Sorcery
Hechicería en nuestras propias manos es lo que promete el concepto de Sorcery, la nueva apuesta de Sony de aventuras y acción para el sensor Move en la que esta vez controlaremos a un temerario aprendiz de mago que está a punto de hundir el mundo en la Oscuridad
"It's a Kind of Magic"
Hechicería. Una sola palabra con poder suficiente para evocar universos enteros de magos, dragones, guerreros, criaturas y reinos encantados que continúan alimentando el imaginario colectivo. Incontables son los juegos que nos han permitido encarnar a poderosos hechiceros bajo el control de nuestro pad. Pero ahora, con las posibilidades de los nuevos sensores de movimiento, la oportunidad de lanzar un hechizo como si tuviéramos una varita mágica en la mano es más tangible que nunca. Y eso es lo que nos prometió Sorcery en su debut durante el E3 2010, en el que solamente el gesto de beber una pócima simulando el movimiento mediante Move granjeó el aplauso de los medios presentes en la conferencia de Sony.
Pero, como si de la maldición de un poderoso nigromante se tratase, Sorcery desapareció de la faz del sector. Nadie sabía a ciencia cierta qué le había ocurrido a ese juego en el que encarnábamos a un aprendiz de hechicero, mientras combatíamos por mazmorras de enemigos. Y en un año en el que han resurgido títulos que se creían ya cancelados como I Am Alive o Dead Island, Sorcery ha salido de nuevo a la luz, mostrando un renovado aspecto visual, más alejado de la estética infantil de su debut. Coged vuestro libro de las sombras, caballeros, pues vamos a adentrarnos en la magia y la espada.
Mi Nombre es Finn
Conozcamos a Finn, impetuoso aprendiz de mago al que su genio le tiene siempre metido en más líos de los que puede ocuparse. Y esta vez ha sido peor, ya que, tras ser retado por la gata de su maestro, Erline, Finn se ha adentrado en el reino de los muertos, desatando a la Reina de la Pesadilla y dejando al mundo a su merced. Ahora será tarea de Finn y nuestra el derrotar a las huestes de la Reina, cuidando también de Erline, animal parlante importante también dentro de la trama del juego, el cual nos llevará por cinco mundos distintos como el de los Muertos, en el que combatiremos contra feroces Banshees, el Bosque de las Hadas o la Encrucijada sin fin.
Huyendo del esquema de juego sobre raíles, en Sorcery tendremos el control directo de Finn, moviéndolo en 3ª persona con el stick (y una cámara fija detrás del personaje) mientras atacamos con la varita. Move es la auténtica razón de ser de este título, y para ello se ha cuidado mucho su implementación. Un golpe seco hacia delante activará el hechizo más básico, Rayo, el cual puede ser dirigido al punto del escenario al que queramos que vaya, sorteando incluso elementos en su camino al lanzar un rayo curvado. Y un gesto en horizontal apartará cualquier obstáculo frente a nosotros. Pero la gracia del juego radica también en la combinación de los varios hechizos que podemos lanzar.
"La varita escoge al mago"
De esta manera, tras desplegar una muralla de fuego, si usamos Viento crearemos uno de los conjuros más potentes: el Tornado de Fuego (Firenado). Pero también podemos ser más imaginativos y crear un tornado, atrapar a un enemigo, y lanzarlo -ya que podemos controlar la dirección del remolino- contra una muralla de fuego que el Firenado sea creado. O también podemos conjurar la susodicha muralla, enviar Rayos a través de ella para que se conviertan en rayos de fuego y quemen al enemigo, y luego lanzarle un hechizo de viento para sumergirlo en un Firenado. A las posibilidades de combinación hay que sumarles hechizos de hielo con la habilidad de congelar y conjuros que ralentizarán a las huestes de la Reina. Aunque muchos de los combates menores pueden terminarse solamente lanzando rayos una y otra vez, el sistema de lucha de Sorcery está pensado para investigar las distintas posibilidades que tal o cual combinación de conjuros podrían lograr.
