Estamos en la recta final antes de la salida de los dos títulos al mercado este mismo mes, y después de poder probar ambos juegos en versiones casi finales, hemos recopilado la información sobre las novedades que incluyen a nivel de desarrollo de los partidos. Qué han mejorado con respecto a la versión del año pasado, qué no han conseguido optimizar y qué esperamos que se solvente en la versión final. Sobre cuál es mejor para cada usuario lo tendrá que decidir un mismo, según sus gustos y preferencias. Antes de nuestro veredicto final sobre los dos rivales más encarnizados que recordamos, ponemos las cartas sobre la mesa y resumimos su estado actual. Las cuestiones más profundas sobre modos de juego, la nueva Master League on-line de PES, el Creator Mode de FIFA, o las opciones online se verán en el análisis posterior, aquí nos centraremos en el desarrollo sobre el césped.
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Y es que cualquiera de los dos juegos ha ido mejorando desde estos años pasados, cada uno a su ritmo y cada uno dentro de su filosofía del fútbol. Bien es verdad que el juego de EA Sports ha mejorado de forma notable su primera versión next-gen que veíamos en FIFA 07, donde la parte técnica lastraba la jugabilidad. Ha sido este apartado precisamente el que más ha mejorado desde esa versión de hace 4 años, dando lugar ahora a un título realmente divertido, realista y lleno de posibilidades tanto de control como estratégicas. Decíamos en ese análisis que EA Sports poseía un diamante en bruto al que no se le había sacado nada más que su primera capa de brillo. Bien, el diamante luce ahora en todo su esplendor. No es perfecto, pero eclipsa los destellos de cualquier otro brillante.
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Por que Konami también ha pasado por altibajos. La generación pasada los encumbró al cielo del fútbol virtual, con su recreación más conseguida de un partido 11 contra 11 que se había podido ver hasta el momento. Sin embargo, el paso a la actual generación no les ha sentado realmente bien hasta el momento. Ninguna de las versiones de su Pro Evolution Soccer en Xbox360 o en PS3 han conseguido realmente llegar al nivel que poseían anteriormente en relación a su tiempo, y mucho menos superarlo en ninguno de sus apartados. ¿Las causas? La más evidente es la ausencia de un presupuesto que permita crear un motor gráfico nuevo, con su correspondiente motor de animaciones y físicas acorde al momento actual. Sin embargo, dentro de sus limitaciones técnicas han intentado que los punto débiles que les rodeaban fuesen a menos en cada versión, y la verdad es que sí se notan diferencias claras en su forma de afrontar ciertos aspectos de control y la mecánica de juego.
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En cualquiera de los dos casos vemos que se ha avanzado mucho desde sus primeras versiones de esta generación de consolas hasta el juego que saldra en pocas semanas. Sin embargo, no son perfectos como habíamos comentado, y ninguno se salva de poseer defectos llamativos que se podrían subsanar. Tanto FIFA como PES son dos buenos juegos de futbol, uno con mejoras y posibilidades que el otro no posee, y viceversa. Elegir uno de ellos depende de forma exclusiva de la forma de ver y entender este deporte por cada usuario, y sobre sus gustos y experiencias previas. Lo que no se puede discutir es la actual situación que vivimos actualmente en cuanto a hechos: FIFA posee unos acabados técnicos que afectan a la jugabilidad y al apartado visual que PES no tiene, resultando un juego mas realista en conjunto. ¿Divertido? Eso depende de cada jugador, pero nuestra opinión quedará clara en el posterior análisis, cuando nos hayamos empapado de todas sus posibilidades.
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Veamos ciertos aspectos concretos de cada uno de ellos, cómo los desarrollan y cómo afectan al juego. FIFA parte con ventaja por sus experiencias de estos dos últimos años, pero PES puede regresar con su excelsa jugabilidad en cualquier momento. La prorroga antes de los penaltis del análisis comienza
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Gráficos.- Tanto PES como FIFA han mejorado su aspecto visual con respecto a sus versiones del año pasado. Bien es verdad que las mejoras son mínimas, en aspectos muy concretos y en algunos casos hasta puntuales, pero dan una mejor impresión en pantalla. Podríamos decir que en PES la progresión es mayor que en FIFA, ya que el juego de Konami tenía más margen de mejora que el de EA Sports, y el resultado visto hasta ahora parece indicar esto último.
