Defense of the Ancients II
Era imposible augurar que un mapa para Warcraft III iba a desembocar en el origen de un nuevo subgénero de la estrategia y el rol, que a día de hoy cuenta con unos cuantos nuevos representantes. Más extraño habría sido pensar en que vería su propio título lanzado de forma independiente. Sin embargo, el total fue, en esta ocasión, mayor que la suma de las partes.
El mundo del videojuego está repleto de grandes éxitos y victorias, pero algunas de las más representativas pueden llegar desde cualquier parte. Era imposible augurar que un mapa para Warcraft III iba a desembocar en el origen de un nuevo subgénero de la estrategia y el rol, que a día de hoy cuenta con unos cuantos nuevos representantes. Más extraño habría sido pensar en que vería su propio título lanzado de forma independiente. Sin embargo, el total fue, en esta ocasión, mayor que la suma de las partes.
Aunque el anuncio oficial llegó el año pasado, esta Gamescom de 2011 ha sido el escenario elegido para mostrar Dota 2 en todo su esplendor, tal y como los usuarios quieren engatusarse con un título de estas características: retransmitiendo una partida en tiempo real. Por mucha información que se quiera ofrecer, por muchas capturas que se puedan publicar, las verdades acaban siendo más ciertas cuando podemos ver con nuestros propios ojos el resultado final, último paso antes de convertirlas en certezas bajo nuestra propia experiencia a los mandos del juego. Un momento que debería considerarse obligatorio para todos los videojuegos, pero especialmente en los que la jugabilidad depende tanto más de la interacción simultánea con otros jugadores.
Precisamente este auge de los 'Dota-based' o MOBA (Multiplayer Online Battle Arena) es el principal motivo por el que se hacía necesaria una revisión de su original. Las sucesivas ofertas similares han ido refinando aquella primera idea, y la evolución de este estilo de juego ha comenzado a afianzarse bajo unos conceptos que se han estandarizado tras millones de partidas. La entrada de Valve Entertainment fortalece una apuesta que intentará reivindicar su posición entre las alternativas existentes, y su mayor punto a favor es la integración con Steam para la gestión de la comunidad de jugadores. En este sentido, Dota 2 puede dar un salto cualitativo mucho más importante que el debido a la utilización del motor Source, mejorando la experiencia de los usuarios conectados.
Aún así, el traslado de las características de Defense of the Ancients al nuevo entorno no ha sido un procedimiento simple. Se ha aprovechado el momento para incluir nuevas funcionalidades en el mismo, entre las que destacan las que refieren a la iluminación y al sistema de modelado de los tejidos. El uso del motor Source es el responsable de que los nuevos entornos luzcan de manera espectacular, con una definición del terreno de gran calidad. En ese mismo aspecto, se observan mejoras sustanciales tanto en los modelos de los personajes como en los efectos sobre el escenario, que pasan a abarcar un poco más de atención, con marcas y reflejos en el agua cuando cruzamos cualquier charco o ligeros movimientos de la flora a nuestro paso.
Aunque los modelos de los personajes han sido mejorados, sí que existe un problema evidente con ellos: su diseño. Puede que este fuese uno de los requisitos más arriesgados de la apuesta de Valve, y lo apropiado habría sido lo innegablemente imposible: reeditar los personajes de Defense of the Ancients. Por supuesto, esto conlleva sus limitaciones al implicar el uso de ciertos elementos de la licencia de Blizzard, y por ello se decidió la creación de héroes completamente nuevos. Todo se reduce a adaptarse a las novedades, y de hecho hay bastantes añadidos gráficos encaminados en esa dirección: facilitar la diferenciación, a simple vista de los personajes y sus capacidades.
Por ello, si hay un elemento gráfico que haya sido mejorado en extremo es el correspondiente a los efectos asociados al uso de habilidades. Además de lo espectacular de su puesta en escena, es perfectamente posible distinguir el uso de cualquier pericia mediante el rastro que dejará en pantalla, algo muy útil para los jugadores ya que permite identificar rápidamente la forma de juego de los otros usuarios. La traducción directa entre lo que se ve en pantalla y lo que está ocurriendo es vital para poder dar una respuesta adecuada, sobre todo en un título en el que la rapidez de nuestras reacciones y lo adecuado de las mismas es el pilar fundamental del éxito. A primera vista parece que el motor Source ha sentado de maravilla a la secuela de DotA, y eso es algo de agradecer.
La re-estructuración de la interfaz gráfica era tan necesaria como previsible, con el paso de mapa en Warcraft III a juego independiente. Se especializa el entorno del usuario con un aspecto mucho más parecido al que se ha podido ver en juegos como League of Legends, Heroes of Newerth o Bloodline Champions, reduciendo el espacio dedicado a la información a su mínima expresión. Sus ubicaciones en pantalla se distribuyen para entorpecer el juego lo menos posible, aunque respetan la distribución original de la interfaz de Warcraft III, en lo que parece una simplificación de la misma. Puede que en este aspecto se haya pecado en falta de ornamentos, pero no cabe duda de que es efectiva para su menester.
