SSX, Impresiones
Nos desplazamos hasta Barcelona para descubrir las últimas novedades de la próxima entrega de la franquicia SSX, que debuta en PlayStation 3 y Xbox 360 con toda la espectacularidad y diversión que merece la saga. Carreras cargadas de adrenalina, movimientos arriesgados y un fuerte componente online nos esperan en las montañas más altas del planeta.
Nos desplazamos hasta Barcelona para descubrir las últimas novedades de la próxima entrega de la franquicia SSX, que debuta en PlayStation 3 y Xbox 360 con toda la espectacularidad y diversión que merece la saga. Carreras cargadas de adrenalina, movimientos arriesgados y un fuerte componente online nos esperan en las montañas más altas del planeta.
Desde el debut del primer tráiler de este nuevo SSX hace ya algo más de un año, tanto los fans de la franquicia como los jugadores poco habituados a los títulos de snow han estado preguntándose qué novedades aportaría esta nueva entrega a un género con poco margen de originalidad. Y es que las imágenes mostradas tiempo atrás delataban un estilo cinematográfico y un realismo poco habituales en la saga; tanto fue así que los seguidores de las anteriores entregas se preguntaban donde habían ido a parar los famosos tricky moves y los efectos de luz made in SSX. Pues bien, estad tranquilos; tras las primeras horas a los mandos de este nuevo SSX, podemos decir que la esencia de la saga permanece intacta e incluso se han potenciado aprovechando las características técnicas de las consolas de Sony y Microsoft.
Los productores de este nuevo SSX nos aseguran que desde EA Sports han querido dar a la franquicia un soplo de aire fresco, eso sí, sin perder ni un ápice de personalidad. Son conscientes de que los fans de SSX no buscan ni realismo ni simulación; la diversión sin complicaciones debe ser el pilar fundamental del título y tras los primeros descensos podemos decir que así ha sido. El juego se basa en tres características principales: la exploración de un mundo grande y complejo, el entretenimiento puro y duro y una comunidad de usuarios permanentemente conectada y competitiva. Tal como aseguran los chicos de EA Canadá, 'SSX no es sólo un juego de snow. Es un juego de carreras, un juego arcade y un juego de acción, todo en un mismo disco'. Tal afirmación no puede ser más contundente.
El objetivo ha sido aunar lo mejor de las anteriores entregas de la franquicia; así, este nuevo SSX recoge lo mejor de SSX Tricky -aparecido en PlayStation 2, Xbox y GameCube en 2002- y SSX 3 -lanzado el siguiente año para los mismos sistemas-, para llevarlo a un nuevo contexto de mundo masivo. En su día, el hardware disponible no permitía lo que sí se ha conseguido con las plataformas actuales; ahora, tenemos a nuestro alcance pistas de descenso de un tamaño considerable, con multitud de caminos por escoger, llenas de elementos como rampas, salientes, árboles, edificios, cables y un largo etcétera. Todo ello mostrado en un interface muy atractivo, donde podemos acceder a los sistemas montañosos más importantes del mundo girando el planeta Tierra.
Los números de SSX son espectaculares; tenemos 9 cordilleras -como los Alpes, el Himalaya, el Kilimanjaro, Siberia o Alaska, entre otros- con hasta 29 montañas diferentes. Dentro de cada sistema encontramos los diferentes eventos a superar, hasta un total de 153; vamos, que tenemos carreras y desafíos para aburrir. Las pruebas de dividen en carreras, donde debemos llegar los primeros entre cuatro jugadores, desafíos tricky moves, donde debemos conseguir la puntuación más alta con nuestros mejores trucos, y supervivencia, donde deberemos superar retos especiales scriptados como aludes o desprendimientos. Todo parece indicar que los modos más atractivos serán los dos primeros, dejando el tercero en un segundo plano.
