Rayman Origins
- PlataformaPSV9
- GéneroPlataformas
- DesarrolladorUbisoft Montpellier
- Lanzamiento01/12/2012
- EditorUbisoft
Explosión de color
Después de convertirse en el juego revelación del año pasado, el irresistible Rayman Origins llega de manera impecable a Playstation Vita, convirtiéndose en el mejor argumento para demostrar el acierto de Sony al elegir la tecnología OLED para su pantalla.
Nota: La versión Vita de Rayman origins es casi idéntica a la de consolas, por lo que se recomienda leer nuestro análisis original para profundizar más en lo que ofrece.
Dicen que una imagen vale más que mil palabras, y a veces es cierto. Mucho se ha hablado de la pantalla OLED de Vita, de cómo esa tecnología es ideal para los juegos por su excelente contraste y extremadamente corto tiempo de respuesta, por su capacidad de plasmar los colores de forma intensa frente al LCD. Pero por mucho que se escriba y aunque se intentara explicar los fundamentos técnicos y teóricos de esta tecnología, cosas como el hecho de que no necesita luz trasera y que cada pixel emite luz por sí mismo, con las ventajas que eso conlleva, lo cierto es que en este caso todo eso sería insuficiente. Si se quiere entender de verdad lo que es esta pantalla y la razón de que sea continuamente mencionada y alabada como uno de los pilares fundamentales de Vita, no hay que más que hacer funcionar Rayman Origins en una. Todo quedará aclarado, pues hay pocos juegos que hagan destacar a esa pantalla tanto como lo hace este título.
El resultado es uno de los títulos artísticamente más notables de esta generación. Los intrincados decorados y extraños paisajes están repletos de matices y detalles que llaman poderosamente la atención. Verdes praderas, paisajes volcánicos, territorios helados y fondos submarinos, la simpleza es una palabra que no existe en el vocabulario de Rayman Origins, todo es recargado, complejo y lleno de una aparentemente infinita gama de colores que parecen querer escapar de la pantalla de Vita por su intensidad. Es como ver una pintura en movimiento y es uno de esos juegos en los que realmente merece la pena soltar los controles y quedarse quieto admirando la destreza y visión de los artistas que han dado forma a este extraño mundo.
Extraño es la palabra para definir un mundo que esconde grotescas pesadillas en su interior y en donde incluso la belleza aparece a veces retorcida en extrañas formas. El mundo de Rayman tiene un componente bizarro que es díficil de ignorar, y algunos de los diseños de criaturas y especialmente de jefes finales contrastan con los intensos colores con los que se ha recreado este universo. Visualmente también destaca por sus excelentes animaciones y por su acentuada originalidad, ni siquiera los topicazos en aspectos como "mundo de hielo", "mundo de fuego"... tan habituales en el género tienen aquí un tratamiento normal. Hay una visión muy personal y coherente en todo lo que rodea a esta aventura y eso es algo que le concede un valor añadido. Sólo con las animaciones de Rayman y el elenco de rarezas que le acompañan, son suficientes para hacer entender que estamos ante un juego muy personal y particular.
Pero aunque su virtuosismo gráfico sea notable y atraiga el debate hacía él de forma irresistible, no es el único elemento que hace destacable al juego. Es un magnífico plataformas, realizado de forma experta y con una exquisita curva de dificultad que va poco a poco abriendo la experiencia al jugador. La variedad de movimientos de Rayman es un elemento que impide que el desarrollo se haga aburrido, siempre con un amplio abanico de opciones ofensivas y plataformeras para ir superando fases que se suceden en clara línea de dificultad ascendente. Con más de 60 niveles y una cantidad ingente de contenido, incluyendo multitud de secretos y lugares ocultos, el ritmo del juego alcanza cotas expertas en su fase final, obligando al jugador a tener toda su atención puesta en los ajustados obstáculos y peliagudos enemigos que castigan cada traspié con los controles, que en Vita son directamente magníficos y más que precisos.
Además de eso, cualquiera podrá disfrutar de su espectacular puesta en escena audiovisual, de sus ingeniosos personajes, sus bellos paisajes y de su capacidad permanente de sorprender gracias a su estética e inspirado diseño. Su paso por Vita no ha podido ser más afortunado, pues las cualidades de su pantalla son perfectas para el colorido espectáculo que ofrecieron Michel Ancel y su equipo hace tres meses en sobremesa, es un port idóneo. Sobre si es recomendable habiendo jugado a las versiones de consola, la respuesta debería ser "no", puesto que es una conversión prácticamente idéntica, con algunos extras en forma de secretos y con el modo de competición fantasma, pero sin el modo cooperativo, lo que hace que las diferencias sean mínimas y que el interés sea, cuanto menos, limitado salvo que se quiera volver a disfrutar del juego en formato portátil. Pero, asumiendo que no se haya jugado a las versiones originales, Rayman Origins se convierte por derecho propio en uno de los mejores juegos del lanzamiento de la consola de Sony, un título de enorme calidad y único en su especie que luce de maravilla en la nueva plataforma, una pequeña joya que nadie se debería perder. Y menos a un precio por debajo del estándar que tendrán los Triples A de la recién nacida.
Excelente
Un título referente en su género, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutarás de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en clásico con el paso de los años. Cómpralo sin pestañear.