo poco armamento, lo que fomenta esa repetitividad inevitable. Y una curiosidad, el giroscopio del GamePad tendrá un uso que gustará a muchos: agitando el mando se pueden mover al unísono los pechos de los personajes femeninos. Un detalle muy del gusto oriental que no pasa desapercibido.
Jugado sin off-TV, el GamePad pasa a alojar algunos comandos, como el uso del Nimpo y los inventarios o menús de mejora. Se colocan botones en la pantalla táctil opcionales para manejo más intuitivo, pero desde los botones del mando clásicos la experiencia es totalmente satisfactoria. El último añadido es un Modo Arena cooperativo, donde dos jugadores en una misma consola o través de internet pueden enfrentarse contra varias oleadas en una especie de supervivencia extrema que acaba por ser muy adictiva gracias a la gran cantidad de enemigos en pantalla y todos ellos bastante resistentes. Los niveles más altos de esta Arena son un auténtico reto. El multijugador competitivo, por su parte, se mantiene intacto. No hay nuevos modos ni mapas, también debido a la tibia aceptación que ha tenido esta categoría entre los jugadores, no demasiado poblando las partidas.
Estabilidad técnica
Razor's Edge apenas modifica el acabado técnico del juego. El gran cambio viene también de las quejas de los fans, en la medida en que se han vuelto a incluir los desmembramientos característicos de la franquicia así como el volumen de sangre y demás escenas de violencia ahora "retocadas" para ganar en realismo y visceralidad. La fluidez de acción y frames por segundo estables son marca de la casa, y aquí tampoco se han estropeado, se juegue en el televisor o en el GamePad, pues la opción off-TV calca perfectamente el espectro gráfico de la pantalla grande, sin problemas, y con sonido contundente en el altavoz del propio mando. La oscuridad de los escenarios fue otro aspecto criticable, aquí no se ha tocado nada y esa neblina negra y ciertas salas claustrofóbicas se mantienen tal cual. Lo mismo ocurre con el apartado sonoro (notable) o la poca interacción de los niveles, que por supuesto sigue. No se puede hablar por tanto de una edición superior técnicamente, pero al menos no decae en off-TV y ha vuelto a mostrar la violencia característica de la marca.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.