A mediados de los 90 fue bastante popular en España una colección de VHS llamada "Magic English", compuesta por unas treinta cintas en las que a través de clips de cortometrajes, películas o series de Disney se introducía a los niños en el inglés. Ahora se llevan más las academias, pero la colección también se encuentra editada en DVD para deleite de las nuevas generaciones. Claro que hay otra alternativa: los videojuegos. Square Enix se quiere sumar a la lista de estudios concienciados con la enseñanza del idioma más importante del mundo y para lograrlo ha decidido que la última entrega de su saga de videojuegos familiar, que acumula cifras de 18 millones de juegos vendidos en todo el mundo, llegue en perfecto inglés a España e Italia . Así es: la versión europea de Kingdom Hearts 3D: Dream, Drop, Distance para Nintendo 3DS llegará doblada al inglés con subtítulos en alemán, francés e inglés... pero ni rastro del español. Curioso cuanto menos porque durante el E3 se nos dijo lo contrario. Y de eso hace poco más de una semana. La primera entrega de la saga Kingdom Hearts cumplió su décimo aniversario el pasado mes de marzo (fue lanzado en Japón el 28/03/2002) y el próximo mes de noviembre hará lo propio en territorios europeos. El juego fue un éxito: de crítica y de público, habiendo vendido en todo el mundo casi seis millones de copias. En 2005 llegaría su segunda parte, primero a Japón y luego, por supuesto, a occidente. Square Enix estaba tan segura del éxito de la misma que tiró la casa por la ventana y en territorio español pudimos contar con un sensacional doblaje al castellano que se encuentra entre los mejores jamás realizados en el sector. El mimo puesto en el título, que además atesoraba una gran calidad, se vio recompensado con unas ventas altísimas, aunque inferiores a las del original (en torno a cuatro millones a nivel mundial). A partir de ahí la cosa se torció: Square comenzó a lanzar spin-off etiquetándolos como "entregas necesarias" y fue quemando la franquicia, calidad al margen, cansando un poco a los fans cambiando de plataforma continuamente (la saga ha aparecido en PS2, GBA, DS, PSP, 3DS y varios terminales móviles) y estirando el argumento de formas, cuanto menos, discutibles. Y llegamos a Dream Drop Distance, que se anunció de tapadillo en el E3 2010, de forma exclusiva para Nintendo 3DS. Las primeras informaciones apuntaban a pelotazo, las posteriores hicieron dudar un poco, pero tras probarlo nos convencimos de su calidad . Sin embargo parece que las ventas no han acompañado: en Japón, único territorio donde ha sido puesto a la venta, ha sido un fracaso: desde finales de marzo sólo ha vendido unas 300.000 unidades. Bien es cierto que la franquicia siempre ha funcionado mejor fuera del país nipón y que quizá remonte en occidente; en Europa, probablemente, no sea así. La decisión de no localizar el juego al español, que recordemos es el segundo idioma más hablado del planeta, no tiene absolutamente ningún sentido. La editora habitual de la licencia en nuestro país, Koch Media, ha lanzado balones fuera en su cuenta oficial de Twitter asegurando que esta entrega la trae a nuestro país Nintendo. La cosa resulta más chocante incluso, pues Nintendo Europa -y por extensión España- se caracteriza por haber dedicado esfuerzos a la traducción de prácticamente el 95% de su catálogo. ¿A quién echamos la culpa entonces? Sólo nos queda un nombre, y es la fuente: Square Enix. Recordemos que toda la franquicia ha llegado a España... en español. Desde los títulos de PlayStation 2 hasta los lanzados en plataformas portátiles. La bajada de las ventas de las últimas entregas puede haber motivado a Square Enix a no localizar este último a nuestro idioma, pero analizando la situación, llegamos a la conclusión de que no tiene absolutamente ningún sentido partiendo de la base de que Kingdom Hearts es la franquicia familiar de la compañía, con un target que va de los 8-15 años, un público que por mucho "Magic English" que haya visto y mucha escuela particular a la que asista, no sabe inglés. No para entender un videojuego que no tiene una historia extremadamente desarrollada, pero que resulta algo liosa (porque tienden a recoger