Tetris Party Deluxe
- PlataformaWii7.5
- GéneroPuzle
- DesarrolladorHudson Soft
- Lanzamiento03/09/2010
- EditorNintendo
Diversión garantizada
Una edición lujosa del descargable que aparecía hace dos años en WiiWare, sin más. La definición no podría ser más sencilla, siguiendo las pautas que marca el estilo de juego de la franquicia que desde hace más de veinte años entretiene a públicos de todas las edades, sin importar la experiencia acumulada en la industria de los videojuegos. La renovación de la misma tiene lugar en Wii con una versión destinada al disfrute multijugador, sin descuidar los elementos característicos made-in-Tetris.
Cuando miramos al pasado y contemplamos la evolución de Tetris a lo largo de las décadas sorprende analizar la aceptación con la que ha sido recibido por el gran público. La esencia de la obra de Alexey Pajitnov se mantiene intacta desde tiempos inmemoriales, lo que a todas luces ha llevado a entender la franquicia como algo más' que con simple' videojuego con el que aprovechar las horas muertas. Fue así como nació su concepto original, con la única idea de hacer que el jugador se encontrase ante un reto cuya superación fuese una mezcla entre el razonamiento y la habilidad de cada jugador. Con el paso del tiempo, como decimos en esta introducción, la idea se ha reforzado. Varias han sido las compañías que han tratado de renovar el concepto original, no siempre con éxito, añadiendo nuevas bifurcaciones al camino impuesto por el genio ruso hace veinte años.
A diferencia de otras ocasiones, el producto que llega esta semana a las estanterías de las tiendas españolas no aparece con motivo de una conmemoración histórica o de algún sonado resurgimiento de la fórmula primigenia. Tetris Party Deluxe es, en primer lugar, una ampliación del arcade que aparecía en la tienda virtual de Nintendo hace poco menos de dos años, con una propuesta calcada a la de esta versión física. ¿Cómo se justifica, por lo tanto, la compra de un videojuego que se puede conseguir a la mitad de precio en un bazar online? Majesco añade nuevas posibilidades para el aspecto multijugador, entre las que destaca precisamente la posibilidad de conectar ambas versiones entre sí indistintamente de si se trata de la versión física o de la digital. A esto se le añade una interfaz más trabajada, nuevos modos online y alguna que otra sorpresa con la que se aporta más variedad al panorama que conocemos desde hace ya bastantes años.
Siguiendo los pasos del modo Escalada, el denominado Sombra' propone un estilo en el que el jugador ha de utilizar la razón para decidir qué bloque colocar en cada fragmento del mapa, de tal forma que sea posible construir una determinada figura geométrica. Ambas modalidades ofrecen un punto de vista poco habitual en la franquicia, destinado a aquellos jugadores que desean un reto que exija analizar la situación, pensar y tomar las cosas con calma antes que el frenesí al que nos somete el juego en la segunda tanda de novedades que pasamos a presentar a continuación. En ellas es menester hacer acopio de los reflejos para solucionar distintos retos de habilidad que poco o nada recuerdan al estilo predeterminado que los jugadores suelen relacionar con Tetris en primera instancia.
Precisamente este hecho ofrece un soplo de aire fresco al conjunto que ofrece el juego, en tanto los modos BomBliss y Stage Racer no sólo fomentan -en el caso del primero- el juego competitivo, sino también el buen manejo de los tetriminos (nombre que reciben las piezas que componen el universo de Tetris). Stage Racer propone superar todas clase de escenarios abriéndonos paso a través de pequeños huecos para recaer en la base de cada mapa, 400 líneas más tarde. La aparente sencillez de estos nuevos modos de juego esconde una verdad mucho más gratificante de lo que aparenta a primera vista, dado que a medida que transcurren los niveles aumenta el nivel de dificultad. Cada vez resulta más difícil superar los obstáculos a los que nos enfrentamos, o elegir correctamente qué bomba lanzar en el mapa para hacer desaparecer una hilera de tetriminos sin destrozar la estructura que tanto nos ha costado construir.
Pese a que los modos aquí descritos componen la base de Tetris Party Deluxe en cuanto a novedades significativas se refiere, Majesco no ha querido perder la oportunidad de añadir un nuevo periférico que de paso ofrezca algo totalmente nuevo respecto a lo que hasta ahora se había diseñado en anteriores itinerancias de Tetris. Esta novedad de la que hablamos pasa por el uso de la Tabla de Precisión o Balance Board para mover de izquierda a derecha los bloques que aparecen en pantalla, siempre con el objetivo de completar líneas para obtener puntos y de esta manera alcanzar una puntuación excelsa. Pese a que valoramos la necesidad de añadir alguna novedad propiamente dicha a la fórmula de Pajitnov, a la hora de la verdad el uso del Balance Board es incómodo y antinatural. Aunque esta premisa varía en función del jugador, lo cierto es que no parece viable que el cuerpo sea quien determine con sus movimientos en qué lugar ha de caer el tetrimino de turno.
Para más inri, este es el único modo de juego que no se puede disfrutar en compañía de varios amigos, ya sea haciendo uso de la CPU o de otros jugadores. No se trata de un hándicap de peso, pero desentona completamente respecto al planteamiento que se ha seguido como base para el juego. Básicamente todos los modos de juego amplían sus miras cuando disfrutamos de ellos en modo competitivo o incluso en el cooperativo, en el que resulta indispensable que exista cierto entendimiento entre nuestros pensamientos y los del resto de compañeros. La base de Tetris es la idónea para que jugadores de cualquier edad o conocimiento en la materia puedan pasar un rato agradable a los mandos de la consola -dominar el control es cuestión de echar unas cuantas partidas-.
Los modos multijugador se complementan con la aparición del clásico estilo Batalla, que ahora se complementa gracias a la inclusión del denominado Modo Dual', en el que se amplían las miras del versus entre dos jugadores con power-ups y toda clase de utensilios secundarios que ofrecen más variedad si cabe a la premisa básica de la franquicia. Con este panorama resulta complicado entender por qué todo el trabajo que se ha volcado sobre el multijugador no se ve reflejado en la Infraestructura Online. Este problema se convierte en una de las carencias más alarmantes de un producto que supuestamente debería complementar todo aquello que ofrecía su homónimo en WiiWare. No obstante, Majesco ha optado por ofrecer el modo Batalla con la posibilidad de hacer uso del WiiSpeak durante las partidas para comunicarnos con otros compañeros. El resto de modos de juego desaparece.
Sobre la interfaz, basta con disputar algunas partidas para evidenciar la falta de fondos que aporten algo de variedad a la parte estética, totalmente centrada en los tetriminos y en el Mii que cada usuario haya querido seleccionar como su representante virtual. A la poca variedad de fondos se suma la molesta melodía única' que suena en cada modo de juego. Si a esto se le añade la imposibilidad de añadir nuestras propias melodías o de descargar algo nuevo que aporte algo de variedad a la presentación del juego, cae de maduro que Tetris Party Deluxe no es precisamente un título a tener en cuenta por el buen uso que se le otorga a su parte gráfica. A decir verdad, poca evolución se aprecia respecto al original descargable. Los dos puntos que aquí se exponen, especialmente el segundo, serán irrelevantes para los jugadores que sólo pretenden disfrutar de la jugabilidad pura y dura. En ese sentido, la obra de Majesco sigue la línea a la que Tetris nos tiene acostumbrados.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.