Cualquiera de los puntos que hemos ido citando eran cambios a esperar, que se han llevado a cabo de forma más que correcta, pero el fundamento de Dota 2 radica en la jugabilidad. Ya decíamos que se integra completamente con Steam, y esto debería servir para mejorar la conectividad entre usuarios. De momento, se ha confirmado que no van a existir barreras geográficas, lo que va a permitir que usuarios de distintos continentes puedan compartir la experiencia. Para salvar las numerosas desventajas de esta decisión, entre ellas las diferencias en los tiempos de respuesta con los servidores, Valve se dedica a mejorar su tecnología e infraestructura, añadiendo nuevos servidores intermedios para disminuir la carga y los tiempos de respuesta.
Aún así, los accidentes ocurren, y uno de los grandes males en un MOBA es la desconexión. Una de las primeras características a implementar fue un sistema de reconexión para los usuarios que han perdido momentáneamente la comunicación, y junto con ella la nueva posibilidad de nombrar un sustituto de entre nuestra lista de contactos, por si tenemos que abandonar la partida. Por supuesto, tendrá que tener un nivel parecido al nuestro para evitar que con el reemplazo se obtenga una ventaja sustancial. Por supuesto, también se permitirán usuarios que solamente hagan la función de espectadores durante una partida completa, y es que la visualización de partidas es un entretenimiento innegable en este subgénero.
En cuanto al estilo de juego, la retransmisión del torneo en 'streaming' nos deja con la sensación que todos esperan de una secuela de DotA: dinámico y fluido. Seguimos enfrentando a dos equipos en la defensa de sus correspondientes 'ancients', para lo que es necesario aplicar conocimiento estratégico y habilidad. Cada personaje obteniendo recompensas con la aniquilación de sus oponentes, u obteniendo diversos logros en el juego, y ascenderá de nivel hasta llegar a un máximo de 25. Pero los personajes no se enfrentan únicamente entre ellos, ya que en el mapa encontraremos diversas torres y elementos defensivos, y tropas secundarias o 'creeps' que aparecerán periodicamente.
La experiencia en el nuevo subgénero ha traído consigo el uso de atajos de teclado apropiados para cada acción, lo que mejora la accesibilidad de los usuarios y el manejo tanto para los que se acerquen por primera vez al juego como para los más experimentados. Este control sobre la respuesta de los personajes es uno de los puntos que van a decidir si el título pasa a ser la elección favorita de los asiduos a los MOBA, o si bien acaba aparcado en un rincón. Valve Entertainment ha prometido que se irán añadiendo sucesivas revisiones de las características, en función de lo que se vaya observando conforme evolucione Dota 2, pero sería complicado remediar un bajo acercamiento de los usuarios.
En un momento en el que el género de los MOBA está reinado por League of Legends (la vertiente más accesible del género) y por Heroes of Newerth (la propuesta más aceptada por los expertos y veteranos del primer Dota), Dota 2 parece situarse en estos momentos en un punto intermedio entre ambos. Por lo visto hasta el momento, no es ni tan frenético y rápido como el juego de S2 ni tampoco tan pausado como el de Riot. Aún así, Dota 2 ya ha mostrado en estas primeras partidas del torneo elementos característicos y apreciados por el público más "hardcore" como lo son los courier o las mecánicas "deny". A falta de ver si se terminan implementando elementos que hemos echado en falta en la interfaz de espectador (por el momento, a años luz de la que ofrece hoy en día Heroes of Newerth, y del todo imprescindibles para ganarse el pase de los e-sports y de la aceptación de la comunidad más exigente), todo parece indicar que la propuesta de Dota 2 estará orientada a los jugadores experimentados del género.
Concluyendo, y con lo que se puede ver y se seguirá viendo en el primer torneo de Dota 2, del que tenemos que destacar un primer premio por la cantidad de 1 millón de euros, Dota 2 se presenta como una evolución casi inmediata de Defense of the Ancients, pero con los suficientes cambios como para responder a la evolución del género. Sin embargo, todo el esfuerzo en dotar al juego de un ambiente espectacular puede verse ensombrecido por un descenso de su rendimiento y una excesiva distracción debida a sus efectos gráficos. Tendremos que tenerlo en nuestras manos para dar una opinión más firme al respecto, y es algo que realmente tenemos muchas ganas de hacer.
- Estrategia
El original mod para Warcraft III, DOTA 2, se convierte en juego free to play de estrategia en tiempo real y fantasía en esta segunda entrega apadrinada por Valve para PC. Cuando se trata de variedad de héroes, habilidades y poderosos objetos, DOTA 2 no tiene fin. No hay dos partidas iguales. Cada héroe puede desempeñar varios roles, y hay multitud de objetos para ayudar a satisfacer las necesidades de cada partida. Dota no pone límites a tu forma de jugar, te da el poder de expresar tu propio estilo.
