Crysis 2, Impresiones
Tras haber probado una demostración de la campaña individual para Xbox 360 en un reciente "showcase" organizado por Electronic Arts en París, y haber visto las virtudes de la demo multijugador de este esperado título, te contamos nuestras impresiones.
A poco menos de dos meses para el lanzamiento de Crysis 2, la mayor apuesta de Crytek para este primer trimestre del año, repasamos sus principales bazas técnicas, basándonos en una demostración de la campaña individual que pudimos difrutar en un 'showcase' en París organizado por Electronic Arts y en la demo multijugador exclusiva de Xbox Live. Para este propósito, os emplazamos hasta una devastada Nueva York, donde deberemos detener el ataque de una horda alienígena que está causando auténticos estragos en la urbe. Por suerte, contamos con la sofisticada tecnología del Nanosuit 2 para hacerles frente. Observa de lo que es capaz el motor CryEngine 3 en acción.
Empezamos la demostración de la campaña individual para 360, que nos permite apreciar de primera mano como se mueve esta destrozada Nueva York. Nos disponemos a recorrer una zona totalmente devastada, repleta de carreteras destruidas, entramados de túneles y zonas subterráneas. Ante este desolador panorama nos ponemos en marcha. No tardaremos en encontrar a los primeros enemigos, a los que daremos buena cuenta de ellos, siempre recogiendo la munición que encontramos por el camino. Pero no se trata solo de avanzar y disparar, sino que en la primera toma de contacto, vamos a tener que familiarizarnos con las posibilidades que nos ofrece el nanosuit 2, uno de los pilares fundamentales del sistema jugable.
Resulta indispensable utilizar las habilidades sobrehumanas que nos proporciona dicho traje si queremos salir victoriosos en la batalla. Una de ellas es el 'armor mode', al que accedemos presionando LB, que nos otorga una fuerza mucho mayor en el combate. El 'stealth mode', que activamos pulsando RB, nos hace prácticamente invisibles, siendo muy apto para tratar de pasar desapercibidos, pudiendo atacar a nuestros enemigos por la espalda. Estas habilidades estarán disponibles por un tiempo limitado transcurrido el cual, deberemos esperar a que se recarguen. La nanovisión, a modo de visor térmico, nos será de ayuda para detectar enemigos. En los saltos también tenemos ciertas ventajas. Si mantenemos pulsado el botón de salto podemos conseguir una altura considerable, pudiéndonos agarrar con facilidad en los salientes. También es posible deslizarnos por el suelo momentáneamente para esquivar ciertas acometidas, esprintando y pulsando seguidamente el botón B. Podremos modificar también las armas a nuestro antojo, cambiando por ejemplo la mirilla de un rifle si lo deseamos o la cadencia de fuego.
Ya hemos sido testigos mediante distintas demostraciones técnicas de la monstruosa capacidad del CryEngine 3. El hecho de adaptar este motor a una plataforma cerrada como puede ser Xbox 360 o PlayStation 3, garantiza un nivel de optimización que consiga sacar a relucir lo mejor de ambas plataformas, y, a tenor de lo visto, hasta ahora no cabe duda de que lo consigue. Entre otras muchas virtudes, la tecnología de Crytek permite elaborados efectos de iluminación mediante el uso de sombras difusas, la creación de un ambiente lumínico gracias a la técnica color grading' y la destrucción procedural de los entornos, que reaccionan rompiéndose acorde a la fuerza del impacto que reciben. Tras lo visto, podemos afirmar que es todo un logro en las consolas actuales teniendo en cuenta que estamos hablando de un hardware que ya cuenta con algunos años a sus espaldas.
Y es que la acción mostrada en pantalla resulta espectacular en todo momento. Destacan unos efectos de partículas altamente detallados, mostrando humo y fuego que se comporta de forma muy realista. Los enemigos muestran una inteligencia muy avanzada y resulta bastante imprevisible conocer de antemano sus reacciones en combate. El escenario resulta bastante extenso y pese a ello, a nivel global, el conjunto se mueve con mucha fluidez y este portento gráfico solo se ve ligeramente empañado por algo de popping apreciable en algunos momentos. No obstante, hay que decir que no resulta demasiado frecuente. La demo termina en el momento que un tsunami arrasa todo a su paso, a nosotros inclusive. Hay que decir que nos deja con ganas de más, mucho más.
Cuando Crysis apareció en 2007 de forma exclusiva para PC, se convirtió en un nuevo estandarte gráfico en compatibles, aunque teníamos que desembolsar una buena cantidad de dinero si queríamos disfrutarlo en su máximo esplendor, siendo prácticamente necesario en la mayoría de los casos renovar nuestra vieja tarjeta gráfica por una de gama alta, inaccesible para muchos bolsillos. El hecho de plantear esta segunda entrega como un proyecto multiplataforma, ha propiciado que en esta ocasión los requisitos mínimos para ejecutarlo en ordenador sean algo más accesibles, por lo que el anuncio de estos ha producido menos impacto que el que supusieron en su momento los de la primera parte.
