Dance Central 3
Dance Central 3
Harmonix vuelve a poner en pie a medio salón con Dance Central 3, una actualización vibrante que sigue adelante en su coreografía de hacer a Kinect un periférico divertido y capaz de ofrecer nuevas experiencias y reconocimiento preciso, ahora con más modos de juego. Lady Gaga, LMFAO o Usher se dan la mano de temazos setenteros y ochenteros que terminan en La Macarena.
Kinect lleva desde su lanzamiento agudizando el sentido del ritmo a todo tipo de jugadores gracias al que para muchos es su mejor título, Dance Central. Esta tercera entrega lleva la propuesta un peldaño más arriba, con una Harmonix ya veterana en la marca y decidida para tomar decisiones que le han salido, una vez más, de maravilla, creando la entrega más variada y amplia de todas, con 50 nuevas canciones para actualizar nuestros tracklists si ya somos poseedores de las anteriores. Xbox 360 tiene esta Navidad otra exclusiva que pondrá a bailar a jugadores de todo tipo gracias al manejo bastante preciso que consigue al emular en pantalla los movimientos del usuario, con un avatar que no parece un artificio ni desvinculado de lo que ocurre realmente, sabiendo esquivar el gran problema de Kinect.
Juegos importantes como Fable: The Journey, Disneyland Adventures o Kinect: Star Wars han intentado sacar al periférico su mejor partido, sin demasiado éxito y acabando por frustrar al participante. En Dance Central 3 eso apenas ocurre, basta con cogerle el pulso a su rítmica propuesta para sentir que si no cumplimos las diversas exigencias del título en coreografías y tempo, es solo culpa nuestra y de que hemos jugado mal. Por lo general, nada de malos reconocimientos. Éste ha sido su acierto desde el primer episodio y repite apuesta ampliándose considerablemente aquí, a la par que pule algunos detalles criticables como las interacciones visuales del escenario o la fluidez de cambio de un paso de baile a otro. Desde los 70 hasta la actualidad más inmediata, todos los temas recogidos siguen exponiendo diversas fichas de movimientos a realizar para clavar cada paso, dando puntos según ejecución y momento justo.
40 años de baile
Desde la década de los 70 hasta la actualidad, los protagonistas de Dance Central 3 -algunos ya viejos conocidos como las parejas formadas por Rasa & Lima o Angel & Miss Aubrey- se las verán para ser los reyes de la pista en varios viajes a través del tiempo descubriendo cómo se bailaba en cada época y conjunto de canciones y preparándose para un enfrentamiento final contra el Dr. Tan. Así, unidos a la Dance Central Intelligence, los personajes conocerán a Rassa & Lima, los líderes de esta entrega y quienes guiarán gran parte de la aventura mientras van apareciendo los demás, a medida que subimos niveles y avanzamos en la trama, la más larga de todas y que recorrer en solitario o junto a un acompañante.
El reparto de canciones a desbloquear es bastante amplio, abarcando muchos estilos pero siempre con la vista puesta en la música dance, disco, R6B, electrónica... y demás estilos de discoteca. Usher encabeza el juego, con nada menos que tres canciones propias y coregorafiadas por él mismo, pero otros artistas de la talla de Black Eyed Peas o LMFAO también tendrán buena presencia. En cuanto a clásicos, la nostalgia hace mirar por fin hacia los Village People o Daft Punk, algo que contrasta de maravilla con temas muy discotequeros como el "Take over control" de Afrojack o el conocidísimo "Mr. Saxobeat" de Alexandra Stan. Se dividen por décadas, desde los 1970s hasta los 2010s, y éste es el listado completo:
Más modos de juego
Dance Central 3 recoge todo lo sembrado por sus dos antecesores, que no es poco, en cuanto a posturas a imitar y mantener, sistema de puntos mediante combos y coordinación, o invitación a las coreografías para hata 8 jugadores en sus estilos de juego donde dos equipos de 4 componentes se enfrentan. Además, ahora se ha volcado con una necesaria incorporación, el modo Fiesta, que permite ir cambiando rápidamente de canciones casi sin pausar el baile, lo que ayuda a crear coreografías personalizadas que también podremos editar con el modo Haz tu paso, desde el que retaremos al resto de participantes a copiar nuestros bailes, que Kinect recoge y asigna a uno de los movimientos, cinco más las derivaciones. Algo escaso pero divertido y que dará juego a los más picados.
Las posturas finales ganan importancia en Dance Central 3, que tiene incluso un modo multijugador plenamente atento a estos pasos especiales. Dos usuarios simultáneos tendrán que verse las caras en una sucesión de poses clave para lograr mejores combos que el contrincante, cada uno con su propio listado de movimientos. No hay ninguna innovación con esta modalidad, pero sin duda busca añadir contenido al que obviamente es el Dance Central más grande de todos. Ahora bien, hay que reconocer que una vez explorado, se queda corto si se viene de los dos capítulos anteriores, pues en realidad no hay ninguna innovación ni evolución de su mecánica. Se podría haber aprovechado para incluir una buena tanda de movimientos, modos sorprendentes y para mucha gente o hasta nuevos escenarios, pues algunos se repiten.
Y sobre escenarios, las pistas de baile de las distintas salas que recorreremos con el equipo de protagonistas, ahora hay un poco más de interacción y sincronía entre efectos como flashes o despliegue de neones en relación a los golpes fuertes y subidones de las canciones, hay algo más de interacción también con elementos que se rompen o agetreo del público cuando lo bordamos y no paramos de encadenar pasos bien ejecutados y justo en su momento. La leve predicción que tiene Dance Central sobre Kinect le ayuda a que rara vez tengamos sensación de que no se corresponde nuestro baile con el del avatar, aunque, claro está, se le siguen pudiendo hacer algunas trampas.
Luces de colores
Dance Central 3 no cambia apenas su apartado técnico. Se ha ganado algo de suavidad en las animaciones -poco- y se han caracterizado mejor los rostros y expresiones de los personajes, pero no va mucho más allá y de hecho reutiliza pistas de baile o diseños de los anteriores, claro está. La iluminación dinámica en pista en relación a cómo lo estemos haciendo y los momentos fuertes de la música es un factor revisado, ahora más cambiante, pero todavía sin sorpresas. En cuanto a navegación por los menús, se ha cambiado el manejo dejando de lado aquel incómodo apuntado con la mano, ya que ahora con movimientos más abiertos y naturales del brazo entero podremos desplazar las casillas, con un lag inferior al que muestran otros juegos gracias otra vez a la leve predicción de gesto que ha incluido Harmonix siempre en sus Dance Central. Es un control de recuadros y tablas más cómodo.
El sonido, lógicamente, es el mejor apartado de este producto, no solo en lo que a canciones se refiere con una selección tan férrea e identificativa de las épocas sino también por efectos, voces en los diálogos y presentación en general. La deslumbrante puesta en escena demuestra que para Microsoft esta marca ya es muy importante y que se han manejado buenos presupuestos para poner en pie no solo una jugabilidad satisfactoria, sino también un buen ejercicio de organización y explicaciones, para que el nuevo usuario no se pierda y pueda aprender en seguida cómo funciona esta pista de baile virtual.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.