Acción televisiva

El verano Arcade llega a su fin la próxima semana, pero queda desde luego un sabor de boca dulce, no tanto como nos habría gustado o como años anteriores, pero sí satisfactorio. De los juegos que han compuesto esta temporada, sin duda alguna habría que destacar el sobresaliente Limbo. Monday Night Combat no tiene ni su sencillez ni su magia, tampoco su corazón. Pero tiene algo que también puede encontrarse en la aventura en blanco y negro del niño mudo: desde el primer segundo, engancha. Desarrollado por Uber Entertainment y lanzado este mismo miércoles, lo que ofrece es algo tan simple como al final satisfactorio: una fusión de géneros en la que se toca la estrategia en tiempo real al estilo Tower Defense con la acción en tercera persona.

Pero sin duda el mayor mérito de la propuesta de Uber Entertainment es que lo que funciona, lo hace de maravilla. Después de pulsar Start ya se nos condiciona para comenzar a jugar. Un tutorial ameno, cortito y suficientemente claro nos introduce en la mecánica del juego. En otro caso no haría falta, pero aquí, sí. No tanto por la complejidad que encierra su mecánica como por las posibilidades que da de cara a las contiendas. También sorprende la ambientación: un futuro en el que un programa de televisión se ha convertido en el eje en torno al que gira la humanidad. En este marco, que no se desarrolla argumentalmente y que es, por tanto, una excusa para presentar un tipo de unidades u otras, el objetivo es defender una bola repleta de monedas del equipo rival o de robots controlados por la IA.

Jugabilidad
Monday Night Combat es principalmente un juego de acción en tercera persona que recupera la mecánica de los juegos de defender una posición (los 'Tower Defense', como el notable Toy Soldiers) y lo fusiona, dando lugar a un híbrido raro en la teoría pero súmamente válido en la práctica. Desde el tutorial se deja entrever que hay un poco de todo en la mecánica de juego, apostando por cada flanco aunque -al final- sin desarrollarlo al 100% debido a algún pequeño problema aislado. Lo que es evidente es que desde la primera partida es fácil asimilar cómo vamos a jugar y cual es nuestra labor dentro del equipo. Sí, equipo. Porque MNC no sólo es un juego single sino que además se beneficia del modo multijugador del que hablaremos más adelante.

Una vez seleccionada la clase, toca iniciar la partida. Como en todo Tower Defense, la partida está dividida en oleadas de enemigos que se van sucediendo una tras otra, cada X tiempo. Esto quiere decir que no tenemos cierto margen para acabar con la primera oleada antes de que llegue la segunda: si somos lentos, acabarán juntándose oleadas y sencillamente, perderemos la partida. El cómo se gana se basa en un concepto tan simple como 'defiende tu bola de dinero'. Si los enemigos la alcanzan, le harán daño y si la barra de 'vida' del objeto llega a cero… fin de la partida. Las oleadas salen siempre del mismo sitio dependiendo del tipo de partida que hayamos decidido iniciar. De esta forma, por ejemplo jugando en el primer nivel de dificultad (Exposición), habrá que acabar con diez oleadas de enemigos y casi todos saldrán por el mismo sitio.

Esto cambia según la dificultad elegida. Hay un total de cinco y cada una se basa en una velocidad de aparición, o la variante del número de rondas/oleadas: Exposición, Temporada, Desempate, El Barullo y Muerte Súbita. Para enfrentarnos a los enemigos (en su mayor parte, robots) tenemos además de las armas y ciertas habilidades, la posibilidad de crear torretas, otro añadiendo tomado de los Tower Defense. La forma de crearlas es tremendamente sencilla: acercarse a una zona de instalación y darle hacia abajo al pad direccional. Ahí puede elegirse qué tipo queremos (largo alcance, ametralladora…) y estas ayudas pueden subirse hasta tres niveles utilizando el dinero obtenido en la partida. Todo esto puede hacerse en una partida cualquiera, así que ahora sería el momento de entrar a valorar las diferentes modalidades. Monday Night Combat es muy parco en este aspecto, presentando sólo dos: Ataque Intenso y Fuego Cruzado.

El primero nos permite hacer equipo con hasta cinco personas más y enfrentarnos en 6vs6 a través del Xbox Live. El segundo por su parte consiste en una modalidad en la que hasta cuatro personas (tú y tres más) deben acabar con oleadas de enemigos en las cinco dificultades ya mencionadas. Esto está disponible tanto a través del Xbox Live como de forma local a pantalla dividida. Y ya está. Simple, directo y… eterno. Ninguna partida a MNC es igual que la anterior, no sólo motivado por el componente multjugador sino porque habrá que ir improvisando estrategias para poder salir airosos de las situaciones propuestas.

Como ocurría con el Arcade de la semana pasada (Castlevania Harmony of Despair) la experiencia en solitario es muy pobre y en multijugador gana enteros. Pero depende, al menos en un 70%, de que con quien juegues sepa respetar la mecánica de juego y no pierda el tiempo en tonterías. Uber Entertainment ha sabido mezclar en shooter en tercera persona con los Tower Defense, aunque al disfrutarse de verdad sólo en multijugador le pasa factura: la experiencia de juego no es garantía, nunca.
Es un poco complicado jugando en solitario y algo aburrido, así que todo depende de la cooperación. Pese a todo funciona bien, el híbrido es notable aunque le faltó ser integrado en un juego un poco más profundo. Una historia añadida le habría venido bien, por ejemplo.