Llega a nuestras fronteras un título que tiene un claro objetivo: competir frente a frente con la franquicia UFC de THQ. La apuesta de EA Tiburon nos permite disfrutar de esta salvaje disciplina, las Artes Marciales Mixtas, una práctica que combina distintos estilos de combate uniendo golpes y lucha tanto de pie como en el suelo. Buscando el máximo realismo posible, deberemos 'sobrevivir' a duros combates, que nos pondrán a prueba en un intercambio constante de puñetazos, patadas, derribos y luxaciones.
El desarrollo de EA Sports MMA no ha estado exento de controversia. Dana White, presidente de la UFC, llegó a amenazar a los luchadores que se prestasen a aparecer en el título de EA, debido a problemas acontecidos en el pasado. Según él, antes de que THQ empezase a lanzarse en esta disciplina creando la franquicia UFC, había estado negociando con EA para la creación de un título basado en este deporte. La respuesta por parte del gigante norteamericano fue que no era un deporte real, y no les interesaba crear un videojuego al respecto. En vista del éxito obtenido por la apuesta de THQ, EA se replanteó esta situación, que acabó desembocando en la creación de este juego. Dado que la UFC no tiene que ver nada en este título, la organización más representativa que encontraremos es Strikeforce, aunque se nos permite escoger distintas reglas de juego a la hora de disputar los combates.
El modo carrera es donde se concentra parte del grueso del título, teniendo la posibilidad de crear un luchador desde cero utilizando un editor bastante completo en cuanto a opciones de personalización. Disponemos de una variedad de parámetros modificables para adaptar el físico a nuestras preferencias, con la opción añadida de utilizar nuestra propia foto para crear la cara del personaje. Más allá del plano físico, debemos escoger también la especialidad que practica nuestro luchador, para determinar sus puntos fuertes y débiles. Por último, definiremos su personalidad, pudiendo seleccionar distintos temas musicales para su entrada en el ring, y distintas animaciones y poses predefinidas que realizar dependiendo de la situación en que se encuentre. Será difícil entonces crear dos luchadores de iguales características, tanto físicas como psicológicas, en un editor que sin ofrecer unas posibilidades extraordinarias, cumple perfectamente con su cometido.
Tanto el sistema jugable que se ha implementado para la lucha en el suelo como el equilibrio conseguido en éste, conforman un apartado muy satisfactorio y gratificante a partes iguales. Por otra parte, pese a que la curva de dificultad está bastante conseguida, según avanzamos en el modo carrera, a veces encontramos que nuestros rivales tienden a responder con una precisión pasmosa, demasiada, que hace que pensemos en algunos momentos del combate que la CPU tiene un control absoluto de todo y que nos puede derrotar cuando le plazca.
Todo este tratamiento tan realista viene acompañado por un elaborado sistema de iluminación, que ayudará a remarcar el detalle de los modelados del que hacen gala los luchadores. Mención especial a los brillos que provoca a la piel a causa del sudor, y las sombras que se proyectan al suelo, más o menos difusas dependiendo de la posición respecto a la luz. El público que nos acompaña, lejos de ser texturas planas, son también modelados poligonales, con distintas animaciones aplicadas. Éstos, gozan de un buen nivel de detalle para ser meros elementos secundarios, factor que refuerza aún más la ambientación. Eso sí, percibiremos rápidamente algo de repetición entre el público, por lo que algo más de variedad no le hubiese venido mal, aunque fuese cambiar el color de la ropa tan solo. Todo este conjunto, se mueve a sesenta fotogramas constantes por segundo muy estables durante los combates. No en vano, concentrar toda la potencia del hardware en el ring y dos luchadores permite conjugar una gran fuerza visual con una fluidez elogiable, como suele ser habitual en los juegos de lucha.
Desgraciadamente, si en unos aspectos el título de EA apunta maneras, no se puede decir lo mismo en otros apartados que se nos antojan menos trabajados. Las animaciones, aún siendo correctas en términos globales, resultan algo robóticas en algunas ocasiones, y las transiciones entre distintos movimientos a veces no son demasiado fluidas. Otro punto negativo es que algunos golpes no llegan a reflejar la contundencia que deberían, disminuyendo el impacto visual de este duro deporte. No se puede decir lo mismo de las expresiones faciales de dolor en la cara de los afectados, un aspecto que sí nos satisface. Debido a estos motivos, se hace patente un contraste entre apartados que denotan mucho trabajo, y otros donde no se ha puesto todo el mimo necesario.
8
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.