hilos de otras entregas para confundirlo todo) y que trata sobre conceptos básicos (amistad, el bien y el mal) a través de términos complejos ('dream eaters', 'unknowns'), con un vocabulario no muy habitual para este segmento de edad. Si el juego llega en inglés no sólo matan sus posibilidades comerciales entre su público, si no que dan pie a que los que empezaron con la saga en 2002, que quizá ahora ronden los veintipico, por mucho que sepan inglés, no vayan a pasar por el aro, pues insistimos: la saga no pasa por su mejor momento, a pesar de la elevada calidad de alguna de sus entregas tardías (Birth by Sleep a la cabeza). Esto me lleva a recordar The World Ends With You , quizá el mejor juego que hizo Square Enix para Nintendo DS (es más, diría que en toda la generación) y que llegó a España en inglés. Cuando analizamos el título en la revista decidimos darle un 9/10 -Excelente- a pesar de todo, porque entendíamos que era un caso bastante diferente al que tenemos entre manos: la historia era muy minoritaria, la estética del juego era particularmente 'especial', su público por tanto era reducidísimo. Haberlo traducido probablemente no habría salido rentable, siendo completamente realistas. Así que la tirada que se hizo en España (que además fue limitadísima) atendía más al facilitar a esos seguidores puntuales el conseguir el juego sin recurrir a la importación. Kingdom Hearts no es una saga cerrada, no es un nicho, es una franquicia con 18 millones de unidades vendidas. Es un juego protagonizado por un adolescente que usa una llave como espada, que vive aventuras con sus amigos, que resultan ser -entre otros- el Pato Donald y Goofy, y que visitan mundos basados en películas de Disney. Que se edite en España sin estar traducido (hablamos de unos miserables subtítulos) no es sólo injusto: es estúpido. Queda un mes para que salga a la venta (22/07/2012) y por mucho que pongamos el grito en el cielo la cosa no va a cambiar: no hay vuelta atrás. Pero recupero lo que más arriba dije de forma rápida, y es que Square Enix está matando su propia gallina de los huevos de oro. A base de entregas en numerosas plataformas, una historia demasiado liosa (que no compleja, ni mucho menos) y la insistencia en retrasar la esperada tercera entrega numérica (curiosamente Tetsuya Nomura, responsable principal de la licencia, dijo hace poco que "es hora de devolver Kingdom Hearts a consolas de sobremesa ") parecen estar forzando su desaparición. Y tal cual está la compañía japonesa a día de hoy, recapitulemos, con la franquicia Final Fantasy herida de gravedad y Dragon Quest funcionando peor de lo habitual fuera de Japón (y la cosa puede ir a peor con Dragon Quest X siendo un MMO... ), no deberían forzar la situación más de lo debido. No parece ninguna locura decir que el estudio está viviendo de la buena salud de sus juegos occidentales (Deus Ex Human Revolution, o los esperadísimos Tomb Raider y Hitman Absolution así lo prueban) y lo peor es que parecen no sólo conscientes de ello, sino además alegres de que así sea. Yo no sé qué pensáis vosotros, pero como he dejado claro en más de un punto del artículo, a mi todo esto me parece una locura. Lo digo como seguidor de la licencia (no en vano fundé en 2002 KHManiacs) y como simple periodista del sector. No es una pataleta, es una reflexión desde el sosiego. No hay justificación posible para la no-traducción de un juego que habría arrasado con una buena localización y una campaña publicitaria en condiciones, que pertenece a una licencia que acumula 18 millones de entregas vendidas en todo el mundo. Y que según Tetsuya Nomura, "dará pistas clave sobre la tercera entrega de la saga" , habiendo recalcado numerosas veces que no es un juego de relleno; que es importante. Vale, siempre lo dice, pero quien no sepa inglés va a perdérselo. Y quien lo sepa, y no quiera pasar por el aro, también. Las primeras reacciones a las noticias se han hecho notar con fuerza... y son de rechazo. Tanto en España como en Italia, la sensación es la misma: que esto es ridículo. Pero vivimos una época en lo que la cordura sale cara. Sora y Riku lo saben, y en julio nos lo harán saber en un perfecto inglés. Thank you, Square Enix.