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PES ha mejorado con respecto a su versión pretérita sobre todo en dos aspectos: la gestión de la cámara y una iluminación más trabajada. Los modelados de los jugadores ya eran bastante buenos en la versión pasada, y en esta ocasión se han pulido más detalles para seguir avanzando en su representación realista. El efecto de lluvia en pantalla se ha mejorado con respecto a años pasados, y los estadios tienen un mejor acabado sin lugar a dudas. La iluminación consigue mejorar la sensación de realismo que se puede ver en las pantallas, con unos sombreados muy bien resueltos. Las celebraciones por su parte siguen siendo bastante mejorables tanto por el diseño de las mismas -los jugadores a veces se mueven sin sentido alguno- como por el apartado técnico (en ocasiones un clipping demasiado llamativo).
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Los jugadores de PES poseen un texturizado que hace realmente llamativos los parecidos faciales de los jugadores más famosos, ayudados por la antes comentada iluminación, aunque sus expresiones son menos conseguidas y dan una sensación algo irreal. Como en FIFA, encontraremos jugadores conocidos que se parecen lo imprescindible, y en algunos casos ni eso. Por otro lado, lo que hemos visto hasta ahora nos ha dejado un buen sabor de boca en los de más apartados, como unos efectos gráficos muy llamativos en las repeticiones, un motion blur muy conseguido que da una sensación de realismo televisivo excelente. Con todo, del apartado técnico cumple en todas sus facetas de forma notable, exceptuando el ya famoso caso de las animaciones ingame, punto verdaderamente flaco de PES en esta generación
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Por su parte, FIFA sigue incidiendo en su ya potente apartado gráfico, mejorando detalles pequeños que aumentan la sensación de realismo. Los cuerpos de los jugadores ahora tienen más variantes, y veremos más modelos distintos que nos servirán para diferenciar bien a jugadores corpulentos o altos -Berbatov, Piqué, Crouch...- de los más ágiles y menudos -Messi, Iniesta, Cazorla...-. Este detalle era realmente esencial que se incluyese de una vez por todas en juego, ya que da más empaque y realismo a las caracterizaciones. No podemos decir lo mismo sin embargo de las cinemáticas, donde seguiremos viendo imágenes tan insólitas como a Xavi siendo casi tan alto como Busquets y otros casos del mismo estilo. Las celebraciones se han aumentado y aparte de las que podemos configurar también aparecerán algunas automáticas si dejamos que los demás jugadores de nuestro equipo nos alcancen para celebrar el gol con nosotros.
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Los estadios mantienen sus buenos acabados, el público parece algo menos detallado que en años pasados, aunque siguen reaccionando a lo que pasa sobre el césped con más o menos efectividad. La iluminación también ha tenido una optimización que mejora la luz ambiental en los partidos con lluvia, aunque ésta tiene un acabado mejorable. Sin embargo, los efectos para mostrarnos el efecto del agua que está sobre el césped se han mejorado algo más, dejándonos imágenes como charcos que salpican cuando nos tiramos a rebañar un balón, o camisetas mojadas en las cinemáticas. En cuanto a la representación facial, seguimos encontrando jugadores realmente 'clavados' a sus homónimos reales con otros que sólo se parecen en el blanco de los ojos. Otro detalle que no se ha mejorado -y va un año más- son las fuentes de texto para los nombres en las camisetas, totalmente irreales en su mayoría por tipo y tamaño.
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Animaciones.- Quizás sea este campo el que mayor diferencia representa entre un juego y otro. Podríamos decir que la clave de la superioridad de FIFA sobre PES se debe a la fluidez de las animaciones y sus variantes. La dinámica de los partidos se ve afectada por este hecho, con unas transiciones mucho más optimizadas en el juego de EA Sports y que le da más realismo al desarrollo de los encuentros. Konami por otra parte ha incrementado en mayor número las nuevas animaciones presentes, pero la falta de potencia del motor no le permite gestionarlas como debería para llegar al nuevo nivel que busca.
