Fallout New Vegas: Dead Money
El primero de los contenidos descargables para Fallout: New Vegas llega en exclusiva para Xbox 360. Una aventura de corte más lineal y a la vez más tétrico para narrar los acontecimientos en el mítico casino Sierra Madre, donde dicen hay un gran tesoro escondido. Aunque no sea oro todo lo que reluzca...
Dead Money es el primer contenido descargable -exclusivo para Xbox 360- que llega a Fallout New Vegas. El juego de rol diseñado por Obsidian, cuarta iteración de la franquicia aunque no esté numerada, parece ser que coge el mismo camino que ya tuvo la tercera entrega -creada por Bethesda- en el pasado. Y eso es ampliar su enorme contenido con packs descargables que abran nuevas historias y aventuras dentro del devastado recreado. Contenido de por sí no le falta al juego, aunque si los packs tienen el nivel de alguno de los de Fallout 3, serán más que bienvenidos por la masa de jugadores sin duda. Hablar de New Vegas es hacerlo de uno de los juegos más generosos en términos de contenido que ha aparecido este 2010. Las dudas sobre la conveniencia o no de su salida, teniendo en cuenta la cercanía con Fallout 3, quedaron disipadas viendo las bondades del juego de Obsidian. Con elementos que lo acercan más a los juegos iniciales, primera y segunda parte, y con una jugabilidad que varía en algunos factores, como el modo hardcore, los personajes y los diálogos o la mejora de las consecuencias en nuestras decisiones. Continuista en el apartado visual, calco básicamente, pero un producto que una vez pasada la primera impresión, tiene su propia personalidad dentro del género y de la franquicia. Y cientos de horas detrás si se quiere explotar al máximo. Por eso, porque es generoso en posibilidades y en contenido, los DLC en un juego como New Vegas acostumbran a verse con otros ojos, ya que es hasta absurdo insinuar que se ha vendido un producto a pedazos. Dead Money es un añadido para aquellos que quieran más, sabiendo que han tenido de todo (y bueno). Naturalmente, están los que esperarán una edición que aglutine todos los contenidos que previsiblemente sacará Obsidian para su vasto proyecto. Pero para los que no quieran esperar, repasamos las cualidades de este primer DLC en el que el reto se impone al contenido en sí. Un inicio algo frío, similar a lo que pasó con el primer descargable de Fallout 3 aunque este sea mejor que el caso de Operation Anchorage (y peor que otros descargables que vinieron posteriormente). Dead Money nos sitúa en el casino de Sierra Madre, una ubicación importante dentro del juego gracias a un suculento tesoro que guarda dentro de sí. Como es habitual, la fórmula para conocerlo está en una señal de radio anónima que nos hará llegar hasta este lugar. Es el momento que, con nuestros propios ojos, descubramos que guarda dentro de sí esta localización; y si puede ser, hacernos con su preciado tesoro. Una aventura que peca de lineal, de dura en muchos momentos y de algunos elementos que pueden echar para atrás a más de uno. Lo primero que destaca de Dead Money se encuentra en el apartado artístico de la localización. La inauguración del nuevo recinto no es tal, y lo que nos encontramos es en un ambiente que poco tiene que ver con el que hemos visto en el post-apocalíptico New Vegas y Fallout 3. Mucho más oscuro y tétrico, con elementos que lo acercan más a un survival horror, lo cierto es que la tensión es uno de los factores que crece una vez estamos en Sierra Madre. Esto va totalmente en consonancia con las trampas y la dureza del DLC, que puede convertir nuestro avance en un auténtico infierno hasta que conseguimos superar con éxito las 5-6 horas que ofrece en total Dead Money. El primer contenido descargable de Obsidian basa su longevidad en la extrema dificultad que tiene. El juego deja al personaje que controlamos virgen en un mundo en el que vamos a morir más de lo que es habitual. Los enemigos que habitan este casino son muy poderosos, nuestras armas para hacerles frente escasas y el avance está lleno de problemas que van en aumento a medida que vamos avanzando en Dead Money. Muchos puntos tóxicos, pocos apoyos con los que contar y un sistema jugable que nos hará repetir una y otra vez distintas situaciones hasta que demos con el camino acertado. Las trampas -como principalmente el collar explosivo que nos acompañará y que nos hará tener que ir con cuidado con hacer lo que nos piden- acaban con nosotros, y el ensayo-error está presente constantemente en el juego. El inicio en sí es una buena muestra de ello. Se nos despoja de todo nuestro inventario, y a cambio tenemos que ir recolectando el arsenal y objetos que vayamos encontrando por el camino. Por desgracia la variedad de estos nuevos añadidos es más bien escaso, y no esperemos encontrar un sinfín de nuevas armas durante el desarrollo de Dead Money porqué no es así. La mezcla es explosiva: enemigos poderosos, arsenal limitado y situaciones que acaban con la muerte si no estamos al tanto. Es la zona más complicada, o una de las tres, de todo New Vegas, algo que puede frustrar por momentos. El entorno tétrico tiene dentro de sí una resolución jugable igual: buscar munición y armas será una constante. Uno de los elementos más a tener en cuenta de este primer descargable es la trama argumental y su desarrollo. Los personajes con los que vamos a interactuar están acorde a dos conceptos: la grandeza de los diálogos y personalidad que Obsidian dota a sus personajes y al estilo que ofrece Dead Money, tan tétrico y horroroso. Las conversaciones, el estado de los NPC y sus problemas, además de la necesidad que tenemos para salir de la trampa en la que nos hemos metido, hacen que el producto gane muchos enteros. Ya que jugablemente no es donde más destaca. Y es que el avance en Dead Money está bastante guiado. No hay mucho que descubrir en Sierra Madre más allá de las misiones, todas enlazadas entre ellas hasta llegar al objetivo final de escapar con vida de allí y acabar con esta pesadilla, por lo que en lo que mecánica de juego se refiere este DLC no avanza, más bien al contrario en muchos momentos, en lo que ofrece el juego original. Conseguir más niveles de experiencia (cinco) y descubrir otra manera de vivir Fallout, cercano al survival horror, son sus principales bazas. Y la extrema dificultad, no apta para todos los públicos y que tiene picos que no están bien equilibrados por lo complejos que son los nuevos enemigos y las pocas herramientas que tenemos. El resultado final, por lo que hemos podido comprobar, es el de tener un DLC exclusivo para Xbox 360 que aporta poco a nivel jugable pero que amplía la experiencia mediante su ambientación y los personajes. A quien no le interese subir niveles y tenga todavía mucha tela que cortar en New Vegas le puede parecer poco: misiones que acaban siendo aburridas y que no están al nivel de otras del juego original, además de tener algunos contratiempos como la excesiva dificultad. En todo caso, una manera distinta de conocer New Vegas y un mejor inicio en esto de las misiones descargables si se compara con el que tuvo Fallout 3.
Fallout: New Vegas - Dead Money
- RPG
- Acción