Lost Planet 2
Caza en compañía
Han pasado diez años desde los acontecimientos de Lost Planet. El mundo conocido como E.D.N. III ha cambiado por completo, y los humanos luchan por facciones mientras la amenaza Akrid crece como nunca. El cambio de tercio de la franqucia llega, sin novedades respecto a la versión consolas, seis meses más tarde en PC.
Lost Planet 2 cogió un rumbo distinto al de su primera parte que no gustó a todo el mundo. La entrega inicial presentaba una aventura principal divertida e intensa, con cierto hilo argumental y una trama interesante que seguir. Acción en solitario donde en cada nivel teníamos que avanzar para salvar un planeta, y una raza, en peligro. La humanidad, al final, lo agradeció. Junto a esto, un multijugador entretenido en el que los variados modos de juego y la presencia de vehículos como robots y demás era un gran añadido. Un juego notable por su propuesta y, sobre todo, por el equilibrio que mosttraba tanto a nivel offline como online.
La versión para PC, además, llegaba con un apartado técnico más que vistoso respecto a las de consolas, pero con problemas de optimización. Unas especificaciones demasiado altas y un framerate que no respondía como debe no ayudaron a un juego que también llegó tarde. Como pasa con este Lost Planet 2. Esta vez, eso sí, parece ser que el trabajo de Capcom en temas de optimización han mejorado -sin llegar ser perfectos como veremos más adelante- y las especificaciones ya no son tan sangrantes como antaño. Su principal problema, seguramente, es que a pesar de detectar el pinchazo con los usuarios, no se haya replanteado la fórmula de alguna manera seis meses más tarde.
El mundo que nos encontramos ya no es un planeta gélido como antes, sino que tendremos la ocasión de movernos por lugares secos como un desierto, húmedos como una jungla o industriales como pueblos habitados. La vida en EDN ha cambiado, y eso permite ver la acción de la primera entrega en lugares de lo más variopintos. Se pierde entidad a favor de una experiencia enfocada al cooperativo y al multijugador, algo que acaba haciendo mella en el resultado final. Aunque lo cierto es que no todo son malas noticias para esta secuela. Ni mucho menos.
A pesar de ser uno de los errores más destacados de la versión de consolas, no ha habido novedades al respecto en este port para compatibles. Los compañeros controlados por la CPU siguen fallando, y la experiencia en solitario no se ha mejorado ni un ápice. Desde ya, queda claro que no es un juego recomendable si no se quiere disfrutar en compañía. Durante el camino, enormes Akrids de dimensiones destacadas, decenas de enemigos que aparecen a la vez y grandes jefes de fase que dejan en pañales a los akrid más temibles de la primera parte. Todo diseñado para rejugar las fases, ganar más puntos, descubrir algunos secretos y conseguir mejores rangos para mejorar a nuestros personajes con nuevos añadidos a la hora de usar el editor -que nos permite, no solo a nivel estético, preparar al personaje para el multijugador.
A todo esto se le añade el multijugador, donde hay cuatro tipos de juego para jugar en igualadas o en partidas de jugador. No hay grandes novedades en este sentido, y tendremos la eliminación individual y por equipos, la batalla por puestos donde tenemos que activar puntos de datos, la recogida de huevos Akrid o el fugitivo, que pretende perseguir y acabar con un grupo enemigo concreto. En este punto, echamos en falta recoger más añadidos seis meses después de la salida de los juegos de consola. Había mapas para descargar disponibles en la versión consola que no están presentes en este juego como se podría esperar a pesar del retraso.
Los elementos de personalización son clave, ya que podemos hacer auténticos personajes extraños en el juego para competir o cooperar en red. Las bases y los elementos de Lost Planet 2 se mantienen sin añadidos. Para entrar más en profundidad sobre lo que ofrece el juego, recomendamos echar un ojo al review que sacamos hace medio año para la versión de Xbox 360 y de Playstation 3, donde queda desgranado con más extensión lo que Capcom preparó para la secuela de esta nueva franquicia en las consolas de sobremesa a principios de este 2010.
Sea cual sea la opción que elijamos para disfrutar del juego, vamos a tener un apartado técnico superior al de Playstation 3 y Xbox 360. No se trata solo de poder usar resoluciones más elevadas que en las versiones de consola, sino en el nivel de detalle, texturas y framerate que ofrece Lost Planet 2 en compatibles. Sin una máquina enormemente potente, podremos ver mayor fluidez, ya que el juego tiene una tasa de framerate superior a los 30 fps, aunque los 60 lo cierto es que no siempre serán constantes. De hecho, es uno de los contratiempos, ya que el framerate bailará un poco según el momento, aunque la optimización en este sentido es mejor que la primera parte.
V-sync, antialias y demás cambios también están disponibles en el juego, preparado para las 3D de Nvidia. La experiencia visual es más que interesante, aunque a veces parezca que lo visto en pantalla a nivel poligonal quede algo corto teniendo en cuenta la excelencia con lo que podemos contemplar todos los elementos (activando al máximo las características nos referimos). Eso sí, si una textura no está bien trabajada, esto no se ha corregido con esta nueva versión, y no escaparán de nosotros algunas paredes planas o hierbas poco detalladas. De la misma manera que a pesar de tener un framerate más sólido, este puede sufrir en algunos momentos concretos aunque no sea como las otras versiones.
A nivel sonoro, Lost Planet 2 llega como acostumbra a hacerlo todos los juegos de Capcom. Voces en inglés y textos en español, con una banda sonora interesante que se adapta a cada situación -más tensa con enemigos finales, frenética con muchos elementos en pantalla, etc-. y efectos de pistolas, explosiones e impactos que cumplen perfectamente con su cometido. Ya en su momento había un trabajo notable en este aspecto y se mantiene para la versión de compatibles que acaba de aparecer en todos los mercados.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.