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PES en Xbox360 y PS3 no es 'el' PES de la generación pasada por este apartado. No sabemos la causa final, la clave que ha hecho que el realismo que desprendía cada juego de PS2 no se encuentre en las versiones de estas plataformas actuales. Una de las causas parece ser la poca o nula efectividad de las transiciones entre las distintas animaciones, dejando 'pasos en falso' que dan los jugadores desde el final de una animación hasta el inicio de la siguiente, o el retardo en activarse cada una de ellas con respecto al jugador en sí. Por eso vemos jugadores que tardan un mundo en girar sobre su propio eje, cambios de dirección de 90º realmente lentos, y una pesadez casi constante en cualquier arrancada de cualquier jugador. La ausencia de un control en 360º realmente eficaz puede ser uno de los efectos que vienen lastrados por un motor anticuado.
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Con todo lo negativo anteriormente dicho, tenemos que decir que PES 2011 ha mejorado la suavidad de los movimientos de los jugadores. La respuesta al pad es más inmediata, pero notaremos todavía lentitud en la respuesta de los jugadores a ciertos movimientos clave. De todas formas, PES posee algunas de las mejores animaciones que se pueden ver en cualquier juego deportivo actual, y hay movimientos personalizados muy bien reproducidos (la conducción veloz y nerviosa de Robben, las arrancadas de Messi, la postura de Ronaldo al sacar una falta,
). En algunas repeticiones podremos admirar ciertos movimientos como si fuesen reales. Las fintas y regates que se han introducido este año para realizar con el stick son muy buenas, pero tienen el problema antes nombrado de la falta de optimización entre ellas, quedando bastante rara su reproducción en cadena.
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FIFA, al contrario que PES, si por algo ha ganado gran cantidad de seguidores es por el realismo que desprenden sus jugadores en pantalla. La suavidad de sus animaciones, la fluidez entre ellas y la dinámica que presentan los partidos los hace más realistas en su transcurrir. Hay en este caso igualmente más animaciones incluídas, algunas realmente excelentes, consiguiendo mayor empaque todavía y añadiendo un realismo que ya poseía. Los porteros se han mejorado en varios aspectos, sobre todo en las salidas uno contra uno, y mejorando su colocación para evitar las vaselinas. Con todo, se ha conseguido darle un toque de humanidad al fallar en sus reflejos en determinadas ocasiones, o dando la impresión de confiarse en un despeje. El control de 360º ayuda mucho a la fluidez de movimientos, a las recepciones controladas y a darle velocidad al juego cuando se le quiere dar. Encontraremos además animaciones individualizadas para distintos jugadores, dotándolos de una personalidad muy remarcada por sus propias características en los distintos valores de sus apartados.
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Como decíamos, el juego de EA Sports da una mayor sensación de realidad en el transcurso de los partidos por la agilidad con la que se mueven los jugadores, la rapidez de las animaciones y la buena transición entre varias de ellas. Las fintas y regates se suceden con fluidez dependiendo de las órdenes desde el pad, pero no dan la sensación de que, cuando se comete un error, sea por culpa del motor de animaciones, si no que hemos fallado en el tempo o en la realización de la misma. Con todo, en ocasiones veremos movimientos algo extraños o ciertos problemas de continuidad en momentos defensivos, donde podremos hacer controles raros en ocasiones puntuales. Se han mejorado las animaciones de los tiros de larga distancia y la plasticidad a la hora de cabecear, lo que hace un todo casi perfecto en este sentido.
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Físicas.- Quizá deberíamos diferenciar entre la física del balón y las de los jugadores. Si bien PES todavía supera a FIFA en la gestión del movimiento del esférico, no podemos decir lo mismo de la de los cuerpos de los deportistas. FIFA ha mejorado todavía más las luchas entre jugadores y PES sigue apoyándose en un balón casi totalmente real. Sin embargo, las distancias cada día son más pequeñas entre el buen hacer de uno -Konami- y la escalada hacia la calidad del otro -EA Sports-.
