El Juego del Mes: Julio-Agosto
Tal y cómo ya hicimos durante el año pasado, unimos los dos meses de verano para elegir el mejor juego que ha salido durante este período. Ha sido un verano cargadito.
El juego del mes está de vuelta. Después del parón clásico de verano nos decidimos a escoger cuál de los juegos que han salido publicados durante el mes de julio y de agosto merece el galardón que a las postres permite competir para el mejor juego del año. Agosto ha sido un mes mucho más prolífico de lo que estamos acostumbrados, con diversas salidas importantes tanto a nivel de retail como también en juegos descargables. Los bazares están cada vez más activos y una muestra de ello es Live Arcade, que ha recibido juegos de alto nivel que poco o nada tienen que envidiar a los físicos. Spelunky es uno de esos juegos de julio, más que recomendable pero que se queda fuera de los nominados finales.
Más allá de este, hay otros grandes títulos que hemos dejado fuera debido a la calidad de los finalistas. Un buen ejemplo es Dust: An Elysian Tail, Action RPG para Xbox 360 que a pesar de ser de los grandes lanzamientos Arcade se ha quedado fuera; en el mismo caso se encuentran otros títulos de notable resultado como Orc Must Die o el remake de Jojo’s Bizarre Adventure. Una propuesta como Tales of Grace F para Playstation 3 o el mejor Transformers de la historia con La Caída de Cybertron tampoco han entrado entre los mejores de los meses de julio y agosto. Un verano movidito con grandes títulos y variada oferta para todos. Tampoco Dark Souls para PC -con controvertida conversión- entra en lista ya que salió en consolas el año pasado.
Por último, destacar que Guild Wars 2 tampoco entra en las valoraciones del juego del mes y lo hará en el siguiente. Nuestros expertos en MMO siguen jugando a destajo a la propuesta de MMO sin cuotas, pero lo mejor en este tipo de títulos es darle primero el recorrido que merecen. Por eso, también, el análisis de Guild Wars 2 todavía no ha salido del horno a pesar de que el juego ya está disponible. Con estas premisas os presentamos al mejor juego de julio y agosto y a los finalistas que han recibido algún voto dentro de la redacción. Aunque el vencedor ha cabalgado con cierta comodidad hasta el triunfo.
La otra joya de la corona de Xbox Live Arcade de este verano de la mano de los españoles Tequila Works. Microsoft tenía muchas esperanzas puestas en este juego y dotó a la compañía de un presupuesto generoso para poder ofrecer una experiencia única. La idea era enfocar el juego en la supervivencia dentro de un mundo apocalíptico infestado de zombis. Y en parte se consiguió con una mecánica de juego muy old-school que recuerda a grandes clásicos de los videojuegos como Prince of Persia o Flashback. Una experiencia audiovisual más que interesante por el juego de luces y los bellos –y destruidos- escenarios que se han generado y vamos visitando.
A algunos de los redactores de esta casa les ha cautivado más Dust: An Elysian Tail –como es el caso de un servidor- pero la democracia es la que manda en estos tiempos y Deadlight ha obtenido más soporte de parte de miembros de Meristation para azarlo al cuarto puesto, aunque no entra en podio. Y motivos hay de sobras: precioso a nivel audiovisual, con una trama de matices y un giro inesperado, un sistema de juego con buen ritmo y fresco a pesar de algún error en saltos y bastantes extras que permiten construir un puzle en claro sobre el universo de Deadlight. Su principal contratiempo es que no es demasiado largo (unas cuatro- cinco horas para hacer el 100%, algo menos para simplemente completarlo), aunque la experiencia merece la pena.
Hay ganas de sandbox como lo demuestra la Buena acogida que ha tenido el juego publicado por Square Enix: Sleeping Dogs. Se había seguido con cierta moderación, sin grandes alardes en los eventos y momentos previos, pero la realidad es que el resultado final es un videojuego sobresaliente con muchas cosas de interés. Otra manera de ver el mundo sandbox donde GTA es referente gracias a una ubicación distinta como es Hong Kong o un sistema de juego que va directo al grano en distintos aspectos. Ha sido para muchos una gran sorpresa de este verano, y ha recibido el suficiente apoyo para convertirse en el tercer mejor juego de estos meses de julio y agosto.
