Inversion
- Plataforma3605PS35
- GéneroAcción, Aventura
- DesarrolladorSaber Interactive
- Lanzamiento10/02/2012
- EditorBandai Namco Entertainment
Inversion
Los Lutadore amenazan la Tierra como Inversion amenaza la originalidad del género más saturado del momento. La gravedad de este título reside más en su conformismo que en los cambios de fuerzas que permite ejercer ingame. Una idea mal aprovechada que no sabe sacar partido ni al multijugador.
Más shooters en tercera persona, y de soldados espaciales que se ven envueltos en un ataque al planeta Tierra catastrófico. A pesar del parentesco instantáneo con el omnipresente Gears of War, Inversion guardaba su gracia en una prometedora nueva concepción para el abarrotado género: los cambios voluntarios de gravedad. Sin embargo, la propuesta de Saber Interactive se ha quedado a media mecha para explotar de verdad el potencial de un juego de físicas y realidades como el que parecían tener entre manos los estudios, dejando un título descafeinado que no logra comportarse del todo bien ni en los disparos ni en los superpoderes, una obra de segundo rango que con mayor mimo y presupuesto podría haber hecho nacer a una IP rompedora y que terminara de esbozar otra forma de entender los third person shooters, siempre abanderados por Uncharted y la ya tetralogía de Epic Games.
Genérico y poco inspirado, los fallos de diseño, la flojísima IA y en lo que han acabado sus dotes únicas con los cambios de gravedad para personajes y objetos lo hacen un juego mediocre que guarda consigo una historia de clichés y acción armada sin más. Una trama con incongruencias y estereotipos por doquier, sumada a una estética ya muy vista y explorada, al igual que un sistema de juego que hoy se hace repetitivo y poco atractivo para el que venga de otros nombres. Coberturas a media altura, disparos, recogida de munición de los caídos, más coberturas y más disparos. ¿Dónde está entonces el añadido de la gravedad? En que podremos sacar a los enemigos de sus trincheras elevándolos por los aires, arrojar objetos contra ellos o desplomar coberturas haciéndolas volar. Así como cambiar de perspectiva cuando los cambios gravitatorios afecten a nuestro personaje, algo que a nivel visual logra impactar pero que en cuanto a jugabilidad no modifica absolutamente nada, ni el ritmo de juego, muy estable.
Un rescate de alturas
Inversion es la historia de un par de policías, Davis Russel y Leo Delgado, especialmente de Russel que tiene que buscar a su hija en medio de un ataque de la raza extraterrestre Lutadore, que también llega con tecnología antigravitatoria junto a sus naves. La Campaña, de unas 7 horas de duración, puede recorrerse en solitario o en cooperativo, quizá uno de sus mejores atractivos que no deja de ser un modo ya contemplado en muchos otros títulos del mismo tipo. El trayecto es completamente lineal, sin dobles caminos ni opciones, en un continuo disparar y cubrirse que solo llega un poco más allá cuando tomamos una torreta para abatir oleadas o -por fin- se cambian las tornas de un encuentro gracias al manejo a antojo de la gravedad. Hay varios portales que hacen a los personajes y objetos que caen en ellos modificar su fuerza imán, por ejemplo, del suelo a un techo o del suelo a una pared. Con esto, la acción sigue y las coberturas pasan a ser una lampara o una estatua vertical que apoya sobre un muro, y nada cambia en realidad, pues tendremos que seguir disparando a lo lejos, usando el rifle, las escopetas o las ametralladoras. Solo una espectacular vista de la ciudad devastada mientras bajamos en vertical por una cristalera de un rascacielos, o ver una enorme grúa bocabajo edulcoran los sinsabores que deja en su espectro jugable todo el asunto de la gravedad controlable.
También con esto hay tramos de cierto plataformeo o semi exploración, donde muchos escombros y diversos objetos vuelan por los aires y tenemos que mover al personaje levitando entre éstos, para llegar hasta el siguiente punto, a veces siendo tiroteados, lo que le regala algunos de los momentos más dinámicos y bien diseñados, junto a los jefes. Éstos tienen un papel esencial en Inversion, pues es donde usaremos la gravedad de forma más imprevisible o inteligente, por ejemplo arrancando con nuestra onda antigravitatoria piezas del escenario para hacerlas trincheras desde las que soportar los letales ataques de los monstruos con los que nos las veremos. En otro caso, hay que hacerlo levitar hasta un techo de cristal para que se corte y despedace. Y es que las armas que dan a los protagonistas potestad sobre la gravedad en realidad, por lo general, se usarán para levantar a los rivales por los aires y dispararles sin darles opción, sacarlos de sus escondites, o arrojarles elementos, como coches, barriles explosivos, campos eléctricos... Como la pistola de atracción de Half Life, podremos con algunas armas coger objetos y tirarlos con fuerza.
