Goldeneye 007, Impresiones
Goldeneye es uno de los nombres clave dentro de la industria de los videojuegos. Rare demostró con su shooter en primera persona para Nintendo 64 que este tipo de género, el de los FPS, eran posibles en consolas y de paso mandó un recadito a las compañías que cuando les toca hacer un videojuego basado en una película deciden ir a lo fácil desarrollando de cualquier manera los juegos. Después de rumores sobre posibles remakes en consolas de Microsoft o en Nintendo, la compañía nipona recibirá una revisión de este gran clásico el próximo mes de noviembre. Estando como está a la vuelta de la esquina, recopilamos los últimos datos sobre el proyecto de Activision y Eurocom para Wii.
Han pasado muchos años desde que Rare diese ese golpe encima de la mesa con Goldeneye. Jugabilidad perfectamente adaptada al mando de Nintendo 64, un avance y desarrollo de juego que no se basaba simplemente en acabar con todo ser viviente, sino que pedía una serie de objetivos al jugador para completar con éxito las misiones -en niveles de dificultad mayor había más tareas que realizar- y que ofrecía, a cambio, distintas maneras de afrontar cada uno de los nueve capítulos (siete basados en la película y dos extra con otros enemigos conocidos del universo James Bond). Las animaciones de las muertes de los enemigos, la variedad de armas y cachivaches -un arsenal de 16 pistolas, metralletas y otros junto a cinco accesorios como tipos de minas y granadas- y el adictivo multijugador a pantalla partida sumaron para encumbrarlo en lo más alto. Activision respetará algunas cosas, aunque parece ser que habrá muchos cambios.
Nada de remake, más bien reinterpretación. Dejando a un lado el ya conocido anuncio de que Daniel Craig, actual James Bond en el cine, sustituye en voz y aspecto a Pierce Brosnan, lo cierto es que los jugadores que adquieran este Goldeneye 007 se encontrarán con un diseño de niveles y un guión que no sigue a pies juntillas ni lo visto en la película ni tampoco lo que creó Rare hace más de una década para Nintendo 64. Han cambiado algunos diseños de niveles, así como también se han añadido otros que aumentan la experiencia Goldeneye más allá de los siete capítulos -con sus respectivas partes- con los que contaba la obra original. Entre uno de ellos, la misión del tanque con la que jugábamos la fase de las calles' en el episodio sexto: San Petersburgo.
Las laberínticas calles de la ciudad rusa eran uno de los principales escollos de James Bond cuando iba a lomos de un enorme tanque. Hablábamos con Valentín Zuvoksy, que nos daba más tiempo para acabar esa misión (6 minutos) y empezábamos la persecución del general Ourumov, que había capturado a Natalya. Este mismo escenario es el inicial para San Petersburgo, omitiendo tal vez -faltará confirmarlo in situ- la zona del parque de las estatuas, en la nueva revisión para Wii. Donde dicho sea de paso, el tanque tiene una presencia más importante que en Nintendo 64.
De momento, lo que ha mostrado Eurocom es un escenario con muchos más tiroteos y problemas para el agente secreto. El tanque no tendrá un trazado normal por las calles, sino que se encontrará con todo tipo de enemigos en helicópteros que complican más las cosas que los simples soldados rasos. El objetivo, como en el juego original, fraguar con éxito la persecución de marras. Eso sí, con mejoras como el escenario destruible debido a los impactos del vehículo o con conversaciones en directo del mismo James Bond. El avance es todo un espectáculo pirotécnico gracias a los misiles con sistema de apuntado y la posibilidad de pasar por encima de cualquier elemento que esté en pantalla, como runas u otros coches.
Los emplazamientos parece ser que también van a ser variables, y si en San Petersburgo vamos a ver otra parte de esta gran ciudad distinta a lo visto hace una década, lo mismo pasará en la Jungla. Ubicada en Cuba, última misión del juego original, donde debíamos acabar con Xenia, en esta ocasión la jungla se va hasta África para adaptarse al nuevo protagonista. Y es que el hecho que David Craig sea la cara -aunque poco la veamos siendo un FPS- del nuevo Goldeneye significa que algunas cosas también se tienen que cambiar para adaptarlo al contexto actual. De hecho, faltará ver si Xenia está, ya que se ha confirmado que otro personaje, Boris, no hará acto de presencia en el juego.
A falta de conocer más detalles jugables con James Bond bajo nuestro control, y no con el tanque de por medio, lo cierto es que uno de los elementos que más preocupaba entre los fans de la entrega original era el sistema de vida de esta revisión. Ya se anunció que el agente secreto tendría regeneración automática, algo que a pesar de la insistencia de muchas compañías en instaurarlo en sus juegos, no acaba de cuadrar en productos con un toque más real como podría ser este juego o los Call of Duty. Por suerte, el modo de juego más complicado de este nuevo Goldeneye, conocido como 007 classsic, permitirá jugar como antaño: con nuestra barra de vida, la posibilidad de enfundarnos un chaleco que nos dé vitalidad extra y, en caso de pasarlo mal, buscar objetos que nos curen o nos protejan. Tal y como era antes.