Además, también tenemos los Deadly Descents, pruebas específicas para un sólo jugador donde deberemos marcar el mejor tiempo de descenso; tuvimos la posibilidad de probar una de estas mortales pruebas, donde debíamos bajar por un precipicio lleno de árboles sin perecer en el intento. Una barra de armadura y otra de salud nos informaba en todo momento de nuestro estado. Por otro lado, el componente online, en favor de la comunidad de usuarios y potenciando la competitividad, será un factor clave en esta nueva entrega de SSX. Los desarrolladores han contado con la experiencia y el consejo de los chicos de Criterion, creadores del exitoso AutoLog de Need for Speed Hot Pursuit; así, RiderNet nos ofrece retos contra otros jugadores, nos permite quedar con nuestros amigos, consultar las clasificaciones online de todo el mundo y subir nuestras propias actuaciones a la red a modo de corredores fantasma, así como cargar los de otros jugadores para tratar de superar sus récords. Además, y gracias a un sencillo editor, podemos crear eventos sobre las pistas del juego, beneficiando a la comunidad de jugadores.
El número de personajes se eleva hasta la docena, algunos de ellos sacados de títulos anteriores, junto a otros que debutan en la saga. A medida que vayamos jugando -ya sea en solitario u online- nuestro rider irá ganando puntos de experiencia; el aumento de nivel nos permitirá acceder a nuevo equipamiento como prendas de ropa, accesorios o tablas de snow. Según la prenda que escojamos para nuestro personaje -de entre una gran variedad- ganaremos habilidades y perderemos otras, a modo de perks. Asimismo, las tablas presentarán todo tipo de características que nos permitirán mejorar elementos como la velocidad, la agilidad o la capacidad de realizar todo tipo de tricks. Los diseños de ropa y tablas siguen el estilo de la franquicia, con un aire cartoon muy característico y atractivo.
El título no contará con editor de personajes, aunque los desarrolladores aseguran que si hay una demanda clara entre los fans, quizás se incluya en una posible futura entrega. A nivel técnico SSX no destaca especialmente; no podemos negar que es vistoso, con buenos efectos y sin mostrar apenas fallos gráficos como popping o carga tardía de texturas, pero queda lejos de otras novedades más refinadas en este aspecto. El comportamiento de la nieve no es para nada novedoso, así como el uso general de las texturas aplicada al juego. Aun así, SSX utiliza una versión evolucionada del motor gráfico usado en títulos de la compañía como Fight Night Champion, además de valerse del sistema de animaciones de FIFA 12 o Battlefield 3, algo que otorga al usuario cierta confianza.
A nivel de jugabilidad ofrece lo que se espera de una franquicia como SSX: diversión, acción y una adaptación a los mandos intuitiva, pero que necesita de mucha práctica para sacar partido a todas sus opciones. Con el stick derecho podemos hacer todo tipo de diabluras con la tabla y a medida que vayamos subiendo de nivel las habilidades de nuestro personaje serán mayores y más complejas; tras unas cuantas horas de juego los combos más espectaculares están asegurados. Completando trucos subiremos la barra de aceleración, un elemento indispensable para ponernos en cabeza y llegar a las rampas con la suficiente velocidad. También podremos rebobinar el tiempo si fallamos una serie de combos o nos quedamos atascados, aunque nuestros rivales seguirán la carrera y perderemos la puntuación conseguida en esa sección.
Falta muy poco para que SSX llegue a nuestras tiendas; grandes dosis de adrenalina para los descensos más espectaculares con nuestras tablas de snowboard. Todo parece indicar que el estreno de la franquicia en PlayStation 3 y Xbox 360 mantendrá el nivel de tiempos pasados, con un nivel técnico atractivo, una jugabilidad accesible -aunque desafiante si pretendemos dominarla por completo- y una vertiente online más que prometedora, con el sistema RiderNet como verdadero protagonista. La estética vanguardista e inconformista de la saga sigue intacta, así como su particular estilo, con una banda sonora llena de temas indie y hip-hop; una delicia para los amantes de las últimas tendencias. No perdáis la estela de los riders de SSX, prometen fuertes emociones a temperaturas bajo cero.