Así pues, para poder ejecutar lo último de Crytek, vamos a requerir de un ordenador con procesador de un mínimo de dos núcleos, como un Intel Core 2 Duo a 2 Ghz o un Athlon 64x2, también de 2 Ghz, y una tarjeta gráfica similar o superior a una Nvidia 8800 GT con 512Mb. de RAM o una ATI 3850HD con la misma cantidad de memoria. No son unos requisitos demasiado bajos, pero a día de hoy tampoco se antojan para nada inaccesibles. La otra cara de la moneda, es que deberán pasar presumiblemente algunos años para poder disponer de un ordenador y sobre todo, una tarjeta gráfica capaz de mover con soltura el juego a altas resoluciones, con el nivel de detalle al máximo y Antialiasing aplicado.
Si nos centramos en la versión de PC, a grandes rasgos tenemos una edición potenciada a todos los niveles. Si nos vamos a las configuraciones más punteras, podremos disfrutar de unas texturas de alta resolución, acompañadas de iluminación en tiempo real y luz diferida que dotan al conjunto de un gran realismo. El grado de atención aplicado a todos los elementos que conforman el apartado visual resulta abrumador, y el conjunto en movimiento resulta espectacular a todos los niveles. En cierto modo, en el caso que nos ocupa, hay que destacar la escalabilidad del CryEngine 3 a la hora de adaptarse a todo tipo de equipos, siempre que estos cumplan ciertos mínimos.
Crytek es una compañía que destaca por lo bien que consigue exprimir el hardware en el que trabaja, convirtiendo sus títulos en herramientas de benchmark que ponen a prueba a los ordenadores más punteros, no solo en lo que se refiere a materia visual. Los gráficos más avanzados van acompañados de un sistema de físicas muy elaborado, que en conjunción con la destrucción de entornos ofrecen una espectacularidad sin precedentes.
En cuanto a la Inteligencia Artificial de los enemigos, parece que se está poniendo especial énfasis en transmitir una sensación desafiante, donde se evitan los patrones predefinidos para dotar a estos de un comportamiento variable, orgánico. Estos, reaccionan según nuestra actitud, intentando en todo momento adaptarse a la situación, o realizar estrategias para eliminarnos. Ciertamente consigue lo que pretende, no dejándonos descansar para nada. La característica 'hit reaction' pretende representar con realismo el impacto de las balas en las distintas zonas del cuerpo de los alienígenas.
Conociendo ya parte de lo que nos ofrecerá la campaña individual de tan esperado título, desde el pasado 25 en enero y para paliar un poco nuestras ansias, EA y Crytek pusieron a disposición de los usuarios de Xbox 360 con cuenta Gold, una demo del título que permite probar de primera mano parte de las virtudes que atesora su vertiente multijugador. A diferencia de la campaña, ésta ha sido desarrollada por el equipo de Crytek UK, anteriormente conocidos como Free Radical Design, creadores de la saga TimeSplitters. Nos vestimos con el nanosuit para entrar en el campo de batalla y disfrutar de intensos combates donde la tranquilidad brilla por su ausencia.
La demo nos presenta un entorno denominado Skyline', donde combatimos por los devastados tejados de Nueva York en un escenario mayoritariamente exterior, aunque no exento de localizaciones interiores, donde tenemos disponibles dos modos distintos de juego. El primero, Team Instant Action, es una partida deathmatch de seis contra seis jugadores donde gana el primer equipo en conseguir cincuenta bajas. El segundo modo, Crash Site, no lo tendremos disponible desde el inicio, sino que lo desbloquearemos cuando hayamos adquirido suficientes puntos de experiencia para conseguir el sexto rango. En este, debemos capturar bases y evitar que nos las quite el enemigo si queremos ganar la partida. El mapa en sí no es demasiado extenso, por lo que la proximidad entre jugadores está garantizada.
Todas las mecánicas comentadas anteriormente en la demo que pudimos probar en París se mantienen en esta nueva muestra. Sobre el control, podemos decir que resulta bastante intuitivo y bien resuelto dadas las ventajas que nos proporciona el nanosuit y se ha adaptado de la mejor forma posible teniendo como base el uso constante de los modos armor y stealth. Eso sí, algunas acciones como lanzar granadas resultan un tanto aparatosas de llevar a cabo, teniendo que pulsar el pad direccional a la derecha, por lo que resulta un poco engorroso el querer seleccionar una granada mientras nos estamos moviendo, por ejemplo. También encontramos una respuesta de los controles un tanto lenta en algunas ocasiones, que nos obliga a anticiparnos ligeramente si queremos tener posibilidades en combate.