Es de suponer que las misiones y los cachivaches estarán a la orden del día. Y actualizados. Bond cambiará, o complementará, su reloj multifunción de antaño (láser para abrir cerraduuras, imán para atraer objetos, etc.- por un teléfono que tendrá distintas funciones, como escanear, piratear cerraduras o comunicarse con compañeros. Ya no hará falta el decodificador, analizador de llaves y demás objetos que Q estuvo entregando a Bond hace más de diez años. El teléfono multifunción se encargará de que el agente no se acuerde de todos estos artilugios extra que le iban cayendo del cielo cada dos por tres según las necesidades.
Otra de las cifras destacadas de este nuevo proyecto es el subidón en el número de armas disponibles. De las 16 ya mencionadas pasaremos a más de 25, y todo ello estará sujeto a diversos tipos de control para adaptarse a cada jugador. Podremos apostar por el wiimote y nunchuck para meternos de lleno en el control que ofrece Wii, o jugar con los mandos clásicos compatibles con la consola. En Activision no se han olvidado del multijugador a pantalla partida, un clásico que hizo eterno el juego y que ya no se lleva demasiado esta generación. Estará, de la misma manera que habrá modo online con rankings, subida de experiencia y demás parámetros que tan bien funcionan en los juegos de la compañía creadora de Call of Duty.
Gráficamente muestra menos dudas que al principio. Aunque es cierto que el comportamiento de los personajes es remarcable, se han visto escenarios demasiado vacíos y faltos de detalle, así. Faltará ver si el juego sigue mejorando en este apartado, porque desde las primeras imágenes hasta ahora Goldeneye sólo ha hecho que mejorar a nivel visual.
Actualización: Modo multijugador
La parte esencial del primer Goldeneye de Nintendo 64 residía en su modo para cuatro jugadores en pantalla partida. Parece ser que Activision ha querido mantener este pilar para el nuevo título y ha creado un modo igual de divertido, cargado de opciones para personalizar las partidas, muchos escenarios y mecánicas distintas; y una sensación de déjà vu permanente. A grandes rasgos y casi con total seguridad, este modo será el más popular en este nuevo 007 para Wii, como ya fue en su día. Y es que Eurocom ha querido que así sea, pues se nota mucho el mimo en ello.
Con nada menos que 17 modalidades de juego multijugador local con modificaciones de partida, Goldeneye pretende no aburrir en meses si lo practicamos en compañía de otros tres amigos. Además de los tradicionales deathmatch, por equipos o capturar la bandera, nuevas y divertidas mecánicas se dan cita en esta revisión. Por mencionar algunos de los que más nos han gustado, esta "La pistola de oro", donde todos los jugadores lucharán por arrebatarse una pistola que mata de un tiro; miniaturas, donde todos serán pequeños y no podrán saltar; partidas con sólo dos muertes, con granadas que rebotan muchísimo o se quedan pegadas al cuerpo; un modo Venganza donde tras morir haremos más daño a quien nos mató; posibilidad de evitar el "campeo" haciendo que explote quien permanezca unos segundos sin moverse de su posición, o un modo paintball.
En cuanto a los escenarios, armas y personajes disponibles, habrá un sinfín de todos ellos, algunos retro y otros nuevos, de la licencia 007. Los escenarios no son especialmente grandes -para hacer más frenéticas las partidas multijugador, nos explicaba Dawn Pinkney, productora del juego- y tienen zonas de pasillos y tramos más abiertos, con tubos, escaleras, desniveles, cajas donde buscar cobertura... En cuanto a los personajes, 40 en total y que ir desbloqueando, todos serán viejos y nuevos conocidos de la saga Bond. Las armas y cachivaches están muy bien diferenciados entre sí y tienen usos muy distintos. Lo mismo ocurre con las granadas, que habrá que saber emplearlas y no se podrá ir "a lo loco" con ellas.
El control con el Mando Clásico de Wii también recuerda mucho al de Nintendo 64, con casi todos los botones en la misma posición. Es cómodo aunque se hace un pelín tosco en determinadas situaciones y a día de hoy se le nota demasiado el paso del tiempo y que ya hemos probado manejos mejores en consolas. Lo mismo ocurre con el mando de GameCube, también compatible y que funciona muy bien. Con Wiimote y Nunchuck la experiencia gana mucho aunque exigirá maestría y mucha práctica. Este sistema es sin duda el más preciso y funciona francamente bien, pero habrá que hacerse con él durante muchas horas.
| Dawn Pinkney nos retó a una partida en el mapa "Station" |
Sobre la modalidad online para hasta 8 jugadores, diremos que Goldeneye también ofrecerá un servicio pocas veces visto en Nintendo Wii. De nuevo varios modos, multitud de personajes y mapas, rankings y galardones tras cada partida, pudiendo comprobar quién ha disparado más veces a la cabeza, quién desde más lejos o qué arma ha dado más juego. Estas estadísticas llamadas Galardones también estarán en el modo local a pantalla dividida
Como viene siendo habitual, gráficamente los modos multijugador bajan el nivel visual de la experiencia monojugador. Los escenarios están demasiado vacíos, apenas hay objetos destructibles ni detalles, o no hay efectos de luces reseñables. Todo es sobrio gráficamente, correctísimo, pero para nada espectacular. Por suerte, el juego parece divertidísimo en sus modos multijugador y Campaña, por lo que los usuarios de Nintendo Wii no deben perderlo de vista, mucho menos los nostálgicos de los 64 bits.