De cara a facilitar su aprendizaje y hacer que la experiencia de juego sea lo más fluida posible, los gestos para activar los conjuros se ha intentado que sean lo más naturales posibles. Tras abrir la interfaz de hechizos, rotando Move en el sentido de las agujas del reloj activaremos Fuego; en el sentido contrario Hielo. Y siguiendo las agujas pero apuntando el sensor hacia arriba, Viento. Lanzar una muralla de fuego solamente requerirá que trazemos una línea horizontal una vez hayamos escogido el conjuro y la bola del sensor muestre su color correspondiente. Un movimiento circular abrirá objetos como cofres. Y a la hora de tomarnos una poción, tendremos que activarla, mezclarla hasta que la bola del sensor adquiera el color adecuado y hacer el gesto de beberla.
Pero no todo será conjurar y lanzar, ya que los cinco mundos que atravesaremos también nos retarán a resolver distintos puzles para descansar un poco de tanta intensidad, aunque no de una dificultad muy elevada, siendo la mayoría de origen físico y basándose en la obtención/colocación de tal o cual objeto. Sorcery contendrá además un sistema de alquimia, por el que podremos mezclar los ingredientes mágicos que vayamos encontrando en nuestra quest particular, para ir obteniendo nuevas pociones -alrededor de 56- que aumentarán los atributos de Finn, como su salud, la fuerza de su conjuro de Hielo o la resistencia de su escudo.
"Hacia las estrellas, Bowen, hacia las estrellas"
Visualmente quizás es donde se note el cambio que el título ha sufrido desde su debut en el E3 2010. El juego presentado bebía de una estética más infantil, cuyo protagonista recordaba vagamente al mítico Simon The Sorcerer. Ahora, el estilo de Sorcery ha pasado a ser un estilo más propio de Dragones y Mazmorras, manteniendo ese tono cartoon irreal, pero con una dirección artística y un look menos infantil. Finn, el protagonista, también ha sido rediseñado, aumentando su edad. Tal cambio se debe principalmente a que sus creadores no deseaban un título solamente basado en atravesar mazmorras, por lo que rediseñaron el universo de Sorcery para abrir sus escenarios, los cuales siguen transcurriendo por mazmorras, aunque también por exteriores abiertos como llanuras, templos y castillos en los que se pueden apreciar elementos tanto en el fondo como en el primer plano, componiendo unas localizaciones visualmente llamativas y variadas siempre abiertas, para que observemos elementos como el cielo. Se nota no solo el nuevo estilo y fotografía que caracterizan ahora el look del juego, sino también el aumento de la resolución en las texturas y en los modelados de los personajes, más completos y trabajados, así como los efectos dinámicos -de luz, de partículas- rehechos para los distintos hechizos y sus ejecuciones. Sorcery parte ahora como un título visualmente más ambicioso de lo visto en su debut.
Hechicería
No cabe duda de que Sony está cuidando al máximo la producción de su nuevo juego para el sensor Move. Tras meses y meses sin saber absolutamente nada de él, Sorcery ha resurgido del Limbo virtual en el que estaba con un renovado aspecto visual, y un esquema jugable más ambicioso que se adivina simple y directo para los que no quieran profundizar en él, pero también profundo y que recompensará sin duda a los usuarios que prueben y experimenten con las variadas posibilidades y combinaciones que su sistema de conjuros ofrece. Toda una propuesta para el sensor llena de reinos fantásticos, enemigos surgidos de la oscuridad, hechizos y magia, mucha magia en forma de aventura en 3ª Persona que podría, a tenor de las intenciones de sus creadores, coronarse perfectamente como el mejor juego lanzado hasta la fecha para Move, algo que será comprobado esta misma Primavera, cuando la hechicería de Sorcery despliegue todo su potencial en los circuitos de PlayStation 3.