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PES posee seguramente la mejor física de balón de los dos juegos, tanto a ras de suelo como por aire. Sin embargo, hay conceptos que todavía se deben de mejorar. En PES2011 la potencia de los tiros resulta un tanto exagerada, ya sean tiros lejanos o desde cerca, sobre todo por la velocidad que alcanza el balón con respecto a la animación correspondiente. Los cabezazos son los mejores que se pueden ver actualmente en cualquiera de los dos juegos, tanto por plasticidad como por realismo de la pelota en su comportamiento. Este año se ha mejorado además la conducción de la pelota pero todavía tiende a quedarse algo parada de forma algo brusca. La gestión del movimiento del esférico en los pases se ha mejorado, dando mayor realismo en su distribución por el campo.
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Sin embargo, la física de los cuerpos en las luchas hombro con hombro o en las entradas a ras de suelo se deberían mejorar. Encontraremos animaciones algo extrañas en el comportamiento de los jugadores cuando se apoyan unos en los otros para coger la posición, y unas caídas que en ocasiones resultan irreales o como poco muy raras. Las luchas aéreas y los forcejeos por coger la posición todavía se pueden mejorar, así como tiene una gran calidad lo logrado en cuanto a reproducción de centros, vaselinas y todo lo que tenga que ver con juego por alto. PES 2011 se sigue apoyando en una pelota cuyo comportamiento es muy bueno, mientras los jugadores necesitan todavía mayor trabajo en la representación de sus interacciones.
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FIFA en cambio posee unos jugadores que se mueven, giran, rotan, amagan, cambian de ritmo o de dirección de forma que sus movimientos muestran un peso y unas inercias más realistas. Las luchas por los centros, por coger la posición o en las cargas de hombro son más variadas, resultan más verosímiles en sus resultados y las caídas son coherentes con los factores que se suceden en pantalla. Las distintas características de los jugadores muestran que la velocidad que llevan les afecta de forma diferente en las frenadas o en los cambios de ritmo dependiendo de su peso y altura. Los saltos al cabecear o al defender también muestran el peso de los jugadores de forma bien visible. En definitiva, el motor de físicas y de colisiones entre los cuerpos funciona perfectamente, y representa de forma más realista las vicisitudes que suceden durante los partidos.
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Por el contrario, la física aplicada a la pelota se puede mejorar todavía más, aunque se nota el buen hacer general en casi cualquier aspecto del movimiento de la misma. Los pases tanto los altos como los que van a ras de hierba se muestran de forma muy realista, así como los tiros de media y larga distancia, algo que se ha mejorado de versiones anteriores por el poco peso que mostraba el balón. Se sigue manteniendo el problema de los centros y los cabezazos, todavía por pulir tanto en su movimiento al centrar como en la poca fuerza que muestran los remates altos en su gran mayoría. Por lo demás, no tienen nada que envidiarle al excelente trabajo que ha realizado Konami con el esférico en su juego, lo cual habla muy bien del resultado actual.
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Jugabilidad.- Esta es la parte más personal de cada juego, a cada usuario le gusta uno de los estilos, y en ocasiones los que juegan a uno de los dos les resulta muy artificial la jugabilidad del otro, o no encuentran la diversión que el otro juego les produce. PES en esta ocasión apuesta por un ritmo más pausado que en anteriores ediciones, quizás condicionado por una lentitud en los movimientos de los jugadores presente todavía en su juego, pero que le beneficia. La inclusión de los pases manuales y los semi-automáticos le da un nuevo aire a su dinámica en los partidos, como la existencia del sistema de regates presente en el stick derecho del mando. No alcanza la fluidez de los PES de la pasada generación, pero las nuevas características pueden ser lo suficientemente importantes para convencer a los fans de la saga. Si mejoran además sus modos online, seguramente sea otro de los bastiones para lograr unas ventas altas.