Jugar en cooperativo no supone diálogos nuevos o situaciones de cooperación. Ir con un amigo solo sirve para afrontar mejor las hordas de esta especie de Locust pero más tontos, pues el juego recuerda en muchísimas partes a Gears of War pero sin ni siquiera respirarle en su suavidad, variedad de movimientos, épica... Tanto es así, que hasta el cuchillo que llevan las armas delante recuerda al fusil de Marcus, solo falta la motosierra del Lancer. Los cuadrados de hormigón a media altura, las naves industriales que recorreremos o los jefes de gran tamaño son pequeñas señas que dejan claro que en creatividad tampoco se han volcado demasiados esfuerzos. Estamos ante una historia muy plana y una estética ya recurrente, quizá viciada por el referente del género. El juego no deja de ser divertido, pero la Inteligencia Artificial de los enemigos es otro resbalón crucial en comparación con otros títulos similares. Inversion es un paseo de disparos a dianas que nos disparan, pero dianas totalmente sobrexpuestas e incapaces de trazar tácticas de ataque. Los Lutadore salen a morir, y da igual si se les dispara en un pie o en la cabeza, casi siempre resisten igual.
Los escenarios son variados, pero no su mapeado, es decir, que siempre tendremos la sensación de estar jugando a lo mismo, solo que cada vez con más enemigos y sobre unas paletas de colores y arquitecturas nuevas. De la Tierra a la guarida de los Lutadore, con toda la lava y las cavernas de esta especie de Infierno, la gravedad aquí también tiene ciertas irregularidades, como elementos que no se ven afectados por los cambios de ella. Usar las ondas antigravitatorias o la pistola de atracción ralentiza en parte la acción, pero hay tramos claramente diseñaos para abusar de estos poderes y rematar con armamento de fuego. Decíamos que el ritmo es estable, y aunque hay subidones en la línea general, el gameplay no alcanza la enormidad de los referentes del género.
Serie B
Nada más dedicarle una o dos horas, Inversion deja ver que está tratado como un producto castigado, con poco respaldo. El doblaje -en inglés- es directamente malo, con desincronización labial continua y cierta sobreactuación. Se comporta mejor la música, que sabe jugar con las situaciones y emocionar en algunas partes más sentimentales, pues a pesar de la testosterona no falta el despliegue de valores sensiblones -de nuevo a lo GoW-, narrados, eso sí, con la tozudez de una teleserie adolescente. Pero por encima de todo esto, está lo meramente gráfico, destacable en negativo ya que no alcanza los estandares de hoy en el que probablemente sea el estilo de juegos más vistoso de las consolas. Texturas paupérrimas y animaciones poco elaboradas y clónicas son la primera marca de que el apartado visual de Inversion no se ha llevado demasiados presupuestos ni horas de trabajo. Si a esto se le suma la puesta en escena y estética recurrentes, el resultado es innegablemente mediocre, por debajo de las expectativas. Lo mejor de lo estrictamente técnico, el efecto de pérdida de gravedad y los pesos, perfectamente creíbles.
15 contra la gravedad
Multijugador para hasta 16 usuarios online es el otro soporte de Inversion, que ya podría haber indagado un poco más en las partidas en red por encima de los habituales Team Deathmatch, Capturar la Bandera o Todos contra todos. Propone una vez más estos modos, en algunos escenarios sacados de la Campaña y adaptados al multiplayer competitivo, sin doble diseño para según cuántos jugadores haya dentro. El desequilibrio es la palabra clave en un modo online que hace demasiado potentes a determinadas armas y muy flojas a otras, creando al instante por tanto encuentros de 16 usuarios de perfil similar, dejando en desuso arsenal por su ineficacia. El lanzallamas es un buen ejemplo de esto, totalmente desajustado.
Uno de los modos otorga armamento gravitatorio a un único personaje, y los otros 15 deben abatirlo para tomar su relevo y desempeñar este rol hasta que aguanten, algo así como el Juggernaut de Modern Warfare 3. Pues bien, en Inversion esto automáticamente se traduce en uno levantando todo y el resto volando inmóviles, aburridos y completamente desbordados por el poder del controlador. Se producirán algunos cambios, pero si el protagonista es buen jugador, sabrá mantener durante unos minutos a todos sus atacantes a raya. Se tendría que haber equilibrado también, pues es su modalidad más original y acaba por hacerse la menos atractiva dada su lentitud de juego en relación a las otras, tremendamente tradicionales.
Mejorable
Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejará huella. Sólo recomendable en caso de sequía de este género de juegos.