Sleeping Dogs nos pone en la piel de Wei, un policía de incógnito que se infiltra en las tríadas de Hong Kong y debe compaginar las acciones delictivas de sus nuevos amigos con misiones de agente de seguridad para asestarles el gran golpe. Un mapa interesante en cuánto a tamaño, gran cantidad de misiones y tareas secundarias que realizar, una trama principal con ritmo y un punto de vista interesante y un sistema de combate fresco: muy similar en cuerpo a cuerpo a Batman de Rocksteady, con combos y secuencias sencillas. En definitiva, otra cara de los sandbox con mucha personalidad y elementos que otras compañías tomarán nota para sus próximos juegos.
Un clásico entre los juegos multijugadores competitivos es Counter Strike, de eso no hay duda. Todo el mundo sabe de la existencia de ese nombre, y está de vuelta de la mano de Valve en una versión multiplataforma. La idea era renovar y usar nuevas fuerzas para convertirse en el nuevo rey de los juegos de acción en primera persona con la premisa de siempre: terroristas y fuerzas especiales frente a frente. Global Offensive llega a las tres plataformas para quedarse, ampliando en consolas la teoría de que en formato digital cada vez se podía vivir mejor. Este es otro ejemplo de grandes títulos que no pasan por el formato físico. Aunque la versión a tener en cuenta a poco que se pueda siempre deberá ser la de PC.
El resultado es un multijugador competitivo excelente en casi todo lo que tiene que ver con el gunplay o intercambio de disparos. Se ha reducido el hitbox para ajustar mejor la experiencia, las armas responden a la perfección según sus particularidades, los mapas clásicos son una garantía de éxito y además están rediseñados y lo más importante: es un Counter Strike de principio a fin, con su fórmual intacta incluso refinando todavía la experiencia original. Si a todo esto le añadimos la presencia de Bots para entrenarnos, los nuevos mapas y las opciones de modificación con las que cuentan tenemos un clásico que vuelve por la puerta grande y que ha recibido un buen apoyo dentro de la revista. Eso sí, no ha conseguido desbancar al indudable y claro número 1 de estos meses.
Una de las mayores sorpresas que recibimos hace algunos años era Darksiders, un juego que encandiló tanto a la prensa como al público gracias a una fórmula que no se lleva demasiado en una generación donde los disparos son el pan de cada día: la aventura. No ofrecía grandes dosis de originalidad, pero Darksiders y la historia de Guerra era un buen compendio de elementos prestados de otros juegos, sobre todo bebiendo de la fórmula Zelda con mazmorras y nuevos objetos que permitieran mejorar las habilidades y avanzar por nuevas zonas. Esto se unió a un sistema de combate típico del hack and slash, se pusieron puzles interesantes y un universo atractivo y el resto ya se sabe: Darksiders como uno de los juegos que más cariño se le tiene pasada su primera y soporífera hora de juego. La segunda entrega llega con Muerte como protagonista y una mejora evidente en todas las facetas de juego.
El resultado final es más que satisfactorio. Nos encontramos ante una aventura de acción con muchas dosis de plataformas, una de las grandes novedades de esta entrega que bebe directamente de propuestas como Prince of Persia: Arenas del Tiempo. No es la única de las virtudes de esta secuela de Darksiders, ya que cuenta también con un mundo abierto lleno de misiones secundarias y muchos contenidos para rejugar el juego una y otra vez. Sistema de combate más potente con una pesonalización de habilidades muy RPG y su gran duración, además del protagonismo de los puzles y su adecuado diseño, son los elementos que han enamorado a la redacción que ha votado en masa a Darksiders II como juego del mes y uno de los candidatos a juego del año de cara a fin de curso.
Más grande, más pulido y con más posibilidades. Darksiders II representa todo lo que una secuela debe tener para ser un paso adelante en una franquicia. Un aventura como las de antes pero con las posibilidades actuales, con personalidad propia y hasta modalidades extras como la Arena, elemento añadido que ofrece más contenido para el juego. Solo la repetición excesiva de algunas mecánicas en el tramo final y algunos errores de cámara empañan un juego ideal en tiempos como los que corren en estos días. El juego del mes de agosto, y de julio, cae en manos de Vigil Games y THQ con una aventura recomendable hasta decir basta.