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FIFA por su parte se sigue apoyando en lo logrado en años anteriores, puliendo detalles que iban quedando por mejorar y optimizando todo lo bueno que ya poseía. El añadido de la opción de poder jugar con el portero en los partidos online en un real 11 contra 11, el nuevo sistema 'personality +' que dota a cada jugador de unas condiciones lo más realistas posibles en cuanto a sus valores en el pase o en el tiro, o una gestión en las luchas cuerpo a cuerpo más trabajadas lo dotan de una profundidad que, aunque ya estaba presente en el juego de 2010 y en el del Mundial recién celebrado, se ha seguido mejorando hasta conseguir un realismo altísimo en casi todos los apartados del juego. Si ya el modo online resultó muy bien el año pasado, no sabemos lo que pueden lograr este año
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Inteligencia Artificial.- Puede que estemos ante el punto flaco de cualquiera de los dos juegos en versiones pasadas. Tanto FIFA como PES en su versión 2010 necesitaban mejorar la respuesta de la I.A. en diferentes conceptos, y esperábamos que este año cualquiera de los dos hubiese hecho los deberes de forma clara. El resultado de lo que hemos visto hasta ahora en estas versiones todavía nos deja con muchas dudas, sobre todo en unos modos tan importantes como el 'Ser una leyenda' y el 'Be a Pro', donde la CPU controla al resto del equipo, y donde se muestran mejor las carencias si las hubiese.
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PES en este caso y por lo que hemos podido ver en los partidos contra la consola posee una IA defensiva de nuestro equipo que todavía tiene mucho trabajo por delante. Los jugadores son propensos a perder la posición, sobre todo por los laterales -error garrafal que se lleva repitiendo desde hace varias versiones y que no se da corregido-, dejando mucho espacio libre para la entrada de los contrarios. En otro sentido, el equipo dirigido por la CPU se mueve de forma muy inteligente, busca los espacios e intenta jugadas variadas y de larga duración de posesión hasta encontrar hueco. Los porteros en esta versión que hemos probado cometen varios errores llamativos e inexplicables, con goles en ocasiones totalmente hilarantes, esperemos que en la edición final se encuentren corregidos y pulidos.
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FIFA posee una IA defensiva más trabajada y efectiva, pero resulta bastante fácil robar la pelota incluso en los niveles altos, dando lugar en ocasiones a situaciones un poco confusas con mucha gente en medio campo, muchos rebotes y sin un dueño del balón claro. En ataque los jugadores se mueven de forma bastante coherente, aunque les falta algo de mordiente a los atacantes para ir por los balones divididos o posicionarse en los 2 contra 1, perdiendo oportunidades claras. En los equipos controlados por la CPU se nota un detalle no presente en la saga hasta ahora, y es que los jugadores del equipo contrario realizan como el usuario fintas de regate (los que realizamos con el stick derecho), igualando la contienda en posibilidades y dándole más viveza al juego. Sus movimientos y patrones de ataque varían dependiendo de nuestro nivel de presión, buscando desmarques o encarar si ven posibilidades. Los porteros responden mejor que en PES, aunque en los 1 contra 1 todavía se pueden mejorar.
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Resumiendo, FIFA está en estos momentos unos puntos por encima de PES por todo lo nombrado anteriormente y por todo lo logrado en estos años pasados, base sobre la que las dos desarrolladoras han trabajado. Quizás la versión final nos traiga alguna sorpresa a modo de optimización de animaciones, mejoras en el motor de colisiones de las luchas por el balón, o una I.A. más pulida y efectiva. Hasta ese momento, en la redacción de Meristation nos decantamos algo mas por el juego de EA Sports, pero Konami parece que este año se ha dormido en los laureles mucho menos que en ediciones pasadas. Puede ser por amor propio, o por que ellos mismos se dan cuenta de que no es el mejor producto que pueden conseguir. Con todo, estos días previos a la salida de los juegos serán realmente vertiginosos mientras probamos sus versiones finales antes de su salida a la venta, y lo ideal seria que pudiesen mirarse a la cara, a la misma altura de calidad. Los más beneficiados seríamos nosotros, los jugadores
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