Total War: Rome II, Impresiones Gamescom

En el año 2004 The Creative Assembly lanzó un espectacular videojuego de estrategia en tiempo real que a día de hoy sigue siendo un clásico. En la primera entrega de Rome nuestra misión consistía en dirigir a una de las familias romanas disponibles hasta la dominación de todo el imperio, un reto épico que cautivó a miles de aficionados de todo el mundo. Ahora, 8 años después, la desarrolladora norteamericana nos sorprende con una secuela que, sin especificar aún el argumento, consigue con su versión Pre Pre-Alpha y con una sola misión, que nos quedemos sin palabras ante las posibilidades jugables y visuales del título.

Durante la presentación en la Gamescom la desarrolladora quiso dejar claro que los aspectos humanos, religiosos y políticos serán tan importantes como el dominio de la estrategia militar sobre el campo de batalla. Estas múltiples posibilidades estratégicas nos permitirán orientar a nuestro gusto el estilo de combate y los objetivos sociales con el fin de decidir si queremos instaurar una república o dominar con un imperio. Todo este planteamiento irá acompañado de un argumento oscuro y repleto de historias humanas que serán el trasfondo de las guerras más épicas de la historia de la franquicia.

Batallas épicas
En el campo de batalla los mapas serán enormes, superando con creces todo lo visto hasta el momento en otros títulos. Esta opinión tan ambiciosa fue secundada porb Diseñador jefe de Total War: Rome II, que nos aseguro que "las guerras romanas representan la contienda definitiva a nivel estratégico", algo que pudimos comprobar de primera mano. La misión comienza en los mares de Cartago, un lugar invadido por miles de galeras romanas repletas de soldados y remeros que luchan con todas sus fuerzas para desembarcar en la orilla de la enorme ciudad fortificada, una muestra clara del combate total que se quiere exhibir en Rome II. Antes de que los romanos puedan poner un pie en orilla, unas catapultas dentro de la ciudad comienzan a batir la playa con sus enormes bolas de fuego, secundados en todo momento por los arqueros que se apostillan en la muralla.

Tras desembarcar iremos colocando estratégicamente a nuestras tropas a lo largo de la muralla y podremos ver cómo los arqueros nos disparan desde arriba, nuestras torres de asedio se dirigen imparables a los muros y los soldados esperan a que la fortificación o las puertas de la ciudad se vengan abajo para entrar a matar sin piedad. Toda esta acción estratégica puede ser observada bajo un amplísimo abanico de perspectivas que irán desde la cámara cenital, que nos permite ver el combate como si de un tablero de ajedrez se tratara, hasta a ras de suelo, el lugar en el que los soldados tienen gritan de puro miedo y derraman su sangre. Esta dinámica visual es uno de los puntos más espectaculares del título y consigue que realmente nos sintamos dentro de la batalla. Un claro ejemplo es que al llegar las torres de asedio a la muralla, la cámara desciende hasta el interior de la torre para observar cómo el capitán del ejército romano grita a sus soldados que luchen por el orgullo de Roma, todo ello adjetivado con una música realmente épica.

El sonido del imperio
El apartado sonoro es otro de los aspectos más sorprendentes del nuevo título de la saga Total War. En Shogun 2 tuvimos melodías que marcaban perfectamente nuestras acciones, sin embargo, Rome II va un paso más allá. Las melodías no son simplemente un acompañamiento, son parte de la historia. La perfecta sincronización entre la dinámica de la batalla y las partituras nos harán sentir dentro de una película, una sensación bélica que sorprenderá a los grandes amantes de este género. Pero obviamente todo esto no sería posible sin un motor gráfico capaz de soportar toda la acción y movilidad que se le exige a este tipo de combates. El evolucionado motor gráfico consigue reproducir a la perfección la enorme ciudad en la que combatimos, llenar de vida las calles y dejarnos la sensación de que estamos ante un mundo real. A este realismo visual hay que añadirle unos mejorados efectos del agua, una capacidad destructiva de los escenarios impensable hace apenas una entrega y una visualización de los detalles del conflicto desde los ojos de los soldados que nos harán pensar que estamos realmente en una batalla viva, variable y llena de sentimientos.

Este enfrentamiento se trasladará posteriormente al interior de la ciudad, una preciosa urbe que irá destruyéndose paulatinamente a medida que interactuemos con ella. Un mapa realmente enorme que podremos recorrer en toda su extensión y que está presidido por un gran edificio sobre una colina. Dicho edificio es nuestro principal objetivo y, enfrascados en la batalla por dominar la colina, vemos cómo los cartagineses aparecen subidos en elefantes para cargar contra nuestra caballería y cortar nuestro ascenso. Así termina una demostración que realmente nos ha dejado con ganas de seguir probando el título. La nueva obra de la saga Total War vuelve para demostarnos que en el género de la estrategia en tiempo real aún quedaba mucho margen de mejora y extensos libros de historia por descubrir. Todavía sin fecha confirmada para el lanzamiento del título, tenemos claro que The Creative Assembley trabajará duramente para pulir un producto que, aún estando en una fase muy previa, demuestra todo su potencial en apenas unos minutos.