El Shaddai: Ascension of the Metatron

Estamos ante una adaptación de otra temática religiosa basada en una parte del antiguo testamento. Dios quiere acabar con la humanidad, pero Enoch tiene la opción de salvar a la raza si consigue redimir las almas de los ángeles caídos. Si no, una enorme inundación acabará con la humanidad. El Shaddai es uno de los nombres con los que el judaísmo se refiere a Dios. Metatrón, por su parte, es un arcángel conocido durante un tiempo como Enoch, siendo además el único ángel que fue durante un tiempo humano según las escrituras bíblicas. De todas maneras, la trama del juego de Ignition se basa en el libro de Enoch, uno de los apócrifos más conocidos y estudiados. En medio de todo este embrollo (demonios y lucifer incluidos) que seguramente estará cogido con pinzas y será una mera excusa, nos encontramos un juego de aventuras en tercera persona.

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Este proyecto está encabezado por Ingnition Entertainment, publicadora de diversos títulos como Deadly Premonition, Mercury Meldtown Revolution, Arc Rise Fantasia o Muramasa: the Demon Blade. Algunos de ellos ya con una sensibilidad respecto el apartado artístico, como el último mencionado, destacada. Una prueba de fuego también para ellos, ya que sólo han pisado territorio Playstation 3 y Xbox 360 en una ocasión. Aun así, ya se ganaron la atención de los presentes en la Expo más importante de videojuegos del mundo, por lo que toca ahora cubrir las expectativas generadas. Ángeles, religión, dioses... es una temática tratada sobre todo en proyectos japoneses desde hace muchos años, aunque su mecánica jugable parece que apunte a todo tipo de mercados, incluido occidente.

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Como director del proyecto está, además, Sawaki Takeyasu. El nombre tal vez así de primeras no suene a todo el mundo, pero fue uno de los fundadores del excelso Clover Studios de Capcom. Estuvieron poco tiempo en liza pero dejaron huella: Viewtiful Joe, Okami, God Hand. Takeyasu también era director de arte de este estudio (diseño de personajes en Okami, por ejemplo), algo que sirve para atar cabos sueltos sobre el mimo por un apartado artístico distinto en este nuevo producto. Las similitudes con el mencionado juego de Clover Studios son claras, ya que ambos usan el cel-shading para crear un universo de fantasía, aunque en este caso hay más libertad artística que en la pintura de Okami, como hemos podido ver.

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Técnicamente es difícil no quedarse prendado de productos de estas características. Lo consiguió The Legend of Zelda: the Wind Waker, Ico, también Shadow of The Colossus. Por supuesto, los ya mencionados en el párrafo anterior. Un juego de luces espléndido en medio de cielos y tierra de fantasía, detalles a todos niveles, tanto importantes jugablemente hablando como de acompañantes en nuestra travesía y el uso correcto del cel-shading, ya aceptado como una técnica estilística más a tener en cuenta después de muchas críticas años atrás. Artísticamente tiene pocos fallos, de momento y teniendo en cuenta el desarrollo del juego y todo lo que falta por ver, pero es de esos productos que entra por la vista sin ningún tipo de dudas.

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Pero El Shaddai es un juego de acción en tercera persona. Ya la misma introducción del tráiler que se pudo ver durante el E3, a pesar de todo el contexto dado sobre la inspiración del juego, los personajes sacados de la biblia y demás, se nos da la misión de capturar a las almas de los caídos para salvar el mundo. En esta frase resumimos por lo tanto el quid de la cuestión que nos traerá a acción y más acción.  Eso sí, revestida de diseños de enemigos más que interesantes, con el uso de formas más oscuras para demonios respecto a la puridad, y el blanco, del protagonista y demás efectos técnicos al servicio del juego.

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Lo visto hasta el momento se acerca, a nivel de combate, a lo que podemos esperar de un hack and slash como el propio Bayonetta -producto de ex-Clover también que casualmente ofrece una temática sobre los ángeles. Cierto es que faltará ver el peso que tienen los combates en El Shaddai y si realmente se ha hecho un trabajo profundo a nivel de jugabilidad o queda en un segundo plano. Decimos esto porque de momento se han visto pocos enemigos -no más de un tres contra uno- en el que el protagonista ofrece una serie de golpes sin arma alguna pero también puede hacer uso de la de sus rivales. También se ha detectado una espada que se convierte en látigo similar al de los Castlevania clásicos. La desarrolladora ya ha confirmado que la variedad de armas será un punto a tener en cuenta en el juego, aunque sólo podremos llevar una de ellas, por lo que tendremos que elegir en cada momento.

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Si comentamos que tal vez la acción no sea el punto clave de este juego de Ignition Entertainment, esto se debe a lo que ha mostrado la misma compañía y a las palabras de su director. Hay una clara mezcla de acción con otros toques más aventureros. Muchas zonas sin enemigos y sí con algunos puzzles que resolver para poder seguir avanzando o  la presencia de plataformas constantes. Uno de los detalles a tener en cuenta es que estas son tanto en 3D, como avanza la mayoría de la aventura, o también en 2D, que gracias a desarrollarse en entornos tridimensionales permite efectos realmente conseguidos con elementos tanto delante como detrás del camino estricto que sigue Enoch, el protagonista de esta aventura. Sawaki anunció, sin ir más lejos, que más de la mitad del juego se basaría en la exploración, menos de la mitad iría destinada en los combates y otra parte del juego en estas plataformas de scroll lateral.

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Otro de los detalles a tener en cuenta es la limpieza del HUD -elementos de información en pantalla- en este producto. La intención de Takeyasu es no manchar el espectáculo audiovisual que han querido llevar a cabo, por lo que no tendremos una barra de vida que nos indique cómo estamos. El protagonista, como si de un robot se tratara, tendrá en su aspecto y ropaje los indicadores que permitirán saber en qué situación estamos. Lo mismo, por supuesto, con nuestros enemigos, a los que iremos desarmando y ‘desnudando' de su armadura.

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El Shaddai: Ascension of the Metatron está previsto para Playstation 3 y para Xbox 360, pero su salida no será hasta el próximo 2011. De momento, el primer impacto ya es una pequeña victoria, ya que a nivel artístico y técnico es celestial -nunca mejor dicho- en todos los sentidos. No sólo por la ‘foto', sino porque en movimiento todo fluye, desde las animaciones de los personajes hasta los escenarios, que parecen estar vivos. La mezcla de mecánicas jugables -acción, plataformas, exploración- no es nueva, por lo que faltará ver el ingenio de Ignition Entertainment y si son capaces de hacer un diseño de niveles a la altura de la belleza visual que han puesto encima de la mesa.

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