Dichas habilidades proporcionadas por el nanotraje, aplicadas al modo multijugador, provocan una sensación de tensión constante en todo momento, ya que no habrá un instante en que nos sintamos completamente seguros. Se hace bastante recomendable actuar en equipo yendo en grupo en muchas ocasiones para poder sorprender al enemigo en superioridad de condiciones. No será extraño tampoco, morir muchas veces en las primeras partidas debido a la necesidad de acostumbrarnos a el sistema de juego y sus peculiaridades, como el hecho de poder tener un grupo de enemigos camuflado delante nuestro, que aparece de la nada y nos acribilla sin piedad. Sin embargo, tras unas cuantas sesiones empezamos a subir de nivel y con ello, desbloqueamos ciertas facilidades que nos serán de inestimable ayuda para inclinar la balanza a nuestro favor.
La progresión de nuestro personaje la vamos consiguiendo con los puntos de experiencia obtenidos en combate que aumentan nuestras capacidades, siendo posible llegar al nivel diez como límite máximo en esta demostración. A su vez, conseguiremos nuevos módulos para el nanotraje que ampliarán las habilidades y características de este. Estos se dividen en tres vertientes: poder, armadura y sigilo. Así pues, un ejemplo de módulos de poder pueden ser el side pack, que aumenta la capacidad de nuestras armas, o el weapon pro, que mejora su velocidad de recarga. En cuanto a mejoras que afectan a nuestra capacidad de ataque podemos encontrar el Air stomp, un contundente puñetazo contra nuestros enemigos después de un gran salto o la proximity alarm, que nos avisa cuando tenemos rivales cerca. Sobre las ayudas referentes al sigilo, tendremos la posibilidad de eliminar el ruido de nuestros pasos, o identificar a los rivales que estén cerca y pasen a dicho modo.
Aparte de la experiencia que vayamos obteniendo durante los combates, es posible aumentar el nivel de nuestro armamento, así como los módulos del nanotraje. Para mejorar la efectividad, cada elemento susceptible de ser actualizado nos planteará ciertas pruebas a realizar. Así pues, por poner un ejemplo, si queremos mejorar el módulo Air Stomp, deberemos utilizarlo y acabar con 25 enemigos para obtener la primera actualización. Disponemos de cuatro clases principales distintas a escoger, asalto, explorador, francotirador y artillero, cada una con sus propias combinaciones armamentísticas y módulos del nanotraje. Por último, tenemos la clase personalizada, donde podemos definir las citadas características a nuestro antojo.
El apartado técnico de Crysis 2 en la vertiente multijugador está fuera de toda duda y nos demuestra lo que Crytek puede llegar a hacer con su flamante Cryengine, aunque en esta demo la potencia de dicho motor gráfico no llega a su esplendor, y todo parece indicar que habrá algunas diferencias respecto la campaña individual del título y el modo multijugador. El nivel de detalle conseguido en el entorno es muy alto, del que destaca el buen uso de la iluminación, con la utilización de sombras difusas que le dotan de realismo al conjunto y unas texturas de gran resolución, que en algunas ocasiones muestran algo más de popping respecto a la demo que pudimos probar de la campaña individual. Si bien vemos destrucción en los entornos, el no disponer de armas demasiado potentes en esta demo no nos permite ver demasiado la mencionada destrucción procedural de la que hará gala el título en su versión final. En conclusión, queremos remarcar que el nivel gráfico sigue siendo muy alto, pero se distancia un poco de lo visto en la campaña individual, un conjunto espectacular a todos los niveles.
En general, a grandes rasgos podemos considerar satisfactoria esta toma de contacto con el multijugador que ofrece la obra de Crytek. Sin embargo, un número de usuarios hemos sido testigos de algunos errores técnicos que previsiblemente estén solucionados en la versión final del título. En algunas ocasiones hemos sufrido desconexiones fortuitas con la consiguiente pérdida de los progresos obtenidos y distintos problemas con el sonido. Otras veces se nos ha quedado la consola totalmente bloqueada durante los tiempos de carga. No obstante, ya se está trabajando al respecto, por lo que es de suponer que en breve se solucionen estos problemas.
Pese a estos inconvenientes, esta toma de contacto con la demo multijugador nos ha dejado muy buen sabor de boca. Las posibilidades que nos da la combinatoria entre el armor-stealth mode no nos permiten el descanso en lo que dura la partida y aporta una experiencia bastante diferenciada del género. Queda por ver lo que nos ofrece la versión final en cuanto a cantidad de contenidos en el modo multijugador, pero parece que seis modos de juego y doce mapas distintos deberían dar bastante juego.
En definitiva, Crysis 2 quiere llegar fuerte aportando una experiencia que quiere exprimir al máximo el hardware donde esté funcionando. En todo momento se hace patente la ambición de Crytek para conseguir uno de los mejores shooters de todos los tiempos. Luciendo potencia bruta por los cuatro costados, el CryEngine se alza para mostrar su potencial, que parece que no es poco, para enseñarnos una Nueva York devastada por una invasión alienígena con todo lujo de detalles. Si en las versiones de sobremesa ya se llega a un excelente nivel, podemos afirmar con toda seguridad que la edición para compatibles supondrá un nuevo techo técnico a batir, siempre que invirtamos en un ordenador capaz de mover semejante bestia. En poco tiempo podremos probar la versión definitiva, aunque la espera se nos va a hacer un poco larga.
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